El informe parlamentario coincide con la versi¨®n facilitada, por Jaime Blanco

El paisano incontrolado, vestido de marr¨®n y con pistola, que tuvo un papel relevante, seg¨²n las informaciones publicadas en su d¨ªa sobre el suceso, en los hechos que estuvieron en el origen del incidente ocurrido en Santander entre fuerzas de la Polic¨ªa Armada y el diputado socialista de la citada provincia, Jaime Blanco, es polic¨ªa armado y zapatero de la compa?¨ªa a la que pertenece, seg¨²n se pone de manifiesto en el informe elaborado por la comisi¨®n parlamentaria enviada a investigar los hechos y al que ha tenido acceso Europa Press. El informe, que consta de veinticinco folios, comprende, adem¨¢s de la introducci¨®n y de las conclusiones, otros documentos como las declaraciones de los polic¨ªas armados, testimonios de los testigos presenciales y el informe de las fuerzas de la Polic¨ªa Armada sobre la manifestaci¨®n que origin¨® los hechos. El informe elaborado por la comisi¨®n parlamentaria, formada por los diputados Jos¨¦ Luis Ruiz Navarro (UCD) y Pablo Castellano (PSOE), ha sido elevado a la Mesa del Congreso de Diputados.

Las conclusiones ¨ªntegras del informe sobre el caso Blanco son las siguientes:Primero. El incidente objeto de la comisi¨®n investigadora de la ponencia se produce concretamente cuando el diputado se?or Jaime Blanco, una vez terminada la manifestaci¨®n, observa detr¨¢s de las cristaleras del denominado bar Chile, como un n¨²mero de la Polic¨ªa Armada reduce o golpea a una persona y, ante tal hecho, sale del indicado bar para evitar que sigan produci¨¦ndose estos malos tratos.

Segundo. Los antecedentes que constan en este informe sirven para situar el incidente, pero no constituyen propiamente parte del mismo, ya que el se?or Blanco, al producirse, ignora cu¨¢les son las razones por las cuales es golpeada la persona citada. S¨®lo le consta en este momento que alguien est¨¢ siendo maltratado p¨²blicamente.

Tercero. Concret¨¢ndonos, pues, al aludido incidente, del conjunto de las diligencias de informaciones practicadas y obtenidas, aparecen dos versiones contradictorias de los hechos: la del se?or Blanco, coincidente con la de la mayor¨ªa de los testigos que depusieron, y la de los n¨²meros de la Polic¨ªa Armada que intervinieron, reflejada esta ¨²ltima tanto en sus declaraciones, entregadas a esta ponencia, como en las verificadas ante la comisar¨ªa, recogidas a su vez en el informe del comandante de la unidad.

Cuarto. Ante esta evidente discrepancia, la ponencia ha intentado por todos los medios a su alcance inquirir y averiguar la realidad de los hechos. Para ello, no ha tenido m¨¢s medio que recibir informaci¨®n de los testigos presenciales, ya que ¨¦sta es la ¨²nica fuente directa. Solicit¨®, ya que no ten¨ªa facultades imperativas, la declaraci¨®n de todas las personas que libremente s e prestaron a ello. Del an¨¢lisis de las citadas manifestaciones se pueden resaltar los siguientes aspectos:

A) Hechos mayoritarianiente admitidos

Primero. Que solicitada una manifestaci¨®n pro autonom¨ªa de Cantabria, a celebrar el d¨ªa 27 de agosto del presente a?o, cuyo recorrido part¨ªa de la plaza de Numancia para finalizar ante el edificio de la Diputaci¨®n Provincial, situado a unos veinte metros escasos del cuartel de la Polic¨ªa Armada (calle de Barcelona), fue autorizada por el se?or gobernador civil de la provincia y se desarroll¨® ordenadamente, sin otras incidencias que la existencia de tres banderas republicanas, y la expresi¨®n de frases pronunciadas por algunos sectores al pasar por delante del Gobierno Civil, tales como Menos polic¨ªa, m¨¢s autonom¨ªa y Dimisi¨®n gobernador.

