Los refer¨¦ndums de ma?ana suponen un plebiscito sobre el sistema de partidos

Ma?ana domingo, m¨¢s de 41 millones de italianos est¨¢n convocados para decidir en refer¨¦ndum si deben ser abrogadas o no dos leyes parlamentarias: la Ley Reale, relativa al orden p¨²blico, y la ley que autoriza al Estado a subvencionar a los partidos pol¨ªticos. Se espera un alto ¨ªndice de abstenciones en esta convocatoria, en la que m¨¢s que una votaci¨®n sobre dos leyes especificas, los italianos plebiscitar¨¢n el vigente sistema de partidos en Italia, o la pol¨ªtica actual de unidad nacional. Sobre estos refer¨¦ndums informa desde Roma .

El refer¨¦ndum fue promovido por el Partido Radical que dirige Marco Panella, un partido que recoge un 2% de votos pero que es uno de los m¨¢s tenaces defensores de las ?libertades civiles?. Los radicales recogieron m¨¢s de medio mill¨®n de firmas para que se celebrasen nueve refer¨¦ndums. Los otros siete se refer¨ªan al aborto, al Concordato, a los delitos de opini¨®n, a los tribunales y c¨®digos militares fascistas, a la comisi¨®n investigadora del Parlamento, y a la ley de manicomios.La Corte Constitucional declar¨® que ?no ha lugar? para cuatro de ellos. Los otros, aborto y leyes de manicomios, se hicieron innecesarios porque el Parlamento aprob¨® dos leyes que cambiaban radicalmente la legislaci¨®n anterior.

Lo que m¨¢s preocupa de estos refer¨¦ndums es que, como sucede siempre en Italia, se han convertido en un verdadero refer¨¦ndum pol¨ªtico.

La gente que votar¨¢ y la que se abstendr¨¢ no lo har¨¢ principalmente por estas dos leyes, porque saben que la Ley Reale ser¨¢ modificada enseguida en el Parlamento y que el Estado dar¨¢ el dinero a los partidos, como hizo siempre, en un modo u otro. Se est¨¢ temiendo que este voto signifique un verdadero proceso a los partidos: ?El voto -escribe La Stampa-, tendr¨¢ un notable significado pol¨ªtico general: ser¨¢ un plebiscito a favor o en contra de los partidos.?

Entre la democracia directa y el totalitarismo

El director del diario Repubblica, Eugenio Scalfari, uno de los intelectuales del ¨¢rea socialista m¨¢s agudos, afirma que estos refer¨¦ndums ser¨¢n un test acerca de la actual pol¨ªtica de unidad nacional. Y a?ade que los socialistas, que se est¨¢n apartando cada d¨ªa m¨¢s de esta pol¨ªtica, son los que m¨¢s han echado la carne en el asador en esta campa?a electoral, que ayer qued¨® cerrada, hasta el punto que han dejado a sus militantes libertad de conciencia en el voto. De hecho, figuras del PSI de primera plana. como Giacomo Mancini y Riccardo Lombardi, han declarado que votar¨¢n a favor de la abrogaci¨®n de la ley Reale.Toda la prensa destaca que entre quienes voten s¨ª existe, sin duda, una voluntad antl-partidos. Por esto los partidos de la mayor¨ªa de Gobierno han pedido, alarmados, que se vote no. Lo que sucede es que entre los que votar¨¢n s¨ª, existen dos posiciones diametralmente opuestas: votar¨¢n juntos quienes piensan que la pol¨ªtica de los partidos tradicionales est¨¢ trasnochada y que es necesario poner en pr¨¢ctica la democracia directa y quienes, al contrario, lo que desean es que desaparezcan los partidos, pero para implantar un r¨¦gimen autoritario.

Esto es lo que ha llevado a Moravia a declarar que votar¨¢ a favor de la ley de subvenci¨®n p¨²blica de los partidos porque este voto ?debe ser una demostraci¨®n de confianza del pueblo en el pluralismo pol¨ªtico que anim¨® la lucha contra el totalitarismo?.

Los partidos, preocupados

El miedo a que los italianos emplecen a perder confianza en los partidos, dejando de considerarles como expresi¨®n de los intereses populares, est¨¢ preocupando mucho a comunistas y democristianos en este refer¨¦ndum.Paese Sera escrib¨ªa ayer en su editorial: ?Desde el primer momento los promotores del refer¨¦ndum trataron de socavar, desde los cimientos, los lazos que unen a los partidos democr¨¢ticos con el electorado, poniendo en discusi¨®n la representatividad de los actuales partidos. ?

Divisi¨®n en la izquierda

Otra preocupaci¨®n de los comunistas es que estos refer¨¦ndums pongan de relieve la divisi¨®n que existe en la izquierda italiana. Por supuesto, votar¨¢ en contra de los comunistas toda la nueva izquierda unida y se calcula que casi la mitad de los socialistas. Por otra parte, los socialistas temen que un mar de votos a favor de esta ley Reale pueda significar que el pa¨ªs pide mayores poderes para la polic¨ªa.Mientras, los dem¨¢s partidos piensan que si aumenta el n¨²mero de quienes votan contra la ley, esto podr¨ªa suponer un test para el terrorismo, que estar¨ªa seguro de contar con un ¨¢rea de consenso contra el rigor de la clase dirigente actual.

Por ?su parte, los radicales y la nueva izquierda. y parte de los socialistas, declaran que lo que ellos pretenden es una forma diversa de gobernar menos burocr¨¢tica y con mayor participaci¨®n real de la base.