Aseada labor de Gabriel de la Casa

Plaza de Carabanchel. Toros de Sep¨²lveda, en general terciados, nobles y sin fuerza, poca casta. Gabriel de la Casa. Vuelta. Oreja. Gabriel Puerta. Aviso y vuelta. Oreja. Macandro. Dos avisos y silencio. Palmas. Se guard¨® un minuto de silencio por Parrita.La primera parte de la corrida fue poco seria en cuanto a la presencia de los toros, con poca fuerza y c¨®modos de cabeza, pero muy seria por parte del presidente, que envi¨® los avisos en su justo momento. Luego, mejorar¨ªa los toros, pero el ben¨¦volo presidente concedi¨® unas orejas baratas, que van en descr¨¦dito de la plaza.Gabriel de la Casa, estuvo toda la tarde muy f¨¢cil y aseado, sobrado de oficio, pero un tanto ventajista, tore¨® al hilo del pit¨®n y a veces con el pico. Al primero le tore¨® bien sobre la derecha y se embarull¨® con la izquierda. Al cuarto, un toro cornal¨®n, le dio una larga de rodillas emocionante. Y luego la faena fue aseada y pulcra, hubo alg¨²n derechazo, alg¨²n natural y unos recortes de calidad, pero a la faena le falt¨® vibraci¨®n.

A Gabriel Puerta le correspondi¨® el mejor lote y, aunque estuvo aseado, no logr¨® sacarle todo el partido que ten¨ªa. Al segundo le hizo una faena templada, mejor sobre la derecha, pero no sac¨® al toro del carril, es decir, no hubo mando. El quinto, arrastraba una mano, Puerta lo mulete¨® con suavidad y cierto temple.

Lo de Macandro, en el tercero, fue un sainete, faena sin quietud, en la que dio infinidad de muletazos, todos malos y en todos la muleta tropezada, sal¨ªa hecha un rebu?o. En el sexto puso voluntad.