Piden la paralizaci¨®n del programa nuclear hasta que haya un refer¨¦ndum
La comisi¨®n ciudadana pro moratoria y plebiscito del programa nuclear, recientemente creada en Madrid, celebrar¨¢ ma?ana una rueda de prensa en Madrid, para dar a conocer los objetivos de la entidad. En principio, sus responsables han redactado ya una carta que dirigir¨¢n al presidente de las Cortes.
El objetivo fundamental de esta comisi¨®n es promover una iniciativa ciudadana para que sea reconsiderado el programa nuclear del Plan Energ¨¦tico, se dice en una nota.La carta que la mencionada entidad quiere hacer llegar al presidente de las Cortes tiene como fin ser utilizada como instrumento de trabajo por los parlamentarios que discutan el citado Plan Energ¨¦tico nacional.
Ya se han adherido a los Fines de la comisi¨®n diversas personalidades espa?olas, entre las que cabe se?alar a Juan Jos¨¦ Rodr¨ªguez Ugarte, secretario general de Justicia y Paz; Enrique Miret Magdalena, escritor y presidente de la Confederaci¨®n de la Peque?a y Mediana Empresa; Luis Otero, ex comandante; Faustino Cord¨®n, bi¨®logo; Enrique Gimbernat, jurista; Eloy Terr¨®n, decano del Colegio de Doctores y Licenciados; Julio Caro Baroja, historiador; Pedro Altares, periodista; Pedro Lain Entralgo, catedr¨¢tico; Angel Serrano, economista; Eladio Garc¨ªa Castro, secretario general del Partido del Trabajo de Espa?a; Lluis Mar¨ªa Xirinacs, senador; Sacramento Mart¨ª, presidenta de la Federaci¨®n de Organizaciones Feministas, Jaime Pastor, del bur¨® pol¨ªtico de la Liga Comunista Revolucionaria; Jes¨²s Hern¨¢ndez Perera, catedr¨¢tico; Jer¨®nimo Lorente, secretario oeneral de la Confederaci¨®n de Sindicatos Unitarios; Hilario Franco, de Uni¨®n Sindical Obrera, y J. A. Fern¨¢ndez Ord¨®?ez ingeniero de Caminos; Antonio Buero Vallejo, escritor y acad¨¦mico de la Lengua; Luis Pastor, cantante; Gabriel Celeya y Blas de Otero, poetas.
?El Plan Energ¨¦tico sometido por el Gobierno a las Cortes -dice el documento que la citada comisi¨®n ha elaborado-, desarrolla un programa nuclear que si bien es inferior en sus objetivos a medio plazo con respecto al anterior Plan de 1975, sienta expl¨ªcitamente las bases para una creciente nuclearizaci¨®n del abastecimiento energ¨¦tico.?
Los que se han adherido a los prop¨®sitos de la comisi¨®n abrigan ?serias dudas acerca de la viabilidad econ¨®mica de un programa nuclear en la actual crisis de inversiones y paro creciente. Pensamos que la tecnolog¨ªa actual es a¨²n incompleta y no puede garantizar cuestiones como el almacenamiento definitivo de los residuos radiactivos?.
?Somos conscientes -a?aden los firmantes-, de que nuestras limitadas posbilidades tecnol¨®gicas y financieras, tanto en lo que respecta a las centrales como al ciclo del combustible, nos conducir¨¢n a nuevos e inaceptables lazos de dependencia con las potencias nucleares contribuyendo de esta forma a limitar nuestra soberan¨ªa nacional.?
Finalmente, dice el documento, ?consideramos altamente preocupante que la continua proliferaci¨®n de centrales nucleares consuma en breve plazo las limitadas reservas de uranio, forz¨¢ndonos a entrar en una energ¨ªa basada en el plutonio, con riesgos muchos mayores de proliferaci¨®n armamentista, actos de sabotaje y da?os a la poblaci¨®n?.
Los firmantes de la carta estiman que ?un tema de tanta importancia para el futuro social, pol¨ªtico y econ¨®mico del pa¨ªs no puede ser debatido sobre una pol¨ªtica de hechos consumados, que arranca de compromisos previos al establecimiento de la democracia parlamentar i a ni tampoco ser decidido por unas Cortes de transici¨®n como las actuales?.
Los firmantes se sienten ?en la obligaci¨®n moral de recabar a todas las fuerzas pol¨ªticas presentes en el Parlamento, la convocatoria de un refer¨¦ndum previo debate p¨²blico, sobre el programa nuclear y la paralizaci¨®n de los proyectos actualmente en desarrollo en tanto no se haya expresado la voluntad popular?.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.