Raymond Barre seguir¨¢ al frente del Gobierno

A la grav¨ªsima crisis que vivi¨® el mundo pol¨ªtico franc¨¦s los ¨²ltimos tres d¨ªas, el presidente de la Rep¨²blica, Valery Giscard d'Estaing, respondi¨® anoche con una serenidad que produjo asombro y perplejidad. Cort¨® los rumores sobre la dimisi¨®n del primer ministro, Raymond-Barre, anunciando que conducir¨ªa el Gobierno hasta el final de la legislatura. Ratific¨® su estrategia, fundada en el saneamiento econ¨®mico del pa¨ªs y en la uni¨®n necesaria de la mayor¨ªa gubernamental. Y repiti¨® que, llegado el momento, saltar¨¢ a la arena pol¨ªtica del pa¨ªs para decirles a los franceses cu¨¢l ser¨¢ la ?elecci¨®n buena?. El mundo de la pol¨ªtica y la prensa analizaban ayer, de manera distinta, la situaci¨®n de Francia. El presidente, como anunci¨® anteayer despu¨¦s de haber o¨ªdo declamar a los gaullistas, en la Asamblea, ?no creemos ni en el primer ministro, ni en el presidente de la Rep¨²blica?, se dirigi¨® a sus conciudadanos a trav¨¦s de la televisi¨®n. Fiel a su t¨¢ctica de los momentos dif¨ªciles, anoche tambi¨¦n emple¨® la terap¨¦utica de la desdramatizaci¨®n. Como si en el Parlamento no hubiese ocurrido nada los tres ¨²ltimos d¨ªas, analiz¨® tranquilamente el panorama de la mayor¨ªa, recordando que su primer ministro hab¨ªa obtenido el voto de confianza. Por lo dem¨¢s, en lo sucesivo, si los gaullistas desean derribar el Gobierno, tendr¨¢n que unirse a la oposici¨®n ?y esto no puede producirse?, asegur¨® el se?or Giscard. Por lo dicho, el primer ministro actual seguir¨¢ al frente del Gobierno hasta el final de la legislatura.

Un an¨¢lisis tranquilo

El an¨¢lisis del presidente, relativo a los once meses que faltan para las legislativas ?hist¨®ricas?, no fue menos tranquilizante. La mayor¨ªa gubernamental ?puede y debe ganar?, pues, aunque en el momento actual sea inferior, en un 4 o 6%, respecto a la oposici¨®n, el presidente consider¨® que este retraso no era importante. Para superarlo preconiz¨® dos l¨ªneas: insistir en el saneamiento de la econom¨ªa y en la uni¨®n de la coalici¨®n gubernamental. Para que esto ¨²ltimo se produzca, solicit¨® de nuevo un ?entendimiento? de los l¨ªderes de los partidos que sostienen al Gobierno, para designar los candidatos, a las elecciones y para formular un programa basado en las cuestiones esenciales.

Por fin, contestando a quienes le critican su falta de ?soplo? pol¨ªtico (los gaullistas), reiter¨® que intervendr¨ªa en su momento, es decir, a la hora de las legislativas, para indicarles a los franceses cual ser¨¢ el voto que deber¨¢n depositar en las urnas. El presidente termin¨® aludiendo al gaullismo: ?Durante las dos ¨²ltimas semanas el gaullismo lo he visto en Africa, ayudando a los africanos, y no en Par¨ªs ?.

En su alocuci¨®n de trece minutos, Giscard aludi¨® al apoyo de los neogaullistas del RPR, del que acept¨® la calificaci¨®n de ?partido mayoritario de la actual mayor¨ªa?, recordando los votos a favor de la mayor¨ªa de sus miembros en la jornada de ayer; dijo que ?era tambi¨¦n el partido mayoritario de la coalici¨®n en el momento de las presidenciales de 1974.

Comentando el posible ?retroceso de popularidad? del Gobierno en los ¨²ltimos tres a?os, el presidente se refiri¨® a la crisis econ¨®mica internacional ?que afecta a todos los pa¨ªses por igual a nivel pol¨ªtico? y se centr¨® en el ejemplo de Gran Breta?a.

La prensa no opina igual

La prensa francesa de ayer analiz¨® el clima del pa¨ªs a partir de las mismas coordenadas que el presidente, es decir, teniendo en cuenta los efectos de la batalla, giscardismo-chiraquismo, que desarrollo en el Parlamento con motivo del voto de confianza solicitado por el se?or Barre. El conservador Le Figaro, en un editorial de su director, Jean d'Ormesson, dec¨ªa: ?Se abri¨® la crisis. Es una crisis pol¨ªtica, moral, y lo que m¨¢s falta es la confianza?. El independiente Le Monde, en un art¨ªculo que caus¨® impresi¨®n en todos los medios pol¨ªticos, firmado por Raymond Barrillon, sentenci¨®: ?Es el fin de las ilusiones, el crep¨²sculo de un reino; y esto se produce en un clima de desbandada y en el que tambi¨¦n es dif¨ªcil imaginar que se puedan vivir once meses?.