Antonio Ros¨®n, presidente de la Xunta, se confiesa contestatario, dem¨®crata y galleguista de toda la vida
Durante dos horas habl¨® ayer, ante la prensa, Antonio Ros¨®n, presidente de la Junta de Galicia, para contradecir las recientes acusaciones que le hizo la revista Intervi¨² en un reportaje de Jos¨¦ Luis Morales, que se encuentra actualmente pendiente del veredicto judicial. Pocas ruedas de prensa hab¨ªan despertado similar expectaci¨®n en Galicia durante los ¨²ltimos a?os. No asistieron, sin embargo, periodistas extranjeros como en principio se esperaba.
Antonio Ros¨®n empez¨® diciendo que hac¨ªa esta convocatoria a la prensa para responder a ?la ama?ada y brutal agresi¨®n persistente de que fui objeto por parte de una publicaci¨®n de difusi¨®n mayoritaria?. ?Respondo -dijo- frente a la calumnia y a la injuria en defensa de la verdad hist¨®rica y de la honorabilidad de una familia gallega.? Considero que las medidas de secuestro adoptadas contra Intervi¨² se trataron en cada caso de prevenciones necesarias para la protecci¨®n de la fama de las personas y que sirvieron de respuesta a ?la campa?a difamatoria que se deriv¨® de un panfleto an¨®nimo divulgado el a?o pasado y que la revista en cuesti¨®n copi¨® textualmente?.En una larga exposici¨®n tendente a demostrar que Antonio Ros¨®n fue siempre un pol¨ªtico contestatario del franquismo, el presidente de la Junta de Galicia dijo que fue ¨¦l precisamente el primero en pedir que dejara de celebrarse el d¨ªa de la Victoria y que nunca se hab¨ªa sentido falangista. Cont¨® su larga experiencia durante la guerra y explic¨® que no s¨®lo no fue nunca un cacique, sino que adem¨¢s considera que el caciquismo es un fen¨®meno periclitado en la Galicia actual. ?Yo fui falangista -aclar¨®- por mi condici¨®n de oficial del Ej¨¦rcito y nada m¨¢s.?
Ayudar al perseguido
En todo momento y a las diversas preguntas que hicieron lo periodistas, Antonio Ros¨®n respondi¨® que la informaci¨®n aportada por Intervi¨² respondi¨® a una ?estrategia total calculada y fr¨ªa y a un reto escandaloso a la administraci¨®n de Justicia?. Reivindic¨® para s¨ª mismo la condici¨®n de ?dem¨®crata, galleguista y hombre contestatario de la situaci¨®n vivida?, argumentando que siempre se sinti¨® cerca de los presupuestos galleguistas y que defendi¨® a numerosos republicanos, comunistas, galleguistas y socialistas que fueron perseguidos durante la contienda de 1936. Defendi¨® la libertad de expresi¨®n y dijo que ¨¦sta ten¨ªa, sin embargo, que producirse conforme al debido respeto a la fama y honorabilidad de las personas.Cit¨® una larga lista de perseguidos del franquismo, a los que dice haber ayudado durante la guerra civil, y se dio la circunstancia de que algunos de los nombrados eran familiares de los periodistas convocados a la rueda de prensa que tuvo, en todo momento, un alto grado de emotividad y cierta tensi¨®n que se derivaron de la expulsi¨®n de que fue objeto al principio, por orden de Antonio Ros¨®n, el enviado especial de Intervi¨², Jos¨¦ Luis Morales.
En alg¨²n momento plante¨® aparentes evidencias de que Intervi¨² daba por muertos a manos de los fascistas a vecinos de la zona de Becerre¨¢ que hoy est¨¢n vivos. El representante de esa revista explic¨® m¨¢s tarde a la prensa que la versi¨®n del se?or Ros¨®n, no es la que se da en el n¨²mero secuestrado, ya que se dice en ¨¦l, simplemente, que los citados fueron perseguidos.
Hay que decir fundamentalmente que el presidente Ros¨®n se extendi¨® sobre todo en aquellas explicaciones que conducen a demostrar que en su caso se trata de un hombre que nunca hizo da?o a nadie, que tiene la conciencia tranquila y que deber¨ªa m¨¢s bien situarse en la izquierda socialdem¨®crata. En este sentido se declar¨® claramente ?contestatario? y se manifest¨® ?galleguista de toda la vida?. Aport¨® numerosas pruebas notariales contra el reportaje de Intervi¨² declarando en todo caso que los familiares de las supuestas v¨ªctimas est¨¢n ahora de su lado.
De Fraga a la UCD
El tema especialmente delicado fue cuando explic¨® a los periodistas su paso de las filas de Fraga Iribarne a las de UCD. ?Yo considero -dijo- que Fraga Iribarne es un hombre con una gran cabeza y talento de estadista. Tuve relaciones pol¨ªticas con ¨¦l en el verano de 1976 por que me atra¨ªa la idea de un partido que se iba a formar con participaci¨®n de Areilza y P¨ªo Cabanillas. Sin ning¨²n compromiso formal llegamos a hablar de que yo les representar¨ªa en la provincia de Lugo, pero Fraga en septiembre abandon¨® la idea de Reforma Democr¨¢tica y dio lugar a la formaci¨®n de Alianza Popular, partido del que yo me considero distante por mi propia idea de la apertura. En noviembre del 76 le visit¨¦ en Madrid, le expuse mi criterio de que estaba equivocado. Posteriormente, en abril de 1977, un grupo de j¨®venes amigos de tendencia principalmente socialdem¨®crata me propuso organizar una candidatura de diputados y senadores con car¨¢cter independiente. Cuando ya est¨¢bamos en esto surgi¨® desde Madrid la propuesta de que me integrara a las candidaturas de UCD, cosa que hice manteniendo mi independencia y a base de luchar por la autonom¨ªa de Galicia.?
Su pasado franquista
Hablando de su paso por los cargos pol¨ªticos del franquismo (jefe militar de la zona de Becerre¨¢, presidente de la Diputaci¨®n de Lugo, delegado de Educaci¨®n Popular en la capital de esta provincia, presidente de la C¨¢mara Agraria, procurador en Cortes, etc¨¦tera) manifest¨® que siempre trat¨® de defender los intereses de Galicia como galleguista y como dem¨®crata, y contest¨® a una pregunta sobre su participaci¨®n en la defensa de algunos eminentes galleguistas, como Ram¨®n Pi?eiro, diciendo que no hab¨ªa sido ajeno a tal defensa. Opin¨® que las acusaciones de Interviu fueron utilizadas tanto por la derecha como por la izquierda contra ¨¦l, haciendo difundir, sobre todo en la provincia de Lugo, numerosas fotocopias de los reportajes secuestrados.Minutos antes de la rueda de prensa, el presidente Ros¨®n recibi¨® delante de los periodistas a varios miembros cualificados de la direcci¨®n del Partido Comunista de Galicia, entre los que figuraba su secretario general Santiago Alvarez, y los miembros de la ejecutiva del PCE Angel Gerreiro y Rafael Pillado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.