Teng Hsiao-ping la alternativa "liberal" en el postmao¨ªsmo

En la veintena de a?os anteriores a 1975 hab¨ªa escalado el poder la guardia pretoriana de Mao: la Polic¨ªa de Seguridad, cuyo ministro, Hua Kuo-feng, de 57 a?os, es hoy presidente del pa¨ªs. Tras ¨¦l hay un cuerpo creado por y para el control, una fina red burocr¨¢tica y polic¨ªaca. Estos ?j¨®venes? (en relaci¨®n con los veteranos que instauraron el r¨¦gimen) fueron apadrinados por la mujer de Mao, su grupo, y sobre todo por Mao mismo.Teng Hsiao-ping es un superviviente de la Larga Marcha, de las purgas mao¨ªstas, de los ataques de los radicales de la ?banda de los cuatro? (de los cinco, contando a Mao). Representa hoy por hoy las tendencias m¨¢s moderadas y ?liberales? de los veteranos, as¨ª como una ¨¦poca premao¨ªsta todav¨ªa marcada m¨¢s por el estilo de Lenin que por el de Stalin, un tiempo en el que la colegialidad, el consenso y la visi¨®n realista y eficaz ten¨ªan cierto sentido. Con el nuevo plan econ¨®mico previsto hasta 1985, Teng invierte las premisas mao¨ªstas, al dar preeminencia al desarrollo industrial, a la especializaci¨®n y coordinaci¨®n, contra la autarqu¨ªa triunfalista del mao¨ªsmo.

Pretende Teng, hoy, estimular la producci¨®n, ganarse el consenso civil, a intelectuales, estudiantes, etc¨¦tera, no miembros del partido, acabar con la resistencia pasiva, la huelga de celo y los disturbios, ello gracias a una moderada liberalizaci¨®n, un giro hacia el Estado de Derecho, para el cual se resucitar¨ªan a los actuales zomb¨ªes de organizaciones estatales y civiles, como la Conferencia Consultiva del Pueblo Chino, las organizaciones populares, los sindicatos, etc¨¦tera, en la antigua l¨ªnea del Frente Unido. Se ofrec¨ªa a la poblaci¨®n un m¨ªnimo de garant¨ªas jur¨ªdicas -otorgando cierta autonom¨ªa al poder judicial-, y un aumento sabiamente dosificado de incentivos econ¨®micos y de incentivos democr¨¢ticos, de los derechos civiles brutalmente eliminados por la Constituci¨®n del Estado-Polic¨ªa de 1975.

En este sentido, Teng es una alternativa y una esperanza para la poblaci¨®n civil. Los acuerdos tomados por el pleno del Comit¨¦ Central, presentados el 26 de febrero a la Asamblea, son un fr¨¢gil par¨¦ntesis en el antagonismo Teng-Hua. Ni la depuraci¨®n, disturbios y enfrentamientos ha terminado, ni el resultado de la lucha entre los partidarios de Teng y el mandarinato gris de la Polic¨ªa de Seguridad est¨¢ cercano ni seguro.

El factor edad juega contra Teng, nacido -se cree- en 1904, y a favor de Hua, nacido, al parecer, en 1919. No hace a?o y medio que Hua Kuo-feng, en los funerales de Mao, trataba a Teng Hsiano-ping de ?contrarrevolucionario?, ?revisionista?, ?usurpador?.

Los logros en libertad, en democraclia, que se hallen en la Constituci¨®n de 1978 hunden sus ra¨ªces en la resistencia activa y pasiva de las gentes, en las v¨ªctimas de la Revoluci¨®n Cultural, en los heridos y muertos del 5 de abril en Tien An-men, en el manifiesto de Li Yi-she. La historia ha puesto en manos de Teng este contencioso y le ofrece un apoyo popular condicionado al respeto que al pueblo se muestre. La situaci¨®n de China es hoy, pese a las apariencias, mucho m¨¢s esperanzadora, en su conflictividad y sus crisis, que bajo el monolitismo herm¨¦tico y perfeccionista de Mao; pero el futuro, que parad¨®jicamente tiene el rostro de un hombre -Teng- de 73 a?os, es todav¨ªa turbio.