Una alternativa republicana
?Existe en Espa?a la tendencia a admitir la Monarqu¨ªa. Los pol¨ªticos del r¨¦gimen han establecido una secreta connivencia con la mayor¨ªa de los estados mayores dir¨ªgentes de la Oposici¨®n con el fin de mantener en las catacumbas la alternativa republicana, Pero, pasados los primeros entusiasmos, los unos y los otros ven ahora reaparecer en la calle la bandera de la Rep¨²blica, mientras que la opini¨®n vuelve a interesarse de nuevo. (...)La mayor¨ªa de la Oposici¨®n acepta el esquema propuesto por Santiago Carrillo, seg¨²n el cual, el problema no es el de monarqu¨ªa o rep¨²blica, sino el de dictadura o democracia. Al formular esta tesis se obedece a razones de pragmatismo, de metodolog¨ªa... Pero en el seno de la oposici¨®n de izquierda y las elecciones han demostrado su fuerza, se encuentra latente, dis puesta a manifestarse, una voluntad de consulta popular para decidir, por medio de ury refer¨¦ndum, la forma del Estado. ( ... )
La discusi¨®n de los primeros art¨ªculos de la Constituci¨®n acaba de comenzar. Conciernen precisamente a la definici¨®n de la forma del Estado. El Pa¨ªs escrib¨ªa el 23 de junio: ?Aunque exista una corriente de opini¨®n que aconseje considerar como definitiva la forma del Estado, parece m¨¢s razonable y democr¨¢tico (y esto ser¨ªa una mejor salvaguardia de la instituci¨®n mon¨¢rquica) que los diputados y senadores, por la libertad que les confiere su mandato hagan de este problema el primero de los puntos de la futura Constituci¨®n. Solamente as¨ª podr¨¢ consolidarse verdaderamente la Monarqu¨ªa ... ?
En realidad, la Monarqu¨ªa actual ha nacido de la voluntad del general Franco y de ella sola. (...)
Claro est¨¢, durante estos meses de posfranquismo la Monarqu¨ªa ha sido, seg¨²n la feliz expresi¨®n de Areilza, ?el motor del cambio democr¨¢tico?. Don Juan Carlos de Borb¨®n y el primer ministro, Adolfo Su¨¢rez, han demostrado una enorme capacidad de autocr¨ªtica, que les ha llevado a un reformismo pr¨®ximo al revisionismo. La opini¨®n democr¨¢tica debe estarles agradecida. (...) No podemos estar de acuerdo con El Pa¨ªs cuando ¨¦ste afirma que compete a las Cortes pronunciarse en favor de la Monarqu¨ªa, cuando han sido elegidas sin la participaci¨®n libre de los partidos republicanos que no han sido legalizados hasta despu¨¦s de un mes de las elecciones.
En la situaci¨®n actual s¨®lo ser¨ªa posible una discusi¨®n te¨®rica, como lo ha afirmado el actual presidente de las Cortes, don Fernando Alvarez de Miranda. Su resultado es f¨¢cil de prever. Con la abstenci¨®n ya anunciada del grupo socialista, la mayor¨ªa en favor de la. Monarqu¨ªa estar¨ªa asegurada por el grupo de Centro Democr¨¢tico y de Alianza Popular.?
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