Investigaci¨®n en Carabanchel
Cuatro senadores, componentes de la subcomisi¨®n para la investigaci¨®n de la situaci¨®n existente en las prisiones de la regi¨®n centro, visitaron el lunes por la tarde el centro penitenciario de Carabanchel, donde fueron abucheados por los internos, seg¨²n inform¨® Cifra.En primer lugar llegaron los senadores Rogelio Borr¨¢s, socialista autor del reciente informe sobre su visita al penal de Oca?a, del que se hizo eco EL PAIS-; Alejandro Galv¨¢n, de UCD, y Guillermo Luca de Tena, de designaci¨®n real, quienes se dirigieron a la s¨¦ptima galer¨ªa, acompa?ados del director de la c¨¢rcel. Parte de los intemos de sta galer¨ªa, donde se encuentran cerca de 250 reclusos, entre ellos los miembros de los GRAPO, PC (r), FRAP, Copel y otros, recibieron a los senadores con abucheos y gritos de Fascistas, fuera. Seg¨²n las fuentes consultadas por Cifra, esta actitud parti¨® de los miembros de los GRAPO y del PC (r), a los que se unieron los del FRAP y, despu¨¦s, parte de los restantes internos. Un destacado miembro de la Copel, requerido por el senador Rogelio Borr¨¢s para intercambiar impresiones, se neg¨® a ello.
Ante la situaci¨®n anterior, los senadores se retiraron a una sala de la enfermer¨ªa -momento en el que se incorpor¨® a la subcomisi¨®n el senador V¨ªctor Carrascal, de UCD-, donde se entrevistaron con los internos. Los simadores terminaron su visita en el reformatorio de j¨®venes. Uno de ellos cometar¨ªa despu¨¦s que sintieron verda dero miedo f¨ªsico de poder ser tomados como rehenes por los reclusos que les abuchearon.
EL PAIS se puso en contacto con el director general de Instituciones Penitenciarias, Jes¨²s Haddad, quien manifest¨® que no pod¨ªa decir nada sobre la estancia de los senadores en Carabanchel, puesto que en ese momento se encontraba visitando la c¨¢rcel de Oca?a y hablando con los funcionarios y los internos. A la pregunta sobre cu¨¢l era su opini¨®n con respecto al informe del senador Borr¨¢s sobre el penal de Oca?a dijo que, aunque no lo conoc¨ªa, pues es reservado para la comisi¨®n correspondiente del Senado, la situaci¨®n a la que se refer¨ªa ?no es generalizable a todo el penal, sino tan s¨®lo al departamento celular. Ante esto, la situaci¨®n en este momento es mala. Dentro de ocho d¨ªas se corregir¨¢, pues el departamento celular fuedestruido en el ¨²ltimo mot¨ªn, por lo que habr¨¢ un cambio, al menos f¨ªsico. Se han habilitado, dentro del propio departamento celular, varias brigadas o habitaciones de
treinta o cuarenta personas, con cuartos de ba?o nuevos, duchas, luminosidad total y ventilaci¨®n absoluta. Esto por lo que se refiere a la situaci¨®n f¨ªsica de los internos. Otros aspectos trataremos de arreglarlos?.
Preguntado, entonces, sobre si pod¨ªa hablarse de que la Administraci¨®n tuviera intenci¨®n de abordar una reforma penitenciaria- y qu¨¦, en caso afirmativo, c¨®mo se iniciar¨ªa, el director general respondi¨®: ?Puede hablarse de reforma penitenciaria con toda seguridad. Lo que -no puedo es decirle c¨®mo, porque no lo s¨¦. Pero no dude que cuando tengamos una idea clara ustedes ser¨¢n de los primeros en enterarse.?
Jes¨²s Haddad coment¨®, a preguntas de EL PAIS, los sucesos de ayer en las c¨¢rceles de Basauri y Valencia. ?Lo de Basauri -dijo- ha sido un incidente sin importancia: un incendio de dos celdas, tras la quema de un colch¨®n que ardi¨® por ser de gomaespuma. En Valencia la situaci¨®n est¨¢ dominada, pero hay cuantiosos, destrozos. No es cierto que los internos hayan tomado como rehenes a varios funcionarios. Acabo de hablar con el director del establecimiento y no me ha hablado de ello. Han ardido talleres con maquinaria de precisi¨®n, el cine, despachos del equipo t¨¦cnico y la enfermer¨ªa. Nuestro, gran problema es que estamos deseando hacer y nos encontramos en una labor de bomberos. Quiero decir, adem¨¢s, que en el mot¨ªn s¨®lo particip¨® el 50 % de los internos, unos doscientos y pico de un total de 461 reclusos.?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.