Igualmente, al pasar la mencionada manifestaci¨®n por delante del Banco de Santander, se pronunciaron expresiones como... (en el informe se incluye frase insultante para el se?or Bot¨ªn). En ning¨²n momento hizo acto de presencia fuerza policial uniformada alguna distinta de la municipal, reguladora del tr¨¢fico. Llegada la manifestaci¨®n a la fachada de la Diputaci¨®n Provincial, hizo uso de la palabra el senador se?or Huertas, tras lo cual se disolvi¨® aqu¨¦lla.

Segundo. Un grupo residual, con una bandera republicana ya recogida y cantando canciones pol¨ªticas, intent¨® ser detenido por personas vestidas de paisano a escasa distancia del cuartel de la Polic¨ªa Armada. Estos paisanos llegaron a alcanzar a una persona del referido grupo (don Aurelio Mart¨ªnez) que, despu¨¦s de ser introducido en un portal, fue golpeado. A los gritos de esta persona. se reuni¨® un gran grupo de gente que manifestaron su indignaci¨®n. Ante ello, fue soltado, y las personas que le hab¨ªan agredido se retiraron al cuartel de la Polic¨ªa Armada, momento este en que otro paisano, vestido de marr¨®n, exhibi¨® un arma y, como su tenencia no amedrentaba al grupo de personas que le segu¨ªan, ech¨® a correr protegi¨¦ndose tras un grupo de cinco o seis polic¨ªas armados de uniforme que, habiendo salido del cuartel inmediato, se hallaban en una esquina del edificio de la Diputaci¨®n.

El mencionado hombre de marr¨®n, que ha reconocido ser polic¨ªa armado y, concretamente, zapatero de la compa?¨ªa, orden¨® a sus compa?eros cargar contra sus perseguidores.

Tercero. Estos polic¨ªas de uniforme son los que fueron vistos por el se?or Blanco cuando estaban reduciendo a un ciudadano. Son los que participan en. los hechos, act¨²an como denunciantes, e informan por escrito. Sus n¨²meros de identificaci¨®n del carnet son, 36.704, 40.144 y 42.040, y sus nombres, don Alfonso Mart¨ªn D¨ªaz, don Gregorio G¨®mez Rodr¨ªguez, don Ramiro Rubio Garc¨ªa, y don Jos¨¦ Mart¨ªnez Hern¨¢ndez Herido. Los mencionados n¨²meros de la Polic¨ªa Armada detienen al se?or Blanco agarr¨¢ndole fuertemente y lo llevan al cuartel de su guarnici¨®n. Lo introducen en ¨¦l, le tienen ciertos minutos en el zagu¨¢n, pegado a la pared, para, finalmente meterle en la sala de visitas, de donde sale por la llegada a esta dependencia del comandante del cuerpo.

En dicho zagu¨¢n se halla entre otros, ca¨ªdo como consecuencia de los golpes recibidos, el se?or San Miguel, acompa?ante del se?or Blanco. Tambi¨¦n se encuentra en dicho lugar el zapatero de la unidad, vestido de marr¨®n, que es uno de los que concretamente indican al se?or Blanco que se arrime a la pared y se calle.

Cuarto. El se?or Blanco, una vez fuera del recinto militar, de donde fue autorizado a salir junto a sus otros compa?eros, acude a la comisar¨ªa a denunciar los hechos, en cuyo lugar, ni ¨¦l ni sus acompa?antes son informados de que contra ellos se haya producido denuncia alguna.

B) Hechos sobre los que hay manifiesta contradicci¨®n

Primero. El se?or Blanco actu¨® serenamente al dirigirse al polic¨ªa que golpeaba, exhibiendo su documentaci¨®n y exponiendo su calidad de diputado, sin insultar, agarrar ni violentar a ning¨²n agente. Frente a la tesis mantenida por los n¨²meros de la Polic¨ªa Armada de que no se identific¨®, s¨ª les insult¨®, y agarr¨® a uno de ellos por la camisa.

Segundo. Que al ser conducido al cuartel fue insultado y golpeado el se?or Blanco, frente a la versi¨®n de que era dicho se?or diputado quien insultaba a los agentes e incitaba a las personas que se hab¨ªan congregado a que les agredieran.

