Preocupaci¨®n preferente por el control de los poderes del Estado

De cuatro cap¨ªtulos y una introducci¨®n se compone el programa electoral de la Federaci¨®n de la Democracia Cristiana (FDC), que oficialmente ser¨¢ hecho p¨²blico el pr¨®ximo lunes. El programa puede ser calificado de moderado pero, al mismo tiempo, representa en el contexto actual espa?ol una opci¨®n de cambios realistas y pol¨ªticamente alcanzables.

Tras hacer en la introducci¨®n una presentaci¨®n de la Federaci¨®n de la Democracia Cristiana y explicar por qu¨¦ va la FDC a las elecciones, se aborda en el cap¨ªtulo primero lo que es el proyecto constitucional de esta fuerza pol¨ªtica. Dicho cap¨ªtulo se divide a su vez en dos partes, una de ellas dogm¨¢tica, en la que se anuncian los principios b¨¢sicos de la Constituci¨®n, y otra org¨¢nica, referente a la organizaci¨®n concreta del Estado, a los distintos poderes que lo componen, a las relaciones entre ellos y a su control.

Un tema importante que se aborda en esta parte es el de las nacionalidades dentro del Estado espa?ol. Seg¨²n el programa de la FDC, la distribuci¨®n de competencias entre el Estado y las regiones que lo componen debe hacerse conforme a principios auton¨®micos de solidaridad y de participaci¨®n en los ¨®rganos del Gobierno del Estado. Tambi¨¦n se establece en relaci¨®n con este tema que el conjunto de competencias y poderes correspondientes a cada pa¨ªs o regi¨®n sean fijados en unos estatutos que, en armon¨ªa con el marco provisional establecido por la Constituci¨®n, elaboren sus representantes, aprueben las Cortes y sancionen los respectivos pueblos mediante refer¨¦ndum.

Estado confesionalmente neutral

En esta parte tambi¨¦n se aborda el tema de las relaciones Iglesia-Estado. En este punto, la FDC propugna que el Estado espa?ol ser¨¢ neutral en materia de confesionalidad religiosa, garantizando el libre ejercicio de todas las religiones. Igualmente, el Estado mantendr¨¢ con la Iglesia cat¨®lica y con las dem¨¢s iglesias y confesiones religiosas relaciones amistosas de cooperaci¨®n, siempre dentro del principio de separaci¨®n institucional.

El segundo cap¨ªtulo, dedicado a la econom¨ªa, se centra esencialmente en las medidas econ¨®micas a corto plazo, necesarias para la reconducci¨®n de la econom¨ªa espa?ola y para salir de la actual crisis. Los grandes problemas sociales que preocupan actualmente al pueblo espa?ol se recogen en el tercer cap¨ªtulo del programa. En ¨¦l se enumeran diversos aspectos de la pol¨ªtica social y cultural que, seg¨²n la FDC, son b¨¢sicos, tales como la necesidad de un nuevo modelo de relaciones laborales, la reestructuraci¨®n1 de la Seguridad Social, una nueva pol¨ªtica de sanidad y de protecci¨®n del medio ambiente, urbanismo y vivienda, reordenaci¨®n territorial, nueva pol¨ªtica educativa y cultural y atenci¨®n especial a los sectores especialmente necesitados de reforma, como la juventud y la llamada tercera edad. En este cap¨ªtulo se desarrolla tambi¨¦n la necesidad de reforma en el campo de los derechos c¨ªvicos, de humanizaci¨®n de los c¨®digos y de perfeccionamiento de la democracia participativa en todos los ¨¢mbitos sociales.

Pol¨ªtica exterior

La pol¨ªtica exterior que propugna la FDC se expone en el cuarto cap¨ªtulo del programa, con especial atenci¨®n al tema de la integraci¨®n de Espa?a en la Comunidad Econ¨®mica Europea. En este punto, la FDC considera objetivo perentorio de la pol¨ªtica exterior espa?ola la plena integraci¨®n de Espa?a en Europa, en la creencia de que una Europa unida ser¨¢. un factor global de equilibrio y progreso. En relaci¨®n con EEUU y la URSS, la FDC registra con preocupaci¨®n el mantenimiento de una pol¨ªtica global de bloques ideol¨®gicos y militares contrapuestos.