Los barrios obreros
Producto de la benevolencia del anterior Gobierno, correspondiente a su estamento -l¨¦ase Ministerio de la Vivienda (Departamento de Urbanismo)- es la deficiente planificaci¨®n de los barrios perif¨¦ricos (obreros) de Madrid que venimos padeciendo desde hace varios a?os a esta parte y que en la mente de todos queda reflejada.La mayor parte de estos barrios no re¨²nen los requisitos que marca la ley para una sana y tranquila convivencia social. El asfaltado de sus calles, as¨ª como el alumbrado el¨¦ctrico, brillan por su ausencia en su mayor parte.
No existen bocas de riego ni alcantarillado y, aun mucho menos, espacios abiertos ajardinados, para solaz de ni?os y ancianos.
El agua estancada por la lluvia durante per¨ªodos prolongados de tiempo traen consigo la putrefaci¨®n de la misma y el consiguiente riesgo de epidemias de tifus, sin contar los continuos catarros y bronquitis, como consecuencia de la humedad ambiental, as¨ª como tambi¨¦n la proliferaci¨®n de insectos y malos olores.
Me estoy refiriendo en este caso concreto a la calle de Totana (transversales).
Este aislado abuso urban¨ªstico, producto de la negligencia ministerial, es uno m¨¢s de los muchos casos que se han venido produciendo en el transcurso de los ¨²ltimos a?os en la mayor parte de nuestro territorio nacional.
Espero que con la tan esperada y ponderada democracia se subsanen estas anomal¨ªas, y que el nuevo Gobierno obligue a las empresas constructoras a asfaltar sus respectivas calles y dem¨¢s requisitos exigibles para una racional forma de vida propia de personas.
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