Se intensifican los contactos entre ultraderechistas espa?oles y alemanes
El Ministerio del Interior alem¨¢n se reserva su opini¨®n en torno a la presencia de armamento alem¨¢n en poder de grupos espa?oles de extrema derecha. Seg¨²n una noticia difundida por la agencia de prensa PDI (Servicio de Prensa Iniciativa Democr¨¢tica), est¨¢ suficientemente probada la existencia de una organizaci¨®n internacional, de signo parafascista, dotada con armamento procedente de la Rep¨²blica Federal de Alemania, uno de cuyos planes conocidos fue, hace unos meses, el asesinato del ministro espa?ol del Interior, Mart¨ªn Villa.
En contra de noticias que aseguraban que el Ministerio alem¨¢n del Interior ten¨ªa redactado o a punto de concluir un informe sobre este plan, un portavoz del citado departamento ha manifestado a EL PAIS que este asunto ha quedado clausurado y que no existe novedad alguna al respecto. La agencia PDI confirma a su vez que los cuatro activistas alemanes implicados en el proyecto de atentado contra Mart¨ªn Villa son Josef Werner Trierner, Michael Antosch, Dieter Fritz Pollert y Reinhold Kucher, todos ellos devueltos a la RFA tras una intervenci¨®n del embajador alem¨¢n cesante, George Von Lilienfeld, que abandonar¨¢ su puesto a finales de a?o.Los contactos entre los extremistas de derecha espa?oles y los dirigentes alemanes de la misma orientaci¨®n se han acentuado en los ¨²ltimos meses. Thies Christophersen, presidente de una organizaci¨®n ultra llamada ?Iniciativa de Ciudadanos y Campesinos?, reuni¨® en la pasada primavera en Helgoland a setenta neofascistas procedentes de Francia, Italia y Espa?a para trazar un plan general de acci¨®n destinado al sur de Europa. Christophersen deber¨¢ comparecer pr¨®ximamente ante los tribunales alemanes para responder de acusaciones sobre propaganda antirracista. Entre sus cooperadores m¨¢s cercanos se incluye Gaston Amaoudruz, de Orden Nuevo Europeo.
En cuanto al plan de agresi¨®n contra Mart¨ªn Villa, el diputado socialdem¨®crata Manfred Coppik, que solicit¨® una explicaci¨®n del Gobierno durante una sesi¨®n del Bundestag, no ha recibido hasta ahora otra respuesta oficial que el calificativo de ?vagas suposiciones? respecto a la implicaci¨®n de ciudadanos alemanes en este caso.
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