Decisiones administrativas contradictorias

El caciquismo es una plaga que asol¨®, tambi¨¦n, Castilla durante estos cuarenta a?os. Actualmente corren vientos nuevos y los caciques cambian sus t¨¢cticas y sus ¨®rdenes tajantes de ayer, por leves insinuaciones hoy. En la provincia de Valladolid tambi¨¦n existen demasiados ejemplares quiz¨¢s, de esta brava especie que ha asolado con su ?ordeno y mando? los campos de nuestra tierra.Haciendo referencia concreta a Valladolid capital, nos encontramos con que las fuerzas vivas: el alcalde se?or Fern¨¢ndez Santamar¨ªa y el presidente de la Diputaci¨®n, se?or Basilio S¨¢ez, apoyan, m¨¢s o menos descaradamente, las candidaturas de Alianza Popular.

Por otra parte, est¨¢ al frente de la regi¨®n militar el general Campano, cuya trayectoria es bien conocida..

El problema de los gobernadores es otra cuesti¨®n, ya que basculan entre su fidelidad al anterior r¨¦gimen apoyando a Alianza Popular, o seguir el nuevo dictado de Mart¨ªn Villa. El gobernador, por citar un ejemplo, prohibi¨® un acto del Instituto Regional Castellano-Leon¨¦s que hab¨ªa invitado a todas las candidaturas que se presentan por la provincia, para que explicaran sus programas, mientras que la secci¨®n salmantina de este Instituto celebr¨® el acto normalmente.

En los pueblos de la provincia, aunque existe inevitablemente este problema de los caciques, hubo una acogida bastante favorable a los partidos de izquierda.

Por otra parte, hay que dictar tambi¨¦n que ha salido un panfleto de algunos p¨¢rrocos en nuestra capital diciendo que no se puede votar a los partidos marxistas y se?alando que para el Senado hay que votar por tres personas concretas. Este panfleto ha sido desautorizado por nuestro arzobispo monse?or Delicado