Texto integro del borrador de la Constituci¨®n

La Monarqu¨ªa espa?ola es hereditaria y en la sucesi¨®n del trono tendr¨¢n preferencia los varones sobre las hembras; el pr¨ªncipe heredero tendr¨¢ la dignidad de Pr¨ªncipe de Asturias; para la configuraci¨®n de una nacionalidad o regi¨®n como territorio aut¨®nomo se exigir¨¢ un m¨ªnimo de poblaci¨®n. Estos son algunos de losaspectos m¨¢s sobresalientes de los 114 nuevos art¨ªculos del borrador de la Constituci¨®n que publicamos hoy en nuestras p¨¢ginas, junto a los 39 que adelantamos anteayer, cedidos por la primera publicaci¨®n que obtuvo el texto ¨ªntegro, la revista Cuadernos para el Di¨¢logo.

En relaci¨®n con la Corona se establece tambi¨¦n que la persona del Rey es inviolable y no est¨¢ sujeta a responsabilidad y que sus actos carecer¨¢n de eficacia sin el refrendo de las personas a quienes corresponda.El Senado se configura como la C¨¢mara de las nacionalidades y regiones que integran Espa?a. El Congreso de Diputados exigir¨¢ responsabilidad pol¨ªtica al Gobierno mediante la aprobaci¨®n, por mayor¨ªa absoluta, de la moci¨®n de censura, que s¨®lo podr¨¢ presentarse si incluye un candidato a la Presidencia del Gobierno.

En el cap¨ªtulo del poder judicial se proh¨ªben los tribunales de excepci¨®n, salvo en los estados de guerra. Se configura un Consejo General del Poder Judicial, que propondr¨¢ al Rey el nombramiento del presidente del Tribunal Supremo. Los jueces y magistrados no podr¨¢n desempe?ar cargos p¨²blicos ni actuar p¨²blicamente como miembros de un partido pol¨ªtico.

La competencia para establecer tributos corresponde exclusivamente al Estado, y las unidades territoriales de autogobierno podr¨¢n establecer y exigir tributos dentro de los l¨ªmites fijados por la ley.Entre las misiones de las Fuerzas Armadas figura la de proteger el ordenamiento constitucional y asimismo, se crea un Tribunal de Garant¨ªas Constitucionales, encaminado fundamentalmente a dirimir las diferencias que se produzcan entre el Estado y las Unidades Territoriales de autogobierno.

La regulaci¨®n del derecho a la autonom¨ªa -que ha sido el tema que ha consumido el m¨¢s largo per¨ªodo de tiempo para encontrar la f¨®rmula de consenso ofrece inconcreciones y ambig¨¹edades, y su contenido se considera poco aceptable por los movimientos auton¨®micos que hoy existen. Esta parece ser la raz¨®n principal, seg¨²n fuentes parlamentarias, de que las fuerzas pol¨ªticas que han colaborado en la redacci¨®n del borrador hayan mostrado su preocupaci¨®n ante la salida a la luz p¨²blica del documento.

Entre las materias competencia exclusiva del Estado central figuran la Defensa y las Fuerzas Armadas, las leyes penales y procesales, la legislaci¨®n b¨¢sica de la Seguridad Social, el orden p¨²blico y la, expedici¨®n de t¨ªtulos acad¨¦micos y profesionales. El Estado podr¨¢ dictar leyes de bases para armonizar las disposiciones normativas regionales, aun en el caso de materias atribuidas a la competencia de ¨¦stas, cuando as¨ª lo exija el inter¨¦s general. Corresponde al Senado la apreciaci¨®n de esta necesidad.

Si un territorio aut¨®nomo no cumpliera las obligaciones que la Constituci¨®n u otra ley estatal le imponga respecto del Estado, el Gobierno, con la aprobaci¨®n del Senado, podr¨¢ adoptar las medidas coercitivas necesarias.

Los votos, particulares y las reservas formuladas por los grupos parlamentarios representados en la ponencia son relativamente escasos y, a juzgar por lo que ayer mismo declar¨® Manuel Fraga, quedar¨¢n muy reducidos en el momento de iniciarse los debates de la comisi¨®n. Las cuestiones m¨¢s conflictivas -a?adi¨®- ser¨¢n reguladas por leyes ordinarias, con objeto de evitar que la Constituci¨®n tenga que reformarse demasiado pronto.

Fuera del estricto ¨¢mbito parlamentario, la reacci¨®n m¨¢s notable al contenido del borrador constitucional ha sido protagonizada por la Iglesia espa?ola y concretamente por la Conferencia Episcopal. Asimismo, el arzobispo de Zaragoza, monse?or El¨ªas Yanes, dijo ayer en el Club Siglo XXI que la Constituci¨®n no deber¨ªa desconocer a la Iglesia cat¨®lica. Dijo tambi¨¦n que los derechos humanos fundamentales no nacen del consentimiento de la mayor¨ªa, sino que es la democracia la que se apoya en ellos -como valores m¨¢s sustantivos- y no sejustifica en s¨ª misma.

La asamblea plenaria del Episcopado Espa?ol ha decidido, por amplia mayor¨ªa, sustituir una declaraci¨®n sobre el texto constitucional, actualmente en elaboraci¨®n, que podr¨ªa ser hecha p¨²blica ma?ana.

P¨¢gina 9 Texto ¨ªntegro en cuadernillo central