Renovaci¨®n en la continuidad, resultado del congreso del Partido Comunista de Euskadi
?No ha habido vencedores ni vencidos, sino que ha salido ganador el partido, la clase obrera y todo el conjunto de Euskadi.? Una ovaci¨®n cerrada subray¨® estas palabras de Roberto Lerchundi (vizca¨ªno, treinta a?os, m¨¦dico, antiguo militante de ETA, vascoparlante), pronunciadas ante el tercer congreso del PC de Euskadi, apenas unos instantes despu¨¦s de que se hiciese p¨²blica su, por lo dem¨¢s prevista, elecci¨®n como nuevo secretario general.Su antecesor en el cargo, Ram¨®n Ormaz¨¢bal, elegido presidente del partido, explicaba, no. sin cierta emoci¨®n, que ?era una necesidad de vida renovar la secretar¨ªa general, y lo hemos resuelto de la mejor manera posible?. Tanto el presidente como el secretario general, que se fundieron en un abrazo tras conocerse sus ripmbramientos, han sido elegidos por unanimidad en el seno del Comit¨¦ Central.
Las intervenciones de ambos estuvieron dedicadas a subrayar la continuidad pol¨ªtica del partido por encima de cualquier especulaci¨®n de ruptura, al mismo tiempo que dejaban constancia del car¨¢cter de partido nacional vasco que tiene el PC de Euskadi. Renovaci¨®n en la continuidad podr¨ªa ser, la s¨ªntesis de este congreso, del que Ram¨®n Ormaz¨¢bal, un hombre que resume en su propia biograf¨ªa la vida del partido, manifest¨® que estaba ?satisfecho sin exageraciones?.
La existencia de dos corrientes en el seno del congreso se ha puesto de manifiesto con claridad en los debates acerca del informe pol¨ªtico y el tercer art¨ªculo de los estatutos, si bien al final se ha hecho un esfuerzo particular para que el nuevo Comit¨¦ Central sea una s¨ªntesis de ambas, al mismo tiempo que se buscaba tambi¨¦n un equilibrio de representantes por zonas geogr¨¢ficas y sectores laborales. El comit¨¦ ejecutivo ha renovado tan s¨®lo a tres de sus miembros, encuadrables los tres salientes en lo que ha dado en llamarse corriente nacionalista. Tan s¨®lo seis mujeres figuran entre los 65 miembros del Comit¨¦ Central, y dos entre los veintid¨®s del ejecutivo.
Antes de que se hiciese p¨²blico el escrutinio para la renovaci¨®n de cargos directivos se cedi¨® la tribuna a los. representantes de siete partidos invitados. Ausencias notorias, como las del PNV y PSOE, frente a presencias sorprendentes, como la de UCD, cuyo portavoz subray¨® el respeto entre los dos partidos por encima de cualquier diferencia.
La intervenci¨®n m¨¢s aplaudida, sin duda, fue la del representante de ANV, que, entre otras cosas, reclam¨® el derecho del PC de Euskadi a formar parte del Gobierno vasco como partido fundacional del mismo, excluido por imposiciones de la guerra fr¨ªa en los a?os cuarenta. Dijo que ser¨ªa una injusticia cerrar la ¨²ltima p¨¢gina del Gobierno vasco sin contar con los comunistas en sus filas. Las interveciones de otros partidos de la izquierda destacaron la necesidad de alcanzar una unidad de la clase obrera, mientras que el representante de HASI se quejaba de algunas acusaciones vertidas contra la izquierda abertzale.
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