Una derrota de la izquierda supondr¨¢ el fin de su estrategia unitaria

ENVIADO ESPECIAL, Una derrota de la izquierda en la segunda y definitiva vuelta de las elecciones legislativas francesas, considerada en estos momentos como la hip¨®tesis m¨¢s probable, llevar¨ªa consigo el fin de la estrategia de la Uni¨®n de la Izquierda, al menos tal como est¨¢ definida en sus t¨¦rminos actuales, seg¨²n han dejado entrever en las ¨²ltimas horas destacados dirigentes socialistas.

Las declaraciones p¨²blicas del PS insisten repetidamente en que esa estrategia, simbolizada en el Programa Com¨²n de 1972, sigue siendo v¨¢lida, pero las declaraciones de algunos de sus representantes no dejan lugar a dudas sobre las intenciones de una parte, al menos, del Partido Socialista.A este respecto se destacaban ayer las afirmaciones de Pierre Mauroy, alcalde de Lille y n¨²mero dos oficial del PS, quien dijo que su partido ?deber¨ªa sacar las consecuencias, despu¨¦s de las elecciones, del comportamiento del Partido Comunista antes de la primera vuelta?.

Para Pierre Mauroy, el hecho de que el PS se haya obstinado en mantener la uni¨®n con el PC, a pesar de los ataques dirigidos por ¨¦ste contra los socialistas desde el pasado mes de septiembre, ha costado al PS perder un 3 ¨® 4% de votos en la primera vuelta.

De cara al futuro, seg¨²n el dirigente socialista, ambos partidos deber¨ªan guardar una cierta ?independencia program¨¢tica?, sin perjuicio de que se pudieran firmar pactos electorales antes de cada consulta.

Mauroy se queja, en efecto, de que el Programa Com¨²n ha impedido que socialistas y comunistas, ?que son dos partidos diferentes, hayan podido expresar sus diferencias?.

Horas m¨¢s tarde de estas declaraciones, el primer secretario del PS, Francois Mitterrand, evit¨® entrar en el fondo del significado de las afirmaciones de su segundo y se limit¨® a contestar, ante los micr¨®fonos de la radio, que Pierre Mauroy ?habla del futuro, y yo prefiero hablar del presente?. Y ese presente, para Mitterrand, contin¨²a siendo la fidelidad del PS hacia sus compromisos con los comunistas y Radicales de Izquierda.

Pesimismo socialista

Otra circunstancia que no pas¨® inadvertida en las declaraciones de Mauroy fue la de que este, en todo momento, se expres¨® como admitiendo por anticipado una derrota de la izquierda ma?ana domingo. Un cambio que significa un giro importante en la actitud p¨²blica de los dirigentes socialistas, quienes, sin ocultar una decepci¨®n evidente por los resultados de la primera vuelta, s¨ª se mostraban confiados en una victoria, aunque por escaso margen, el d¨ªa 19.En este sentido, el diputado y alcalde socialista de Marsella, Gaston Defferre, fue m¨¢s contundente al afirmar ayer que la victoria de la izquierda ?est¨¢ comprometida desde el pasado domingo? y cit¨® como s¨ªntoma claro la subida de la bolsa, ?especialmente en las acciones de las sociedades cuya nacionalizaci¨®n estaba prevista en el Programa Com¨²n?. Defferre lleg¨® a admitir incluso que la izquierda podr¨ªa conseguir menos esca?os que en las elecciones de 1973 (182, sobre 491).

Optimismo comunista

Ciertos analistas de la izquierda siguen esforz¨¢ndose en explicar, sin embargo, que una victoria de la oposici¨®n contin¨²a siendo ?aritm¨¦ticamente posible? el domingo. Y en esto el PC se muestra m¨¢s optimista que alguno de sus aliados socialistas. En una entrevista aparecida en el matutino Le Matin y en un art¨ªculo publicado en el vespertino Le Monde, el secretario general del PCF Georges Marchais, afirmaba ayer que su partido hab¨ªa realizado ?un estudio serio?, del cual resultaba que la izquierda podr¨ªa conseguir hasta 260 esca?os el domingo (catorce por encima de la mayor¨ªa de la Asamblea).Marchais fundaba, sobre todo, sus esperanzas en el hecho de que en 260 circunscripciones, de las 243 que entran en ballotage el d¨ªa 19, los votos conseguidos por los partidos de izquierda fueron superiores, en la primera vuelta, a la mayor¨ªa absoluta de la Asam presidencial.

Marchais piensa tambi¨¦n que el trasvase de votos entre los electores de izquierda, en Pavor del candidato com¨²n mejor colocado, puede realizarse en el mismo, porcentaje que entre los electores de los partidos de derechas.

No es ese, sin embargo, el criterio de la mayor parte de los expertos, para quienes, mientras entre los electores de la mayor¨ªa ese trasvase se har¨¢ pr¨¢cticamente al 100%, en el caso del paso de los votos socialistas a un candidato comunista no se har¨ªa en proporci¨®n superior al 60 ¨® 70%. Y en 147 de las 423 circunscripciones en disputa, el candidato com¨²n de la izquierda es un comunista.