Numerosos problemas en la aplicaci¨®n del tratado hispano-norteamericano

El pr¨®ximo d¨ªa 30 ser¨¢n revisadas las relaciones pol¨ªticas y militares entre Espa?a y Estados Unidos, en dos reuniones que se mantendr¨¢n casi simult¨¢neamente en Nueva York y Madrid. Las reuniones pondr¨¢n de relieve la existencia de problemas en la aplicaci¨®n del Tratado de Amistad y Cooperaci¨®n entre los dos pa¨ªses, en los que cada parte lleva su tanto de culpa.

La reuni¨®n semestral del consejo hispano-norteamericano tendr¨¢ lugar en Nueva York, a petici¨®n del ministro espa?ol de Asuntos Exteriores, quien en esa fecha se encontrar¨¢ en aquella ciudad con una cargada agenda de trabajo. Por parte norteamericana, presidir¨¢ el secretario de Estado norteamericano, Cyrus Vance. Ambos ir¨¢n acompa?ados por una nutrida delegaci¨®n diplom¨¢tica y militar. En Madrid tendr¨¢ lugar la reuni¨®n del comit¨¦ militar conjunto, presidida por los respectivos jefes de las juntas de jefes de Estado Mayor, generales Brown y Galarza. Estos generales elaborar¨¢n un informe sobre las actividades del comit¨¦ militar conjunto, que ser¨¢ transmitido a Nueva York, para su conocimiento por el Consejo.Los temas de la cooperaci¨®n econ¨®mica en diversos terrenos, la OTAN y las relaciones mutuas as¨ª como la cuesti¨®n de si los autom¨®viles norteamericanos de Rota deben pagar o no licencia de circulaci¨®n, ser¨¢n puestos sobre la mesa.

En el desarrollo de la cooperaci¨®n cient¨ªfica y tecnol¨®gica entre los dos pa¨ªses se han presentado problemas resultantes de la falta de planificaci¨®n de la pol¨ªtica gubernamental en ese terreno. Existe, sin embargo, una comisi¨®n asesora en la Presidencia del Gobierno para esas cuestiones. Por otro lado, se cree saber que la posici¨®n que mantendr¨¢n los representantes espa?oles ser¨¢ la de conseguir el cumplimiento m¨¢s fiel posible del art¨ªculo que prev¨¦ la aportaci¨®n igual y simult¨¢nea de fondos para proyectos tecnol¨®gicos, por parte espa?ola y norteamericana. Los norteamericanos se han mostrado, renuentes al desarrollo de este punto, porque para ellos supondr¨ªa una ampliaci¨®n forzosa de sus inversiones, que en otros campos est¨¢n muy especificadas y son peque?as. Las ayudas cultural, tecnol¨®gica y cient¨ªfica suponen unos seis o siete millones de d¨®lares al a?o. Sin embargo, las autoridades educativas y cient¨ªficas espa?olas han presentado proyectos que supon¨ªan una inversi¨®n de cien millones, con lo que habr¨¢ que dar cortes ?salvajes?.

En la reuni¨®n de Nueva York se presentar¨¢ un informe sobre las actividades del comit¨¦ ?ad hoc? para coordinaci¨®n con la OTAN. Este comit¨¦ ha desarrollado alguna peque?a actividad en el terreno de la informaci¨®n militar. La necesidad de aportar elementos de juicio para el debate pedido por el ministro se?or Oreja, sobre la cuesti¨®n-OTAN, har¨¢, posiblemente, que este comit¨¦ se convierta en la principal fuente de informaci¨®n sobre esa tem¨¢tica.

En Madrid, los dos jefes de las juntas de Estado Mayor se en contrar¨¢n con problemas que afectan al funcionamiento del comit¨¦ militar conjunto, y a la cooperaci¨®n entr¨¦ los dos pa¨ªses. Aunque el comit¨¦ tiene su sede en el edificio del consejo hispano-

norteamericano en Madrid, los que all¨ª trabajan se encuentran con que carecen de elerrien tos de trabajo b¨¢sicos, porque Hacienda a¨²n no ha votado los cr¨¦ditos necesarios.

Por su parte, el teniente general Galarza, probablemente, dar¨¢ a conocer de modo oficial a Estados Unidos que la fuerza a¨¦rea espa?ola no acepta tomar los 34 F-4 E que Estados Unidos se hab¨ªa comprometido a proporcionar en alquiler a Espa?a, por considerarlos viejos e inservibles, y preferir¨¢ continuar con los F-4C de que ahora dispone. Por otro lado, la decisi¨®n espa?ola de tomar la opci¨®n a la compra de 72 F-16, el avi¨®n de caza est¨¢ndar de la OTAN, quedar¨¢ diferida hasta que las Fuerzas Armadas reciban instrucciones del Gobierno sobre si habr¨¢ o no ?objetivo OTAN ? en los pr¨®ximos a?os.