El Senado no obstaculiz¨® la Reforma Fiscal Urgente
La tendencia de centroizquierda del Gobierno Su¨¢rez obtuvo ayer tarde un notable ¨¦xito en el Senado, en donde, contra todo pron¨®stico, sali¨® adelante el proyecto de ley de Medidas Urgentes de Reforma Fiscal, que contaba con importantes reticencias entre los sectores derechistas de la C¨¢mara Alta, especialmente sensibles entre los del partido gubernamental. Muchos de ¨¦stos estuvieron ausentes durante la votaci¨®n -nominal, a petici¨®n de los socialistas-, que aprob¨® el proyecto de ley por quince votos m¨¢s de los dos tercios necesarios: es decir, obtuvo 180 votos favorables. No hubo votos en contra y s¨®lo diez abstenciones.
La sesi¨®n de la tarde se inici¨® bajo la impresi¨®n de que existir¨ªan problemas para la aprobaci¨®n de la reforma fiscal, y la propia ausencia de senadores as¨ª lo denotaba. No pasaban de 170 los senadores presentes al comenzar la sesi¨®n vespertina, cuando el qu¨®rum requerido exig¨ªa un m¨ªnimo de 165 votos favorables. De ah¨ª que la llegada al Senado, minutos antes de las seis de la tarde, abandonando el Consejo de Ministros, de los cinco miembros del Gobierno que son senadores reales -Enrique Fuentes Quintana, Fernando Abril, Rodolfo Mart¨ªn Villa, Landelino Lavilla y Marcelico Oreja-, se interpretara en los pasillos como un refuerzo gubernamental para contrarrestar las evidentes ausencias de senadores centristas y de designaci¨®n real.La presencia en esos mismos pasillos, poco antes de comenzar la sesi¨®n, de una personalidad del mundo empresarial tan caracterizada como Max Mazim, hab¨ªa suscitado nerviosismo en los sectores socialdem¨®cratas de Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico (UCD) y en el propio Gobierno.
El desarrollo de la sesi¨®n mostr¨® las discrepancias que la reforma fiscal, promovida por Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, suscitaba dentro de su propio partido, UCD, y que eran repetici¨®n aumentada de las que ya se hab¨ªan mostrado en el Congreso de Diputados durante el debate principal sobre el tema. A diferencia de lo que hab¨ªa ocurrido con la ley sobre control parlamentario -que regres¨® intacta al Pleno del Senado-, se tem¨ªa que el rechazo de la reforma fiscal pudiera dar lugar a perfeccionamientos peligrosos en el seno de la Comisi¨®n de Hacienda que pudieran dilatar o deteriorar los efectos pol¨ªticos y fiscales de la reforma pretendida.
El resumen de las principales intervenciones es el siguiente:
Ubaldo Nieto de Alba (UCD): se mostr¨® favorable al proyecto de ley, que significa un primer paso en la reforma profunda que UCD propugna.
Ram¨®n Bajo Fanlo (senador vasco): se declar¨® contrario, no al proyecto de ley en s¨ª, sino a la aprobaci¨®n global, sin aprovechar la oportunidad de perfeccionarlo. Frente a otros impuestos que figuran en el texto a debate, defendi¨® el gravamen del patrimonio improductivo. Con cierto dramatismo, se?al¨® que la publicaci¨®n de las listas de contribuyentes facilitar¨¢ una herramienta de primera mano a los terroristas que vienen exigiendo en el Pa¨ªs Vasco el llamado impuesto revolucionario. Apel¨® a los senadores reales y a los de UCD, y tambi¨¦n a los socialistas, para que perfeccionaran la ley.
Francisco Villodres (UCD): intervino a favor y resalt¨® como m¨¢s importante la infraestructura tributaria que la reforma implanta, as¨ª como la regulaci¨®n del delito fiscal, el control de las sociedades interpuestas y la publicidad de las listas de contribuyentes.
Jaime Ignacio del Burgo (UCD): se opuso a la exigencia de dos meses que se impone a Navarra para armonizar su r¨¦gimen fiscal, basado en el convenio econ¨®mico, a la nueva ley com¨²n. Dijo que ese plazo era contrario a la flexibilidad de una negociaci¨®n y termin¨® recordando una frase hist¨®rica: ?Se obedece, pero no se cumple.?
Francisco Garc¨ªa-Borbolla (PSOE): se expres¨® a favor del proyecto de ley, que contribuye al prop¨®sito socialista de acabar con la explotaci¨®n. Apel¨® a la responsabilidad de todos los senadores elegidos y a la de los designados por el jefe del Estado, que prometi¨® traer la democracia y la justicia.
Juan L¨®pez Martos (PSI): registr¨® la ausencia de senadores en la zona de UCD y se mostr¨® favorable al proyecto, aunque consider¨® que la reforma tributaria es t¨ªmida. Concretamente se?al¨® que no deb¨ªan haberse excluido del impuesto del patrimonio las personas jur¨ªdicas.
Jos¨¦ Subirats (Entesa dels Catalans): anunci¨® el voto favorable de su grupo porque, a partir de la reforma, el sistema fiscal espa?ol podr¨ªa progresar.
Justino Azc¨¢rate (Independientes): anunci¨® tambi¨¦n su voto personal a favor, pero dej¨® en libertad a sus miembros para que votaran en conciencia.
Las diez abstenciones
A propuesta del grupo socialista, al que se unieron los senadores del PSI, la votaci¨®n fue nominal. Entre las ausencias registradas destacan las de algunos senadores de designaci¨®n real y muchos de los de UCD. Como detalle curioso, algunos de estos ¨²ltimos, que se hab¨ªan ausentado de la sala, fueron convencidos por otros de sus compa?eros y a esta labor contribuy¨® tambi¨¦n eficazmente el secretario general de Relaciones con las Cortes, Rafael Arias-Salgado, que asisti¨® a la sesi¨®n desde la tribuna de invitados y trabaj¨® en los pasillos.Antes de que el presidente del Senado, Antonio Font¨¢n, proclamara el resultado de la votaci¨®n, la izquierda de la C¨¢mara hab¨ªa iniciado un aplauso vibrante, que se reprodujo, largo e intenso, despu¨¦s. En el banco azul, Mart¨ªn Villa aplaudi¨® desde el primer momento.
Las diez abstenciones fueron las siguientes: Manuel de Irujo, Javier de Unzueta, Ignacio Oregui y Ram¨®n Bajo (senadores vascos); Gloria Begu¨¦ (Agrupaci¨®n Independiente); Francisco Cacharro, Marcial Gamboa, Bel¨¦n Land¨¢buru y Abel Matutes (Grupo Mixto); y Julio Nieves (UCD). Tres de estos senadores -Gloria Begu¨¦, Bel¨¦n Land¨¢buru y el almirante Gamboa- son de designaci¨®n real.
El portavoz de UCD, Rafael Calvo, explic¨® despu¨¦s de la sesi¨®n el cambio de actitud de su grupo, favorable al proyecto para no demorar una ley muy relacionada con los pactos de la Moncloa.
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