Soussa Franco: "Existe el riesgo de un giro a la derecha"
El peso de la influencia exterior sobre la pol¨ªtica portuguesa es importante y puede, incluso, afectar la, remodelaci¨®n del Gobierno de Mario Soares, actualmente en discusi¨®n y que intenta su supervivencia monopartidista con la entrada en el Gabinete de t¨¦cnicos independientes y el apoyo directo del presidente de la Rep¨²blica. D¨¦ ser inviable esta f¨®rmula por falta de apoyo parlamentario en la Asamblea, el partido m¨¢s proximo de una participaci¨®n en el Gobierno, no lo ser¨¢ sin duda el Partido Social Dem¨®crata que preside Sa Carneiro, y que hasta hace poco se llam¨® Partido Popular Democr¨¢tico. Soussa Franco, uno de los l¨ªderes del nuevo PSD, no descarta esta posibilidad, mientras pide un Gobierno de concentraci¨®n en torno al presidente de la Rep¨²blica.
EL PAIS: ?Giro a la derecha en Portugal?Soussa Franco: La experiencia revolucionana tuvo aspectos positivos y negativos. Hoy conviene estabilizar la situaci¨®n con un Gobierno fuerte que impida los riesgos reales de un caminar, hacia posiciones conservadoras que, sin alcanzar las cotas de los a?os cuarenta, Instalen un sistema conservador liberal con la preponderancia de los medios financieros. Este riesgo aumenta ante la falta de eficacia de las instituciones, de la Administraci¨®n P¨²blica y de la propia gesti¨®n del Gobierno.
EL PAIS: ?El giro a la derecha constituye una violaci¨®n de la Constituci¨®n y de su objetivo de construir una democracia socialista?
S. F.: El presidente de la Rep¨²blica, el Consejo de la Revoluci¨®n y la Asamblea son los guardianes de la Constituci¨®n. Pero la Asamblea es y debe ser la int¨¦rprete suprema de la Constituci¨®n como m¨¢ximo exponente de la realidad del pa¨ªs. El Partido Comunista, que hoy se erige en defensor de la Constituci¨®n es, por otra parte, el menos cualificado para interpretarla y defenderla porque ya intent¨® disolver la Asamblea constituyente y porque no vot¨® sus textos esenciales que defendieron el PSD y el PS.
EL PAIS: Y las Fuerzas Armadas, ?no podr¨ªan intervenli de nuevo en defensa de los principios de la Constituci¨®n?
S. F.: Las Fuerzas Armadas tienen la misi¨®n, a trav¨¦s del Consejo de la Revoluci¨®n, de defender la integridad y totalidad de la misma. A quienes hoy intentan darle otros Poderes o iniciativas a las Fuerzas Armadas, cabe recordar, tambi¨¦n, que existe la p¨®sibilidad de una intervenci¨®n hacia posiciones conservadoras y de derechas de las Fuerzas Armadas. La intervenci¨®n del ej¨¦rcito en la vida pol¨ªtica portuguesa es una constante que no s¨®lo fluct¨²a hac¨ªa la izquierda.
EL PAIS: ?No aparece entonces el, presidente de la Rep¨²blica como ¨¢rbitro supremo? No crece el bonapartismo en Portugal?
S. F.: El presidente de la Rep¨²blica es un dem¨®crata y Bonaparte no lo era. Ahora bien, quiz¨¢ no sea negativa una mayor intervenci¨®n del presidente de la Rep¨²blica que, adem¨¢s, es jefe de las Fuerzas Armadas. Esta intervenci¨®n, a nuestro juicio, deber¨ªa prolongarse en la formaci¨®n de un movimiento de concentraci¨®n de fuerzas pol¨ªticas.
De aquellas fuerzas que, con exclusi¨®n del Partido Comunista, apoyaron la elecci¨®n del presidente, el PS, el PSD y la CDS. En ausencia de un Gobierno de concentraci¨®n,
hoy tan necesario para salir de la crisis, crecer¨¢ el poder del presidente en menoscabo del poder del Gobierno y de la propia Asamblea. Ello no influir¨ªa, por otra parte, en las estructuras y formas democr¨¢ticas de Portugal.
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