Dos bombas y manifestaci¨®n violenta en Belfast
La reina Isabel II de Inglaterra inici¨® ayer su visita a Irlanda del Norte en medio de un clima de tensi¨®n y violencia, provocado por el IRA y las fuerzas republicanas cat¨®licas del Ulster. M¨¢s de 3.000 personas participaron en una violenta manifestaci¨®n que intent¨® llevar la protesta de los cat¨®licos por la visita de la soberana al centro de Belfast y en la que resultaron heridos manifestantes y polic¨ªas.
La reina de Inglaterra lleg¨® a Irlanda del Norte para pasar 48 horas en la provincia m¨¢s violenta del Reino Unido. Cuando desembarc¨® en el muelle de Belfast, a bordo del yate Britannia, una bomba explot¨® en Armagh, la zona del sur del Ulster donde el IRA republicano domina la situaci¨®n. Despu¨¦s, cuando visit¨®, con honores brit¨¢nicos, a una serie de personalidades de Irlanda del Norte, otra bomba explot¨® en Belfast, e hiri¨® a seis personas. Poco despu¨¦s, tambi¨¦n en Belfast, el Sinn Fein provisional, la rama pol¨ªtica del IRA, protagoniz¨® una manifestaci¨®n en la que las banderas negras simbolizaron el car¨¢cter que para este sector de la poblaci¨®n del Ulster tiene la Administraci¨®n brit¨¢nica del territorio.En todo momento, la soberana brit¨¢nica viaja rodeada de un impenetrable sistema de seguridad. Al puerto lleg¨® rodeada de destructores, submarinos y helic¨®pteros.
M¨¢s de 32.000 soldados siguen a la reina de Inglaterra en su visita.
Por la ma?ana, en Hillsborough, Isabel II pas¨® revista a unas tropas especiales, creadas cuando la violencia del Ulster en 1969. El regimiento de Defensa de Irlanda del Norte (UDR) es una de las unidades s¨ªmbolo de lo que ha pasado en esta provincia en los ¨²ltimos ocho a?os. Comenz¨® siendo integrada por un 80% de cat¨®licos, ahora todos sus soldados son protestantes, excepto un 4%.
El escenario en el que la reina de Inglaterra fue recibida ayer. por ni?os que junto a las flores llevaban las banderas del Reino Unido es completamente diferente al que presenta la mayor parte del resto de la provincia. Todas las carreteras principales est¨¢n constantemente vigiladas y las 5.000 personas que han tenido o tendr¨¢n acceso a la soberana son objeto de una rigurosa vigilancia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.