Leivinha, del cero al infinito

El Atl¨¦tico de Madrid no cambiar¨¢ nunca. Realmente parece imposible, si es que lo consigue al final, que pueda ganar un torneo de regularidad. Vuelve a estar en el buen camino aun sin brillantez a falta de tres jornadas, pero a las pruebas hay que remitirse. Aunque el equipo rojiblanco s¨®lo se coloc¨® de l¨ªder en la jornada veintid¨®s, la verdad es que ya hab¨ªa encontrado anteriormente su buen esquema de juego y la expulsi¨®n de Cruyff el d¨ªa del Barcelona- M¨¢laga, que su puso un baj¨®n considerable para los azulgranas, no vino m¨¢s que a colaborar en la racha atl¨¦tica. En efecto, incluida la pol¨¦mica, el triunfo del equipo de Luis en San Mam¨¦s la semana siguiente, le proporcion¨® el liderato. Las diferencias respecto al Barcelona se aumentaron y el camino del t¨ªtulo parec¨ªa expedito.Sin embargo, el mismo once de la buena racha, que no s¨®lo mantuvo la ventaja en la Liga, sino que lleg¨® a las semifinales de la Recopa europea, perdi¨® gas hace varias semanas; los cuatro puntos sobre el Barcelona quedaron reducidos a dos y el Hamburgo tambi¨¦n acab¨® con su carrera europea. Un solo gol marcado en cinco partidos era para volver a pensar de nuevo en el tan tra¨ªdo y llevado ?Pupas?. Dif¨ªcilmente pod¨ªa olvidar el Atl¨¦tico de Madrid su calificativo. Por eso, y para colmo, no result¨® nada extra?o que con Leivinha a principio de temporada no pudiera distanciarse del Barcelona y que la entrada de Bermejo fuera providencial para afianzar el equipo. En cambio, una vez recuperado de su lesi¨®n, el brasile?o fue el domingo una pieza vital para golear al Santander, sin grandes alardes. Un hombre apagado al comienzo de la Liga -del cero- puede ser el del empuj¨®n final hacia el t¨ªtulo -al infinito- Son los contrastes rojiblancos.

Sucede, por lo visto, que si el Atl¨¦tico es as¨ª, el Barcelona es .?asao?. En Atocha, con un, ambiente regionalista de gala, no supo estar a tono con lo que las circunstancias requer¨ªan. Que no se busque ahora la disculpa de lalesi¨®n de Cruyff, porque el cuadro azuIgrana jug¨® mejor en la segunda parte sin su concurso. El problema, el grave problema barcelonista, es que por televisi¨®n dio toda la imagen de no jugarse casi nada en el envite. La Real tocaba un puesto para la Copa de la UEFA de la pr¨®xima temporada, pero el Barcelona, aparte ya de la Copa de Europa, se hubiese acercado al sabroso t¨ªtulo de Liga. Cuando faltan s¨®lo tres jornadas y seis puntos, ni uno m¨¢s ni uno menos, en disputa, no se puede desperdiciar uno alegremente. El Barcelona no gan¨® un punto en Atocha, sino,que lo perdi¨®. En esas ocasiones es donde hay que echar toda la carne en el asador.

Se podr¨ªa argumentar que el camino hasta el final de la Liga es bastante m¨¢s f¨¢cil para el cuadro de Rinus Michels que para el di Luis. El Atl¨¦tico deber¨¢ jugar en Zaragoza ante un equipo mano con el descenso al alcalce de la mano y en el Bernabeu, pon un Madrid que querr¨¢ -el asunto es s¨ª podr¨¢- resarcirse de tan aciaga temporada, aparte de intentar un pen¨²ltimo cartucho para jugar la Copa de la UEFA. En la jornada final, que puede ser dram¨¢tica, los rojiblancos recibir¨¢n al Valencia, otro implicado en futuros compromisos europeos y que tras golear al Sevilla el domingo tambi¨¦n tratar¨¢ de justificar a ¨²ltima hora los dispendios realizados. El Barcelona, en cambio, lo tiene todo mucho m¨¢s f¨¢cil: recibir¨¢ el pr¨®ximo domingo al Espa?ol -lanzado, pero controlable-, viajar¨¢ a Elche -casi salvado- y ser¨¢ tambi¨¦n visitado por el Betis -fastidiado por el M¨¢laga, pero m¨¢s a cubierto del descenso a¨²n que el Elche y quiz¨¢ para esas fechas finales ni con aspiraciones europeas.

De cualquier forma, lo real es que s¨®lo existen seis puntos en juego y no se puede olvidar que la victoria rojiblanca en el Manzanares m¨¢s el empate del Camp Nou, dan una importante ventaja a los madrile?os en caso de empate com¨²n. Es decir, los tres puntos actuales de ventaja son reales e incluidos. El Atl¨¦tico se puede permitir el lujo de empatar en Zaragoza o en el Bernab¨¦u y con ganar al Valencia el 22 de mayo ser¨¢ el campe¨®n. El Barcelona tiene que sacar al Atl¨¦tico de Madrid cuatro puntos como m¨ªnimo. Demasiado en el poco tiempo que queda. Por eso result¨® m¨¢s lamentable el raqu¨ªtico empate de la confraternidad vasco-catalana.