Tercero. Que en la entrada del cuartel de la Polic¨ªa Armada, y durante el tiempo que permaneci¨® en el mismo, insisti¨® el se?or Blanco en su cualidad de parlamentario, recibiendo de la polic¨ªa que all¨ª se encontraba insuItos y menosprecios, frente a la versi¨®n de que all¨ª el se?or Blanco continuaba en su actitud irrespetuosa, que oblig¨® a introducirle en otra habitaci¨®n.

Cuarto. Que la ¨²nica denuncia presentada en la comisar¨ªa lo fue por el se?or Blanco y otras personas, frente a la noticia posterior de que se hab¨ªa presentado una denuncia, con anterioridad a la del se?or Blanco, por los agentes de la Polic¨ªa Armada.

Quinto. Que el zapatero -Polic¨ªa- vestido de paisano, con una camisa de color marr¨®n, particip¨® en la paliza suministrada a un ciudadano, exhibiendo una pistola y refugi¨¢ndose en el cuartel, donde continu¨® en el ejercicio de su autoridad, frente a la versi¨®n de su pac¨ªfico acceso a ¨¦ste, aunque fuera armado y vistiera como la persona, quien muchos dan la cualidad de elemento provocador de terminante.

C) Hechos que estima como indubitativos esta ponencia

1. Que terminada la manifestaci¨®n, un cierto n¨²mero de unos cinco polic¨ªas armados, de uniforme, est¨¢n ?reduciendo y golpean do a una persona ca¨ªda en el suelo ?.

2. Que, ante esta circunstancia, el diputado se?or Blanco, sin conocer los motivos de tal actuaci¨®n por la Polic¨ªa Armada, y s¨®lo teniendo en cuenta la forma en que ¨¦sta se produc¨ªa, sale del bar Chile donde se encontraba con las personas ya relatadas, al objeto de evitar tal acci¨®n.

3. Que dirigi¨¦ndose al agente de la Polic¨ªa Armada (no se puede asegurar con evidencia el tono de su voz, aunque la mayor¨ªa de los testigos aseguran que fue correcto) se da a conocer como diputado del PSOE por la provincia de Santander.

4. El se?or Blanco es cogido por los brazos, por dos agentes de la Polic¨ªa Armada y, al intentar desasirse de ellos, es golpeado por un tercero en la regi¨®n occipital.

5. Que el se?or Blanco es conducido a la fuerza por los mencionados polic¨ªas armados al cuartel de dicho Instituto, que se encuentra situado a unos veinte metros.

6. Que el se?or Blanco, al entrar en el aludido cuartel, se vuelve a identificar como diputado.

7. Que ya dentro del cuartel, junto a otras personas, una de las cuales se encuentra echada en el suelo es obligado a colocarse junto a la pared del zagu¨¢n, sin permit¨ªrsele variar esta posici¨®n hasta que es introducido en una sala de visitas.

8. Que el comandante de la compa?¨ªa es informado de la cualidad de diputado del detenido, se?or Blanco.

9. Que dicho comandante se pone en contacto telef¨®nico con el se?or gobernador civil de la provincia para informarle de este hecho concreto.

10. Que el se?or gobernador, al tener conocimiento por primera vez de ¨¦l, ordena al comandante de la fuerza armada poner en inmediata libertad al diputado se?or Blanco.

11. que transcurridos unos minutos de haber recibido esta orden, el mencionado comandante se entrevista con el se?or Blanco para hacerle saber que puede marcharse.

12. Que el se?or Blanco sale del cuartel de la Polic¨ªa Armada y se dirige directamente, junto a otras personas, a formular la denuncia a la comisaria sita en el mismo edificio del Gobierno Civil.

13. Que ni el presidente de las Cortes, ni el del Congreso de los Diputados, han tenido notificaci¨®n oficial alguna por parte de las autoridades conocedoras de los hechos objetos de esta ponencia.

Cuanto antecede lo elevamos, dentro del plazo que se nos ha concedido, a la Mesa del Congreso de Diputados para que ¨¦sta proceda en la forma que considere ajustada. y conveniente. Madrid, 2 de septiembre de 1977. Firmado: Jos¨¦ Luis Ruiz Navarro, Pablo Castellano Carralieguet.?