Violencia sexual
El 4% de las ni?as que son sometidas en Irlanda del Norte a trata miento psiqui¨¢trico han sido v¨ªctimas de violencia sexual por parte de sus padres. La historia de la familia de Annie y Norman Winchester no difiere excesivamente de las de otras familias de ¨¢reas igualmente deprimidas de Belfast.El matrimonio Winchester se fund¨® cuando ambos contrayentes ten¨ªan diecis¨¦is a?os y la mujer esperaba el nacimiento de Noreen que es la mayor de los ocho hijos supervivientes de los diecis¨¦is que tuvieron. Las circunstancias de pobreza en que se desarroll¨® la vida de la familia hizo que el matrimonio decidiera varias veces la reclusi¨®n de los ni?os y de la propia madre en un hospicio. El matrimonio se separ¨® en 1974.
Mientras dur¨® el matrimonio, el padre de Noreen maltrataba f¨ªsicamente con crueldad a la madre que comenz¨® a adoptar la misma actitud con sus hijos. Para impedir la culminaci¨®n de sus continuos embarazos la madre invent¨® su propio sistema de aborto y se convirti¨® en una alcoh¨®lica, lo que determin¨® su reclusi¨®n en un sanatario psiqui¨¢trico.Noreen siempre crey¨® que las relaciones a las que su padre la forzaba eran lo habitual en su medio ambiente. Ya en la c¨¢rcel confes¨® que cuando abandon¨® la escuela comenz¨® a trabajar y a sentirse afectada por los h¨¢bitos sexuales de su padre, pero no lleg¨® a entender qu¨¦ ocurr¨ªa exactamente.
Mientras Noreen vivi¨® con su padre, despu¨¦s de la ruptura del matrimonio, era asaltada por ¨¦ste, del que luego se convirti¨® en una prisionera. La prensa brit¨¢nica ha contado que Noreen fue obligada a ser una ama de casa que ten¨ªa que alimentar a la familia.
La raz¨®n por la que Noreen no advert¨ªa el car¨¢cter delictivo de las acciones incestuosas de su padre, dice un psiquiatra que ha estudiado, Sandy Row, el ¨¢rea de Belfast, es que el incesto ya forma parte de la cultura de esa zona y que Noreen Winchester esperaba y aceptaba con normalidad las atenciones sexuales de su progenitor.
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