Las herencias de la Danza Nacional de Cuba

El mismo a?o de la subida al poder de Fidel Castro, inicia sus actividades la Danza Nacional de Cuba. Esta adjetivaci¨®n de nacional, suele significar, al menos referida al ballet, explotaci¨®n de lo aut¨®ctono a fin de lograr ?la descolonizaci¨®n Cultural y contribuir al rescate y reencuentro con su propia identidad?, seg¨²n se nos advierte en el programa de mano de la troupe cubana.Lo aut¨®ctono, en este caso, incluye al menos tres tendencias o herencias: la espa?ola, la africana y la criolla y discurre por muy diversas v¨ªas, desde las contradanzas de sal¨®n al son, desde los estribillos de la Ma Teodora a la modernizaci¨®n de los ritmos en el mambo y el chachach¨¢, desde la andalucista guajira al lamento y el danz¨®n, desde el escultorismo baile africano a la feria colorista de las comparsas. Naturalmente, la Danza Nacional de Cuba no se limita a reproducir, sino a crear a partir de..., lo que evidentemente resulta de mayor inter¨¦s, como pudo comprobarse en la Elaboraci¨®n t¨¦cnica, 1976, de, Petterson y Malcom, o en Sulkary, de Rivero, sobre m¨²sica de un ritual yoruba. Por su parte, Leo Brouwer ha preparado un Panorama de la M¨²sica y Danzas Cubanas, 1973, con coreograf¨ªa de V¨ªctor Cu¨¦llar, en el que resumen aire y ritmos, caracter¨ªsticas e influencias del amplio repertorio tradicional cubano.

La formaci¨®n es muy valiosa individualmente y cohesionada en su conjunto, con gran dominio de t¨¦cnica y un algo extraordinariamente vital en lo expresivo. Si durante la primera parte del espect¨¢culo, la malla impone una objetividad que concentra nuestra atenci¨®n en lo puramente danzable, a lo largo de la segunda (todo el ballet de Brouwer) desfilan ante nosotros diversos figurines que llegan a alcanzar su mayor feria colorista en la comparsa final.

Ser¨ªa preciso citar, uno a uno, a todos los componentes de la compa?¨ªa, dada la capacidad de la totalidad del elenco, compuesto por una veintena de bailarines, cuya labor se apoya en un grupo de percusi¨®n, que dirige Jes¨²s P¨¦rez , al que se anade, ocasionalmente, alg¨²n instrumento de afinaci¨®n determinada.

El ¨¦xito m¨¢s entusiasta acompa?¨® la actuaci¨®n del ballet visitante, cuyo programa fue seguido por un p¨²blico que abarrotaba la sala del Centro Cultural de la Villa de Madrid o Centro Col¨®n, como suele ser denominado en favor de una reducci¨®n del t¨ªtulo.