Zaceagnini desea ampliar la colaboraci¨®n de la DC italiana con la izquierda
Pregunta. ?Cu¨¢l ha sido el mayor error de su partido en sus treinta a?os de poder?Respuesta. Sin duda, hemos cometido errores, que se deben a la contaminaci¨®n del poder, al largo ejercicio de responsabilidades a las que nos ha llamado nuestro electorado y, sobre todo, a ciertas imprevisiones en relaci¨®n con el r¨¢pido cambio de orientaciones econ¨®micas, socia.les y culturales de nuestro pa¨ªs.
P. ?Y la mayor virtud?
R. La determinaci¨®n de defender las libertades, el respeto del individuo y su promoci¨®n, la garant¨ªa del pluralismo de las instituciones y de los grupos sociales contra cualquier tentativa o tentaci¨®n de hegemon¨ªa de un sector pol¨ªtico o econ¨®mico.
P. Desde hace treinta a?os la Democracia Cristiana no superaba el 40% de los votos. En las elecciones administrativas, despu¨¦s del asesinato de Aldo Moro, ha logrIdo el 42 %. ?Se trata de un resultado emocional o de algo M¨¢s?
R. Hubo una gran solidaridad en tomo deAldo Moro, traducida en una conmovedora prueba de confianza en la DC, que ha podido -influir en el resultado electoral. No obstante -como ha subrayado toda la prensa-, el ¨¦xito obtenido por la DC en las elecciones administrativas del 14 de mayo pasado se debe, sobre todo, a una variaci¨®n pol¨ªtica de la acci¨®n de nuestro partido, con su capacidad de llevar adelante la colaboraci¨®n con los otros partidos, sin que esto signifique confusi¨®n ideol¨®gica o p¨¦rdida de autonom¨ªa. Se trata de una ratificaci¨®n indirecta de la iniciativa que hemos emprendido para resolver los grandes problemas de este pa¨ªs mediante un programa sostenido por una gran mayor¨ªa parlamentaria y con el apoyo de las fuerzas sociales, empresariales y sindicales.
P. De usted han dicho los comunistas que posee una fe que no ofende a los ateos. ?C¨®mo pudo conciliar durante el drama de Moro su fe cristiana, su amistad con el ?maestro y su responsabilidad de pol¨ªtico y de hombre de Estado.
R. Yo no creo que la militancia en la Democracia Cristiana cree contradicciones entre el compromiso civil y el religioso. En el drama de Moro yo nunca tuve que decidir personalmente, porque todas las decisiones fueron realizadas colegialmente por la direcci¨®n de mi partido. Creo que la Democracia Cristiana ha actuado de la ¨²nica forma que era posible: defender las instituciones y, por tanto, al pueblo italiano, sin dejar de intentarlo todo para defender la vida de Moro.
P. ?C¨®mo se explica el hecho de que los comunistas, tras haber sido en el asunto tan solidarios con ustedes, apoyando sin ambig¨¹edades la l¨ªnea de defensa del Estado, hayan pagado en estas elecciones el precio m¨¢s alto, perdiendo casi un 10 % en relaci¨®n con las ¨²ltimas elecciones generales?
R. Yo no creo que las p¨¦rdidas que ha tenido el Partido Comunista el 14 de mayo -elecciones que aunque tuvieron un sentido pol¨ªtico fueron administrativas y parciales- se deban a la solidaridad demostrada por el PCI a nuestro partido en eldrama Moro. Creo que se trata de motivos m¨¢s complejos, algunos de signo pol¨ªtico y otros de signo m¨¢s marcadamente administrativo.
P. Se ha hablado de ?graves dificultades? en la DC y el PSI durante el caso Moro. ?C¨®mo ve en el futuro pr¨®ximo la colaboraci¨®n entre socialistas y democristianos, los dos partidos vencedores en las ¨²ltimas elecciones?
R. No creo que hayan existido esas dificultades a las que usted alude. La verdad es que existieron coincidencias en la b¨²squeda de todos los modos posibles; para salvar la vida de Aldo Moro. Los mismos socialistas nunca pretendi¨¦ron anteponer su acci¨®n humanitaria a la fir
me defensa delas instituciones democr¨¢ticas y al. respeto a la Constituci¨®n.La DC, como se sabe, ha buscado siempre una colaboraci¨®n con el PSI, cuya funci¨®n en la gesti¨®n del pa¨ªs y en el desarrollo democr¨¢tico se considera de enorme importancia. Por lo que se refiere al futuro inmediato, yo deseo que las relaciones de colaboraci¨®n constructiva entre estos dos partidos se puedan intensificar para el bien del pa¨ªs.
P. Hay quien teme que este triunfo electoral de la DC pueda ser aprovechado por.el grupo m¨¢s conservador de su partido para volver hacia atr¨¢s en la l¨ªnea de di¨¢logo con la izquierda. ?No ser¨ªa esto una traici¨®n a la pol¨ªtica que le cost¨® la vidaa Moro?
R. Si es verdad que el resultado electoral del 14 de mayo representa un ¨¦xito para la DC, esto significa que los efectos han confirmado nuestra l¨ªnea pol¨ªtica del ?con fronto?. A esa l¨ªnea seremos fieles en sus objetivos y en sus l¨ªmites. Personalmente estoy convencido de que se debe continuar con la colaboraci¨®n parlamentaria para llevar a cabo un programa que re suelva la grave crisis econ¨®mica del pa¨ªs y abata el terrorismo.
P. Muchos se preguntan por qu¨¦ los j¨®venes, y no s¨®lo los de su par tido, se sienten tan atra¨ªdos hacia su persona. ?Qu¨¦ es lo que les falta a los j¨®venes italianos de hoy?
R. S¨ª, comprendo lo que usted dice de los j¨®venes. Pero no me lo explico mucho, porque en realidad yo ya no soy joven. Creo que los j¨®venes se dan cuenta del enorme es fuerzo que hago para escucharles, comprenderles e intentar resolver sus problemas. Pienso que los j¨®venes est¨¢n siempre en busca de nuevos valores, que desean encar nar en la realidad actual.
Paseando una tarde por Piazza Navona, meses antes de ocupar la secretar¨ªa de la DC, Zaccagnini di jo: ?Muchos pol¨ªticos sufren por que sus hijos militan en direcci¨®n opuesta a la suya. Tambi¨¦n mi hijo est¨¢ en la nueva izquierda. Pero entre nosotros existe un di¨¢logo profundo y leal. Lo importante es respetar las ideas de los dem¨¢s. La democracia no es s¨®lo una palabra, sino una actitud de la vida.?
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