Se acent¨²an las disensiones en la cristianodemocracia alemana

El jefe del partido cristianodem¨®crata federal y l¨ªder de la fracci¨®n parlamentaria del mismo est¨¢ desolado. Helmut Kohl ha dicho, sin embargo, que, por encima de la oposici¨®n interior suscitada por el partido hermano, los cristianosociales de Strauss ?mantendr¨¢ el camino de ¨¦xitos que caracteriza a la actual oposici¨®n?.Tal camino de ?¨¦xitos? es m¨¢s que dudoso para un amplio sector del partido. Las dos ¨²ltimas semanas de las doce que se ha mantenido reunido el Parlamento federal han sido realmente dram¨¢ticas jara la oposici¨®n conservadora. Los cristianosociales, conservadores a ultranza, ven en la ¨²ltima fase de debates un rotundo fracaso de la l¨ªnea Kohl.

Por si fuese poco, el feudo de la democracia cristiana, el Consejo de las Regiones, o Bundesrat, "ha aprobado la reforma sanitaria y el control de los gastos del hombre de la calle en este sector. Esto quiere decir, seg¨²n Strauss y sus seguidores, que Kohl ha fracasado rotundamente en sus funciones como l¨ªder de la democracia cristiana. El siguiente paso ser¨ªa, y quiz¨¢ lo sea en oto?o, a la vuelta de vacaciones, la sustituci¨®n de Kohl por alguien a¨²n m¨¢s conservador, quiz¨¢ Strauss o Dregger.

Dregger, promesa de la derecha alemana, ha recomendado por su cuenta a sus compa?eros de partido de las regiones de Baja Sacracia cristiana y los liberales han llegado a una especie de coalici¨®n.

Precisamente fue Baja Sajonia, regi¨®n gobernada por la democracia cristiana en uni¨®n con los liberales, la que posibilit¨® la aprobaci¨®n de la reforma sanitaria en el Consejo Federal.

La posici¨®n poco clara de la democracia cristiana respecto de algunos puntos clave lleva a algunas dimisiones sintom¨¢ticas. El CDU rechaz¨® en el Parlamento el presupuesto de defensa, porque quer¨ªa as¨ª mostrar su disconformidad con la ley para la reforma del servicio militar, que inclu¨ªa el servicio civil libre; y el jefe de la Comisi¨®n de Defensa del mismo partido ha presentado su dimisi¨®n para manifestar su disconformidad.

Si los socialdem¨®cratas tienen problemas al tratar de delimitar su izquierda -jusos y ?procomunistas?- la situaci¨®n se repite al tratar de situar los l¨ªmites por la derecha, que ser¨ªa el partido liberal. Este, a su vez, aporta dificultades a la democracia cristiana, a¨²n m¨¢s conservadora, en aquellas regiones en las que el temor a una socialdemocracia desva¨ªda ha llevado a democristianos y liberales a una aproximaci¨®n. El espectro pol¨ªtico burgu¨¦s de la Rep¨²blica Federal de Alemania, carente de grandes personalidades en estos momentos, ha de solucionar, por paradoja, su mayor crisis de identidad desde la guerra.