Piden una comisi¨®n que elabore un proyecto de estatuto para los funcionarios

La Asociaci¨®n Espa?ola de la Administraci¨®n P¨²blica (AEAP) y las centrales sindicales con presencia en el funcionariado -CCOO, CNT, CSUT, FETAP-UGT, SU y USO- han hecho p¨²blica una nota en la que muestran sus satisfacci¨®n por el hecho de que el ¨²ltimo Consejo de Ministros no aprobase el proyecto de ley de bases de la funci¨®n p¨²blica, y solicitan que se constituya una comisi¨®n para elaborar un proyecto de estatuto.

Los firmantes de la nota piden que se constituya una comisi¨®n de trabajo ?donde participen representantes del personal al servicio de la Administraci¨®n p¨²blica, junto con la secretar¨ªa de Estado, para elaborar un proyecto de estatuto de la funci¨®n p¨²blica progresivo y democr¨¢tico que habr¨¢ de repercutir beneficiosamente en la consecuci¨®n de una Administraci¨®n eficaz y responsable ante la sociedad?.La agencia Efe, ha distribuido un despacho en el que informa que ?fuentes pr¨®ximas a la Administraci¨®n? han mostrado extra?eza por las reacciones de centrales sindicales y asociaciones de funcionarios, frente al anteproyecto sobre la funci¨®n p¨²blica.

Las mismas fuentes se?alan que mientras algunas centrales y asociaciones han calificado de elitista el anteproyecto, en ¨¦l se pretende recortar determinados privilegios de los que gozan actualmente algunos cuerpos selectos, e insisten en que el anteproyecto est¨¢ abierto a mejoras y, por supuesto, a discusi¨®n parlamentaria. Las centrales y asociaci¨®n antes citadas han elaborado un escrito en el que comienzan afirmando que el proyecto ?fue elaborado con el desconocimiento absoluto del funcionariado y en condiciones clandestinas entre un reducido grupo de expertos?.

La nota, tras se?alar la irregularidad de los intentos anteriores y de la sorpresa con que se lleva al Consejo de Ministros el actual anteproyecto, se congratula de que no haya sido aprobado por el Gobierno un texto ?del cual incomprensiblernente se ha llegado a decir -prosigue-el escrito- que aparentaba un intento de democratizar la Administraci¨®n y estimular a los funcionarios, cuando la opini¨®n de las centrales y AEAP, recogida en la prensa, ha sido la m¨¢s dr¨¢stica desaprobaci¨®n, por antidemocr¨¢tico y regresivo?.

?No hay duda -a?aden las centrales y asociaci¨®n firmantes- de que el problema de alcanzar una Administraci¨®n eficaz, saneada, barata y responsable es de gran envergadura. En principio puede deducirse, sin temor a equivocaci¨®n, que este objetivo de racionalizar la Administraci¨®n es una necesidad inaplazable del actual capitalismo desarrollado que impera en nuestro pa¨ªs. En buena l¨®gica, un Gobierno como el actual (UCD) deber¨ªa de proceder, sin miedo a abrir la brecha racionalizadora y cortar progresivamente la din¨¢mica del caos administrativo y funcional. Se?ala el escrito que los funcionarios est¨¢n interesados en ese mismo objetivo y que es necesario dar oportunidad para que se manifiesten. ?Si buscamos -dice el escrito democratizar la Administraci¨®n de verdad y sin demagogia, si queremos estimular al funcionario, dot¨¢ndole de una moral de responsabilidad y prestigio ante el contribuyente, lo que no hab¨ªa que hacer nunca es fraguar secretamente las bases jur¨ªdicas de la reforma, antes bien hab¨ªa que proceder a abrir un debate y a contar en la elaboraci¨®n de esas bases jur¨ªdicas con una representaci¨®n de los funcionarios p¨²blicos y, para mayor claridad, con las fuerzas sindicales representativas del funcionariado.?

?Formulamos las consideraciones anteriores -concluye el escrito- en la confianza de que, para que la Secretar¨ªa de Estado se abra a su propio personal, no es necesario que ¨¦ste recurra a posturas de fuerza, como hacen en situaciones l¨ªmite otros sectores laborales del pa¨ªs, forzados por patronales intransigentes. Si en esos momentos, como en el ¨¢mbito de las gasolineras, el Gobierno favorece el di¨¢logo,(?por qu¨¦ va a emplear diferente pol¨ªtica con sus propios empleados??