No hay versi¨®n oficial
La pluralidad de competencias en materia legislativa sobre el transporte de mercanc¨ªas peligrosas parece una de las causas que impiden obtener transcurridas m¨¢s de doce horas de ocurrido el siniestro, una versi¨®n oficial sobre el mismo. Los reiterados intentos realizados por EL PAIS para obtener una versi¨®n oficial sobre el accidente en los tres departamentos interesados legislativamente en el transporte de mercanc¨ªas peligrosas -Transportes y Comunicaciones, Industria e Interior- resultaron infructuosos. A la hora de cerrar esta edici¨®n a¨²n no hab¨ªa sido posible establecer de manera oficial las causas del accidente, sobre cuyas consecuencias ha asumido todas las responsabilidades la compa?¨ªa propietaria del veh¨ªculo siniestrado.Si bien informaciones de testigos presenciales sit¨²an las causas del accidente en el revent¨®n de una de las ruedas del cami¨®n-cisterna, la nota oficial facilitada por el Gobierno Civil de Tarragona habla de causas desconocidas y se?ala que la explosi¨®n de la cisterna que transportaba el gas licuado fue doble, con un intervalo de cinco segundos entre ambas, cuyas sendas ondas expansivas afectaron, de una parte, a unas edificaciones pr¨®ximas entre las que se encontraba la discoteca que result¨® destruida, y de otra a la mitad del camping Los Alfaques, cuyas instalaciones quedaron arrasadas.
La compa?¨ªa propietaria del veh¨ªculo accidentado asegura que el mismo reun¨ªa todas las condiciones de seguridad que establece la ley. En concreto, las normas europeas vigentes sobre el transporte por carretera de materiales altamente peligrosos. Esta normas, conocidas con las siglas ADR (accord europeen relatif au transport international de marchandises dangereuses), fueron establecidas mediante un tratado europeo suscrito el 30 de noviembre de 1957 en Ginebra.
En el Ministerio de Transportes y Comunicaciones. donde no se facilit¨® ning¨²n tipo de versi¨®n oficial al respecto, se confirm¨® a EL PAIS que, en efecto, el veh¨ªculo siniestrado estaba dotado de la correspondiente tarjeta de transporte, una vez que Industria daba ?e de que reun¨ªa las caracter¨ªsticas de seguridad que exige la normativa espa?ola sobre la materia.
No ha sido posible, sin embargo, conocer si el recorrido efectuado por el cami¨®n-cisterna estaba oportunamente cubierto de las necesarias medidas de viligancia para evitar un posible accidente, incluso si ello era recesario de acuerdo con las normas que en cada caso establece el Ministerio de Industria, departamento encargado de la vigilancia y cumplimiento de la normativa que en este sentido establece Transportes.
En este ¨²ltimo departamento, sin embargo, se insiste en que el cami¨®n-cisterna accidentado reun¨ªa las condiciones de seguridad exigidas por la ley y que, en definitiva, ?se trata de un desgraciado accidente de tr¨¢fico, imposible de evitar mediante cualquier legislaci¨®n?.
En concreto, de acuerdo con la informaci¨®n obtenida en Transportes, el cami¨®n-cisterna, cuya construcci¨®n data de 1974, hab¨ªa recibido de este departamento la oportuna tarjeta de transporte en diciembre de aquel a?o, renov¨¢ndose anualmente hasta el actual a la vista del preceptivo informe de Industria.
Estos ¨²ltimos datos contenidos tambi¨¦n en la nota difundida a ¨²ltimas horas de la noche por Cisternas Reunidas. SA, en la que tambi¨¦n se expresa el dolor y consternaci¨®n de la compa?¨ªa por las p¨¦rdidas humanas habidas en el accidente, sobre cuyas causas carec¨ªan a¨²n de conocimiento.
Sin embargo, t¨¦cnicos en ingenier¨ªa petroqu¨ªmica consultados por EL PAIS se?alan que el transporte de este tipo de productos es altamente desaconsejable por la falta de seguridad que comporta.
En cuanto a las caracter¨ªsticas del camping arrasado por el siniestro, tampoco ha sido posible establecer una justificaci¨®n oficial al hecho de que mientras su capacidad m¨¢xima autorizada pro Turismo era de 260 plazas, el n¨²mero de afectados por la cat¨¢strofe (unos 150 muertos y m¨¢s de doscientos heridos), adem¨¢s de los que resultaron ilesos superen con creces aquella cifra.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.