Manuel Machado visto por un ingl¨¦s

Diez a?os despu¨¦s de aparecer la edici¨®n original inglesa de este interesante libro de Gordon Brotherston, publicado por la Cambridge University Press con el t¨ªtulo Manuel Machado. A revaluation, ve la luz esta edici¨®n espa?ola, en traducci¨®n de Nu?o Aguirre de C¨¢rcer, que no carece de errores. Nunca es tarde si la dicha es buena.Cuando apareci¨® la edici¨®n inglesa llam¨¦ la atenci¨®n desde las p¨¢ginas de una revista sobre el inter¨¦s del libro, pregunt¨¢ndo me si alg¨²n editor espa?ol tendr¨ªa la buena idea de publicarlo en nuestro pa¨ªs , haciendo justicia a un gran poeta que por aquellos a?os estaba bastante olvidado. El r¨¢pido engrandecimiento del prestigio de Antonio Machado a ra¨ªz del final de. nuestra guerra civil -la juventud po¨¦tica, y universitaria le vio como ejemplo excelso de poeta moral y comprometido con la causa de la libertad- oscureci¨® el nombre y la obra de Manuel, quien, sobre todo, a partir de su muerte en 1947, fue injusta mente, ignorado por esos mismos j¨®venes, y casi completamente olvidado por la cr¨ªtica. A ello contribuy¨®, sin duda, la es casa calidad de su poes¨ªa de posguerra, en con . traste con la del Manuel Machado anterior, el de los primeros treinta a?os de este siglo, el gran poeta de Alma, de Apolo, de El mal poema, de Ars moriendi, y de tantos otros libros admirables; pero tambi¨¦n, como subraya Brot herston en su libro, ayud¨® a su descr¨¦dito ?el apoyo literario que prest¨® a la cruzada del general Franco?, y sus poemas de exaltado elogio a los generales vencedores y a los ideales del Movimiento Nacional.

El libro de Brotherston es valioso por dos motivos. Nos da en primer lugar los frutos de una seria investigaci¨®n que realiz¨® durante a?os en las bibliotecas y hemerotecas espa?olas, logrando aportaciones biogr¨¢ficas de gran Inter¨¦s. Y a ello a?ade, en la segunda parte del volumen, un detenido estudio sobre el modernismo de Manuel Machado y el influjo que los parnasianos y simbolistas franceses -sobre todo, Verlaine- ejercieron sobre su poes¨ªa, sin olvidar la huella rom¨¢ntica, como es evidente en la atracci¨®n de lo primitivo y de lo ex¨®tico. Creo que acierta Brotherston al ver en el Modernismo no tanto una reacci¨®n contra el romanticismo como contra los excesos ret¨®ricos y quejumbrosos de los rom¨¢nticos decadentes. En cuanto a las influencias, estima m¨¢s importante la de los parnasianos y simbolisias franceses que la de Rub¨¦n Dar¨ªo, aunque no falten en su obra reflejos de las t¨¦cnicas modernistas rubenianas; y se?ala, acertadamente, otra influencia con frecuencia olvidada: la del modernista Villaespesa, quien, ?m¨¢s que ning¨²n otro espa?ol, ense?¨® a Manuel Machado los trucos de los simbolistas?.

Brotherston dedica mucha atenci¨®n en la primera parte de su libro -el estudio biogr¨¢fico a seguir la evoluci¨®n ideol¨®gica y pol¨ªtica- del autor, de Alma, asunto penoso, ya que la conversi¨®n del liberal y republicano Manuel Machado -identifica do en su juventud con su hermano Antonio- en el fervoroso adepto a Movimiento Nacional y cantor de las glorias-franquistas, se produjo en un clima de presi¨®n pol¨ªtico-religiosa -el Burgos de 1936- al que era dif¨ªcil y aun. peligroso resistir, por lo que nos deja algunas dudas sobre su espontaneidad y la sinceridad de su fervor. No es que no creamos en las conversiones, pero algunos gestos del converso Manuel Machado -por ejemplo, los poemas a los generales vencedores- parecen demasiado forzados en un republicano liberal como era, hasta 1936 al menos, el autor de El mal poema. En todo caso, Brotherston tiene raz¨®n cuando afirma que esa traici¨®n a toda su historia liberal anterior no debi¨® hacer olvidar al gran poeta que fue Manuel Machado, no pocos de cuyos poemas, grandes poemas, han pasado con todo derecho a las m¨¢s exigentes antolog¨ªas.