Derrotada la moci¨®n socialista sobre el cese de Mart¨ªn Villa

Viene de primera p¨¢ginaPor lo dem¨¢s, fue un discurso en el que Felipe Gonz¨¢lez exigi¨® mucho al Gobierno, pero en el que no neg¨® la colaboraci¨®n de su partido a la labor de consolidaci¨®n de la democracia en Espa?a. El discurso fue escuchado con respecto y premiado al final con un aplauso por la mayor¨ªa de los diputados de la izquierda. UCD y Alianza Popular no aplaudieron.

Le lleg¨® el turno al partido gubernamental, en nombre del cual habl¨® en primer lugar, Jos¨¦ Pedro P¨¦rez Llorca. Su intervenci¨®n, como la que despu¨¦s sigui¨® de Alfonso Guerra por el PSOE, fue agresiva y dura. El se?or P¨¦rez Lorca quiso ofrecer, contra la afirmaci¨®n de Felipe Gonz¨¢lez de que nada hab¨ªa cambiado, la prueba de las palabras pronunciadas por el primer secretario del PSOE, y esto provoc¨® risa entre los diputados socialistas.

El diputado centrista present¨® la moci¨®n del PSOE como un intento de obstruir la marcha del Parlamento hacia una instituci¨®n ¨²til, y reproch¨® que el PSOF no hubiera planteado ternas m¨¢s candentes como el paro, los precios, la ense?anza, la agricultura, etc¨¦tera. Esto le vali¨® una nueva bronca y el presidente del Congreso hubo de ampararle en su derecho de hablar sin ser interrumpido.

Insisti¨® el se?or P¨¦rez Llorca en sus ataques al PSOE, a cuyo grupo parlamentario atribuy¨® deseo de superar su irrelevancia -casi un rugido socialista fue la respuesta desde los esca?os- y pretensiones de patentes democr¨¢ticas. Imput¨® a los socialistas haber hecho cuesti¨®n de gabinete sobre la presencia de un profesor de Derecho Pol¨ªtico en una ponencia consiltucional. Parec¨ªa referirse al l¨ªder del PSP Enrique Tierno.

La apoteosis final se produjo cuando ley¨® un p¨¢rrafo de las re soluciones del congreso del PSOE criticando el intento de compatibilizar la democracia con la movilizaci¨®n de masas y ?un marxismo leninismo de Assimil?. Los diputa dos del PSOE premiaron con un aplauso al parlamentario ucedista, no se sabe si ratificando ante el Parlamento su propia resoluci¨®n por ¨¦l le¨ªda o como actitud ir¨®nica.

El se?or P¨¦rez Llorca jug¨® final mente con las palabras inmunidade impunidad, rechazando esta ¨²ltima. El aplauso de UCD -muy corto por parte de Su¨¢rez- premi¨® el discurso.

La ?guerra? de Alfonso Guerra

Alfonso Guerra cerr¨® el turno del PSOE replicando a la agresividad de P¨¦rez Llorca y reconduciendo el debate hacia la dimisi¨®n del se?or Mart¨ªn Villa. Dijo que el PSOE tiene ideolog¨ªa. cosa que no le ocurre a otros. Manifest¨® que si el PSOE no ha planteado otros temas hasta ahora, ha sido porque el Gobierno todav¨ªa no ha expuesto su programa al Parlamento. Acus¨® de falta a la verdad la afirmaci¨®n de que todo ha cambiado, y refut¨® las argumentuciones del ministro del Interior y del gobernador civil en defensa de sus posiciones respectivas.

Dirigi¨¦ndose de forma indudable al ministro del Interior, le acus¨® de ser el s¨ªmbolo del franquismo y del tr¨¢nsito de la dictadura, as¨ª corno le pregunt¨® si no ser¨ªa ¨¦l quien controlar¨ªa a los incontrolados, aludiendo al polic¨ªa-zapatero vestido de marr¨®n que intervino en los sucesos de Santander.

Sobre la afirmaci¨®n del ministro de Relaciones con las Cortes de que la inmunidad parlamentaria no puede ser una patente de corso se?al¨® que si aqu¨ª hay alg¨²n corsar¨ªo es el se?or Camu?as. Por ¨²ltimo, el se?or Guerra se pregunt¨® si existir¨ªa solidaridad en todo el Gobierno con el se?or Mart¨ªn Villa, y concretamente por parte de los se?ores Fern¨¢ndez Ord¨®?ez y Garr¨ªgues Walker, y record¨® que algunos diputados de UCD estuvieron enfrentados a la dictadura. Termin¨® indicando al se?or Mart¨ªn Villa -no sin antes recibir un aviso del presidente del Congreso porque se estaba pasando del tiempo se?alado- que si quer¨ªa la democracia, presentara su dimisi¨®n.

Rumores de distinto signo acogieron este final y no se produjeron aplausos desde ninguna zona del hemiciclo.

