El Grupo Cero, una comunidad de escritores

El Grupo Cero es una editorial y muchas cosas m¨¢s. Son un grupo de intelectuales, escritores, bailarines, hombres y mujeres dedicados a la creaci¨®n, que est¨¢n ensayando una f¨®rmula muy particular de vida en com¨²n. Les aglutinan progresivos intereses econ¨®micos y una serie de bases de conducta comunes; por ejemplo, el psicoan¨¢lisis, que es no s¨®lo la profesi¨®n de muchos de ellos, sino tambi¨¦n la terapia de los problemas con que se tiene que enfrentar forzosamente, un intento de este tipo.Seg¨²n dijeron a EL PAIS algunos de sus miembros, ?de momento vivimos en lo que llamamos familias ampliadas. Hay una o varias parejas, con sus ni?os, que viven juntas, en una misma casa, con otras personas no forzosamente emparejadas. Comparten el dinero, las responsabilidades y el trabajo. Y tambi¨¦n las alegr¨ªas?.

?En Madrid -siguen diciendo- hay varias familias ampliadas. En la m¨¢s numerosa conviven catorce adultos y cinco ni?os. En otra hay siete personas, entre los veinticuatro y veintiocho a?os, y de otra, forman parte seis mayores y tres ni?os.?

La idea y los promotores vienen de Argentina. ?De este grupo de Madrid -dicen-, en el que se integra tambi¨¦n gente, que no vive de esta manera, forman parte cincuenta argentinos y otros tantos espa?oles. De hecho, si hemos llegado a estas formas de vida en com¨²n, que tienden a lo comunitario, pero que de momento no se plantean como comunas, es porque las condiciones se ajustaban a nuestras ideas. As¨ª, estas familias ampliadas nos ayudan a resolver problemas de subsistencia que para nosotros ser¨ªan mucho m¨¢s dificiles, y que en Argentina, por la pereza de las formas de vida m¨¢s tradicional y por las deudas y agarraderas de cada uno con su ambiente, su familia y dem¨¢s, no nos ve¨ªamos obligados a decidir.?

Las familias del Grupo Cero comparten la educaci¨®n de los ni?os y su cuidado, pero no destruyen la estructura de pareja. ?Los problemas con que nos enfrentamos son los normales de la convivencia. La familia exige a sus miembros adultos que trabajen, que pongan su parte como todo el mundo. Y, luego, claro, hay esos problemas surgidos de formas nuevas de convivencia. Nosotros, que hemos ejercido todos el psicoan¨¢lisis como analistas o como pacientes, encontramos en ¨¦l un m¨¦todo para evitar fricciones o para comprender las dificultades. S¨®lo de cuando en cuando nos reunimos para discutir estos temas, cuando hay una aut¨¦ntica necesidad. Porque tampoco queremos que la vida se nos transforme en una sesi¨®n de an¨¢lisis permanente.?

En el Grupo Cero conviven, pues, hombres y mujeres de distintas profesiones, desde la poes¨ªa al teatro, desde la danza a las artes pl¨¢sticas. Se expresan mediante charlas, con las publicaciones que su sello produce y con dos revistas: Grupo Cero y Apocalipsis Cero, dedicadas, sobre todo, a la poes¨ªa y al psicoan¨¢lisis. Fomentan formas de creaci¨®n comunitaria y mantienen un grupo docente. Muchos de ellos tienen trabajo fijo y una situaci¨®n satisfactoria en Madrid. Otros tratan de conseguir sus permisos de trabajo y una residencia estable legalmente. La gran mayor¨ªa de ellos han quemado las naves all¨¢ en Buenos Aires, aunque no todo el grupo argentino se ha trasladado a Espa?a. De hecho all¨ª siguen editando libros y produci¨¦ndolos.

Algunos nombres pertenecientes a este grupo, y que tienen obra en la calle, son Jorge Lombardero, Jorge Alem¨¢n, Miguel O. Menassa, Federico Schimied, Mar¨ªa Chevez, Willy Bristow y otros muchos.