La vivienda, eje de las reivindicaciones vecinales

Las estad¨ªsticas de los pisos de protecci¨®n oficial no ocupados por sus beneficiarios hacen m¨¢s escandalosa la actual situaci¨®n de estas familias. Seg¨²n el mismo, Ministerio, en Madrid existen unos 1.200 pisos sin ocupar. Por otra parte, se proyecta la construcci¨®n de 10.000 viviendas en los pr¨®ximos tres a?os, que se destinar¨ªan a los casos m¨¢s necesitados. El barrio en que el movimiento vecinal, en este sentido, ha sido m¨¢s acusado, ha sido, el siguiente:

Vallecas

El barrio de Vallecas ha conseguido, recientemente, la unificaci¨®n de los tres planes parciales que afectaban a la zona (Palomeras Sureste, Edificaci¨®n Abierta y pol¨ªgono de San Diego). El tratamiento unitario que Coplaco ha aceptado dar a la zona traer¨¢ consigo el asentamiento definitivo de las familias que viven en el barrio. El punto de este acuerdo que ha provocado la disconformidad de los vecinos es el relativo al pago de nuevas viviendas, ya que al ser consideradas viviendas sociales, los afectados tendr¨¢n que amortizar unas cantidades que no est¨¢n dispuestos a pagar. La propuesta presentada por las entidades ciudadanas de la zona es que los propietarios -algo m¨¢s de 50 %- consigan vivienda por vivienda, mientras que los inquilinos paguen una cantidad que no rebase el 10 % del salario m¨ªnimo.Al margen de la forma de pago de los pisos, otro problema podr¨ªa retrasar el acondicionamiento urbano de Vallecas. En los planes anteriores, ahora suspendidos, se hab¨ªan formado unas juntas mixtas de compensaci¨®n en las que estaban integrados los grandes propietarios del suelo urbano de Vallecas. Con los nuevos proyectos, las juntas desaparecen y son sustituidas por el sistema de expropiaci¨®n, medida que no parece interesar a un 10% de los afectados por el Plan. El Ministerio deber¨¢ arbitrar las f¨®rmulas necesarias para que estos grandes propietarios no obstaculicen la ejecuci¨®n de los planes parciales de Vallecas.

Orcasitas

En la zona de Orcasitas, una de las zonas superpobladas de Madrid, dos barrios tienen graves problemas de vivienda. Orcasur y el Poblado Dirigido llevan largo tiempo visitando y presionando ante el Ministerio, para que la remodelaci¨®n de sus barrios se realice de manera inmediata.El Poblado Dirigido, 3.000 viviendas construidas a principios de la d¨¦cada de los sesenta, empez¨® a resquebrajarse a los catorce a?os de vida. El motivo es que las casas hab¨ªan sido levantadas sobre terreno movedizo y no se hab¨ªa utilizado la cimentaci¨®n adecuada para este tipo de suelo. Tras un largo encierro de m¨¢s de mil vecinos y numerosas entrevistas en el Ministerio, los vecinos han conseguido que les den fechas concretas para la remodelaci¨®n. En un plazo de cuatro a?os, las 3.000 familias contar¨¢n con nuevas viviendas. El punto de discordia es, otra vez, la forma de pago. No se acepta la calificaci¨®n de viviendas sociales en base a que consideran responsable del deterioro del barrio al Organismo de Poblados Dirigidos, por lo que ellos no tienen que pagar ahora los errores de construcci¨®n. Vivienda por vivienda es la propuesta de las familias afectadas.

Los problemas que presenta el barrio de Orcasur, parecen, en principi¨®, subsanados tras las promesas oficiales de realizar un plan parcial en el que los t¨¦cnicos vecinales trabajar¨¢n con la Administraci¨®n. Las 2.154 viviendas de Orcasur fueron construidas hace veinte a?os, con car¨¢cter provisional y con una falta casi total de equipamiento urbano. Despu¨¦s de veinte a?os, los vecinos contin¨²an esperando las nuevas viviendas.

Chabolismo: barrio de Bilbao

Entre los casos de chabolismo que quedan en Madrid, una de las zonas m¨¢s conflictivas es el barrio de Bilbao. Las doscientas familias que all¨ª habitan corren el peligro diario de quedarse bajo los escombros de las chabolas. En el n¨²mero 24 de la calle Ledesma se hundi¨® ayer el techo de una vivienda de menos de treinta metros cuadrados, en la que habitaban siete personas. La necesidad de viviendas habitables para estas familias se est¨¢ estudiando con car¨¢cter urgente en el Ministerio.Las diecisiete viviendas del Ministerio ocupadas en el barrio de La Ventilla, por familias cuyas casas no ofrec¨ªan las m¨ªnimas condiciones de habitabilidad y seguridad, es un hecho que, con car¨¢cter excepcional, ser¨¢ legalizado con la entrega de las llaves y de los contratos a los ocupantes, se ha creado, quiz¨¢, un antecedente a imitar por algunas familias que toman la iniciativa de autoadjudicarse una vivienda social. Tras las declaraciones del delegado provincial de la Vivienda, en el sentido de que ped¨ªa colaboraci¨®n para aclarar qu¨¦ viviendas sociales estaban desocupadas, algunas familias decidieron ocupar pisos vac¨ªos. El se?or Veloso ha declarado que la colaboraci¨®n consiste en denunciar y luego, con la ayuda de las juntas municipales de distrito y de las asociaciones de vecinos, se decidir¨¢ a qui¨¦nes se adjudicar¨¢n los pisos sin ocupar.