Sigui¨® la intervenci¨®n del diputado de UCD se?or Mart¨ªn Oviedo -todav¨ªa sobre la primera de las mociones presentadas-, quien se opuso al prop¨®sito de trascendentalizar el tema Blanco pretendido por el PSOE, entre otras razones porque el voto de censura no es defendible hasta que no lo establezca la Constituci¨®n y lo regule el reglamento. Los diputados de UCD aplaudieron a su compa?ero.

Camu?as replica

Por alusiones, intervino seguidamente el ministro de Relaciones con las Cortes, Ignacio Camu?as, con su peculiar estilo familiar, pero reiterando que la intervenci¨®n de Jaime Blanco fue una imprudencia...AIgunos diputados de UCD no parec¨ªan muy satisfechos con, las palabras del ministro, quien continu¨® hablando sobre el intento de Alfonso Guerra de dividir a UCD y al Gobierno. El presidente del Congreso le record¨® que no deb¨ªa salirse de la intervenci¨®n por alusiones, pero el se?or Camu?as insisti¨® en decir -y lo dijo- que el Gobierno es de UCD y s¨®lo de UCD y que quiere enterrar los cuarenta a?os anteriores y mirar al futuro.

Ir¨®nicamente, los diputados del PSOE aplaudieron al se?or Camu?as, quien sin tal vez pretenderlo sirvi¨® en bandeja al l¨ªder de Alianza Popular, Manuel Fraga -quien intervino seguidamente en defensa de la moci¨®n de su partido- la elevaci¨®n del tono parlamentario en que se hab¨ªa ca¨ªdo.

Fraga defiende a las fuerzas de orden p¨²blico

El se?or Fraga consumi¨® uno de los turnos a favor para decir, entre otras cosas, que ?nuestro grupo entiende que si algo debe reprocharse al Gobierno o al ministro del Interior no es exceso de celo, sino todo lo contrario?. Afirm¨® que en el orden p¨²blico el pa¨ªs va por un camino de degradaci¨®n creciente y en alguna provincia del Norte la pasividad de las autoridades ha llegado a l¨ªmites incre¨ªbles, ajuicio del portavoz de Alianza Popular. Asimismo indic¨® que, con independencia del l¨®gico respeto a la inmunidad parlamentaria, los diputados no deben meterse a bomberos o vigilantes de la buena marcha de las manifestaciones.

Dado que no hubo ninguna intervenci¨®n en contra de la moci¨®n de Alianza Popular, se pas¨® a estudiar la presentada por Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico. A favor de la misma intervino el se?or S¨¢nchez Ter¨¢n, quien resalt¨® las diferencias entre lo que ocurre en manifestaciones responsables y legales -a este respecto cit¨® la Diada de Catalu?a- y los incidentes a que dan lugar a veces otros grupos despu¨¦s determinadas aqu¨¦llas. Asimismo asegur¨® que no puede achacarse al Gobierno el hecho de no haber modificado el reglamento de la polic¨ªa cuando el Gobierno est¨¢ esperando a que la C¨¢mara se dote de reglamento y comience a funcionar.

G¨®mez Llorente: democracia vencer¨¢

El vicepresidente segundo del Congreso, Luis G¨®mez Llorente, descendi¨® de su tribuna para consumir un turno en contra je la moci¨®n presentada por Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico en nombre de su partido, el PSOE.

El se?or G¨®mez Llorente destac¨® la mesura y contenci¨®n observa das por el grupo socialista, despu¨¦s de cuarenta a?os de exclusi¨®n del Parlamento por la violencia, y al cual han vuelto gracias a los votos populares. Inform¨® asimismo de que el d¨ªa anterior no hab¨ªa podido reanudarse la sesi¨®n plenaria por un largu¨ªsimo debate en la junta de portavoces, motivado por el he cho de que la Uni¨®n de Centro De mocr¨¢tico no quer¨ªa que se admitiesen a tr¨¢mite todas las mociones.

