Dificultades para la celebraci¨®n de la entrevista Su¨¢rez-Leizaola

La publicidad dada por el PNV a los contactos mantenidos con el se?or Oreja para preparar una entrevista Su¨¢rez-Leizaola ha sentado tan mal en algunos c¨ªrculos gubernamentales que puede peligrar la celebraci¨®n inmediata de este encuentro, al que se le habr¨ªa quitado el car¨¢cter de golpe de efecto que tuvo, por ejemplo, la inesperada presencia de Tarradellas en Madrid.

Los sectores m¨¢s conservadores del sistema no ser¨ªan, por otra parte ajenos a estas dificultades por una cuesti¨®n puramente sem¨¢ntica: se habla de negociaciones del Gobierno vasco y el Gobierno espa?ol tomo si se tratase de dos instituciones de id¨¦ntico rango.

Otra cuesti¨®n que parece haber molestado en las altas instancias de la pol¨ªtica espa?ola es que las informaciones de prensa originadas a ra¨ªz de la nota del PNV hablan de un Su¨¢rez deseoso de entrevistarse con Leizaola, mientras que ¨¦ste se reserva la decisi¨®n de acudir o no a la cita, cuando por cuestiones de nivel jer¨¢rquico se deb¨ªa haber presentado el posible encuentro como un acto de gobierno decidido por Su¨¢rez a instancias de Leizaola.

Pero las dificultades para que la entrevista tenga lugar a corto plazo no proceden exclusivamente de Madrid. Las negociaciones entre los partidos vascos para llegar a un acuerdo interno sobre el proyecto de ley de r¨¦gimen transitorio avanzan con excesiva lentitud y mientras no se obtenga ese consenso en torno a un borrador es impensable que Leizaola pueda solicitar la entrevista con Su¨¢rez.

Por otro lado, las fuerzas vascas ni siquiera han alcanzado todav¨ªa un acuerdo sobre el marco geogr¨¢fico al que debe aplicarse el r¨¦gimen transitorio y esto, en buena l¨®gica, debe ser previo a cualquier negociaci¨®n. Aunque los contactos entre partidos siguen abiertos, cada vez parece m¨¢s evidente la negativa de UCD de Navarra a incorporarse a Euskadi. Y dada la configuraci¨®n de fuerzas en el r¨¦gimen navarro -seis parlamentarios de UCD, dos del PSOE y uno del PNV-, sin su aprobaci¨®n resulta inviable cualquier iniciativa.

Este sistema es el que ha retrasado, hasta ahora, el acuerdo entre partidos para negociar en Madrid un r¨¦gimen transitorio. Las fuerzas mayoritarias de Euskadi siguen dispuestas, sin embargo, a practicar un ¨²ltimo esfuerzo para que Navarra no se descuelgue desde el primer momento, pero en el caso de que esto no se haya logrado para mediados de septiembre, es casi seguro que se iniciar¨¢ una inmediata negociaci¨®n en base al Estatuto de 1936, esto es, con aplicaci¨®n en Alava, Guip¨²zcoa y Vizcaya.

Respeto a las peculiaridades

Para evitar esto, que algunos consideran ya imposible, PNV y PSOE van a extremar en sus respectivos borradores el respeto a las peculiaridades navarras. El esquema confederal podr¨ªa ser aceptable, ya que ninguna decisi¨®n del ¨®rgano de gobierno que se establezca tendr¨ªa validez en las cuatro provincias si no es por consenso de todas ellas. De este modo, quedar¨ªa salvaguardada cada autonom¨ªa y muy en concreto la de Navarra, que es la que preocupa.Incluso a este nivel no parece f¨¢cil el acuerdo con UCD, que est¨¢ dispuesta a jugar la carta de la plena restauraci¨®n foral, pero siempre -con entera independencia de unas provincias y otras. Dicho de otra manera, el fuero en su expresi¨®n original, sin otro lazo que el de Navarra con el del Estado espa?ol.

No hay que olvidar, por ¨²ltimo, los afanes de protagonismo que se manejan dentro de la propia Navarra, cuya Diputaci¨®n aprobaba hace unos d¨ªas, por unanimidad, una moci¨®n -rechazada hace poco m¨¢s de un a?o en el mismo foro- por la que se solicitaba la restauraci¨®n de las Cortes de Navarra.