No puede existir la Generalitat

?... Es cierto que casi todos los partidos catalanes, excepto las sucursales de UCD y de AP, hab¨ªan reclamado el retorno del presidente Tarradellas durante la campa?a electoral. Pero nunca hab¨ªan afirmado que delegar¨ªan sus poderes en su persona. El retorno era exigido como s¨ªmbolo y ello explica, quiz¨¢, por qu¨¦ nunca se lleg¨® a precisar cu¨¢les ser¨ªan las atribuciones de Tarradellas al finalizar el exilio. Esta falta de concreci¨®n, en la que radican buena parte de los conflictos ulteriores, iba a ser muy bien utilizada por el presidente Su¨¢rez en su maniobra contra los partidos populares que hab¨ªan triunfado en las elecciones del 15 de junio.La larga negociaci¨®n que se prolong¨® durante todo el verano culmin¨® con la publicaci¨®n del real decreto-ley del 29 de septiembre de 1977, que creaba un modest¨ªsimo ¨®rgano preauton¨®mico, sin contenido, abusivamente bautizado con el nombre de Generalitat de Catalunya. Este modest¨ªsimo organismo, parecido a una modesta mancomunidad, que algunos calificaron de Generalitat descafeinada, fue saludado por algunas personas y organizaciones como una gran victoria para Catalu?a, cuando no lo era, porque el pueblo catal¨¢n no consegu¨ªa la devoluci¨®n de las instituciones configuradas en el Estatuto de Autonom¨ªa de 1932 y por las cuales tanto hab¨ªamos luchado durante la clandestinidad. No pod¨ªa afirmarse, por tanto, como lo hizo el presidente Tarradellas en el mensaje en el que salud¨® la publicaci¨®n del real decreto-ley, que "por fin Catalu?a ha recuperado sus instituciones".

Al no existir autonom¨ªa no puede existir la Generalitat. Sin la no puede existir la Generalitat. Sin que el presidente sea elegido democr¨¢ticamente -y no nombrado por el Gobierno central-, no puede existir Generalitat.?

, 4 abril