Para el se?or G¨®mez Llorente ya se ha producido una victoria de la democracia por el hecho de haber sido aceptadas todas las mociones a debate. ?Esta C¨¢mara abdicar¨ªa de su dignidad si aceptara que el Gobierno no va a hacerse responsable hasta que sea promulgada la nueva Constituci¨®n?, dijo. Igualmente, calific¨® de ?gran ficci¨®n? el hecho de haber intentado enfrentar a las fuerzas de orden p¨²blico con la C¨¢mara. ?Aquellos que hablamos de democracia -dijo- tenemos que ser especialmente cuidados, porque tambi¨¦n los agentes de orden p¨²blico son sus garantes.? Igualmente mencion¨® a los miles y miles de agentes de orden p¨²blico que cumplen digna y eficazmente con su tarea, y afirm¨® que con independencia del resultado de las votaciones, esperaba que este debate sirviera de solemne advertencia al Gobierno de que no puede continuar falseando los hechos como lo ha venido haciendo hasta ahora, y en este sentido cit¨® las notas publicadas por el gobernador civil de Santander, en torno al problema ocurrido al diputado Jaime Blanco. Finalmente asegur¨®: ?No estamos haciendo nada disolvente, sino, por el contrario, muy constructivo para la democracia: que el pueblo sepa que en este sal¨®n alguien est¨¢ interpretando y diciendo lo que muchos espa?oles quisieran decir, y eso es Imprescindible para que el pueblo se encuentre realmente representado aqu¨ª en el Congreso. ? Modesto Fraile consumi¨® a continuaci¨®n un nuevo turno a favor de la propuesta de UCD, y seguidamente se puso a debate la del grupo mixto, defendida por el se?or Tierno Galv¨¢n. Aclar¨® que deseaba que su moci¨®n fuera transmitida a la Comisi¨®n Permanente, para que las propuestas contenidas en ella se estudien por la misma. Y tras calificar de sor prendente el acuerdo de la ponen cia constitucional sobre el silencio patri¨®tico a observar en torno a sus trabajos, asegur¨® que el pueblo es pa?ol se siente cada vez menos fi gado a lo que sucede en las Cortes. Dijo que la pol¨ªtica espa?ola no deb¨ªa ser de los pol¨ªticos, sino de los estadistas. Explic¨® que el pol¨ªtico lucha por la fracci¨®n y ve el presente , pero no el futuro, y carece de plan global para que los incidentes de cada d¨ªa tengan sentido.

Seguidamente, el grupo socialista de Catalu?a, antes de retirar por su identidad con la del PSOE, defendi¨® su correspondiente moci¨®n a trav¨¦s de una intervenci¨®n de Francisco Ramos, a la que contest¨® por Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico el se?or P¨¦rez Llorca. Este ¨²ltimo precis¨® que la UCD reconoce capacidad constituyente al Congreso y al Senado, con el posterior refrendo del pueblo; lo que no reconoce es un acto constituyente continuo por parte de la C¨¢mara, y agreg¨®: ?No al r¨¦gimen asambleario.?

Carrillo, socarr¨®n y humorista

A continuaci¨®n, Santiago Carrillo defendi¨® la moci¨®n presentada por el grupo comunista. Tras aclarar que los diputados no hab¨ªan venido al Congreso para hacer un proceso a las fuerzas de orden p¨²blico, hizo una distinci¨®n entre el conjunto de las mismas, que son tambi¨¦n hijos del pueblo y extra¨ªdos de las capas m¨¢s modestas, y ciertos grupos especiales m¨¢s Interesados en el servicio al r¨¦gimen pasado que a la naciente democracia.

Despu¨¦s mir¨® al banco azul -donde se sientan los miembros del Gobierno- y pregunt¨®: ??Por qu¨¦ os resist¨ªs a dar una amnist¨ªa completa?? ??Por qu¨¦ os resist¨ªs a dar una soluci¨®n al problema vasco?? ??Por qu¨¦, cuando hab¨¦is abordado el tema de Catalu?a, hab¨¦is mezclado a presidentes de diputaciones nombrados al estilo franquista con los representantes elegidos por el pueblo??

Santiago Carrillo afirm¨® que su grupo no propon¨ªa una crisis, ni siquiera ped¨ªa la marcha de, se?or Mart¨ªn Villa, ?aunque ser¨ªa dif¨ªcil encontrar otro ministro del Interior peor que Mart¨ªn Villa.?. La ocurrencia del l¨ªder comunista, dicha con socarroner¨ªa y humor, origino sonrisas en el banco azul, incluso en el rostro del aludido. El se?or Carrillo se creci¨®, y como si lo pensara mejor, mirando al amplio abanico de los diputados de UCD, a?adi¨®: ?Bueno, tal vez s¨ª se pueda encontrar otro peor en UCD.?

Tras aludir a la necesidad de la aprobaci¨®n del Reglamento y la Constituci¨®n -aunque haya que meter en un convento a los miembros de las respectivas Comisiones, hasta que los aprueben-, Santiago Carrillo finaliz¨® con sus conocidas tesis favorables al Gobierno de concentraci¨®n, y pidi¨® a los diputados de UCD que lo comprendieran, ?y tambi¨¦n a los compa?eros del PSOE?.

Fernando Benzo (UCD) -tras consultar con Su¨¢rez- renunci¨® a su turno contra la moci¨®n comunista. Por la minor¨ªa vasco-catalana Xavier Arzallus afirm¨® el deseo de afrontar problemas de fondo, y por UCD, Salvador S¨¢nchez Ter¨¢n manifest¨® su identidad con e prop¨®sito expresado de adelanta los trabajos parlamentarios. En nombre de la minor¨ªa Vasco-catalana, I?igo Aguirre retir¨® la moci¨®n, conviert¨ª¨¦ndola en comunicaci¨®n al Gobierno.

Tambi¨¦n Alianza Popular renunci¨® a que se votara su moci¨®n antes de que el presidente de Congreso concediera un descanso previo a las votaciones.