El cine infantil
Dedicado durante muchos a?os, todos los que tengo de profesi¨®n, a confeccionar, m¨¢s que como negocio, como servicio, sesiones de cine para los ni?os, al empezar la nueva temporada veo, con pena, c¨®mo cada a?o es m¨¢s dif¨ªcil realizar ese servicio.En toda Espa?a ha habido cinemat¨®grafos que, privada o p¨²blicamente, han dedicado parte de su actividad a programar sesiones infantiles los festivos a horas adecuadas y a precios m¨®dicos. Con este servicio, los padres encontraban un gran descanso en esas horas muertas: cuatro a seis de la tarde.
Estas sesiones, en casi todos los que las iniciamos en cada plaza, llevaban el deseo de ?dar cine a los ni?os?. Despu¨¦s surgi¨® la ambici¨®n y e multiplicaron a la vista de que los ni?os ?daban dinero?. Como, efectivamente, los ni?os ?dan dinero?, hoy, durante sus vacaciones, ?todo el mundo en el cine procura sac¨¢rselo? y sobre todo el mundo las grandes distribuidoras.
Pero el ni?o sigue teniendo esa necesidad despu¨¦s de las vacaciones, pues los festivos ha de poder ir a alguna parte. Ah¨ª es donde entraban haciendo un gran servicio a la comunidad esas sesiones infantiles que han venido dando muchos cines y colegios. Los grandes negociantes de la industria en este campo se reservan sus efectivos para las vacaciones.
Pues bien, ?de d¨®nde varnos-a sacar pel¨ªculas para seguir haciendo esas sesiones infantiles si en lo que va de a?o, de unas trescientas pel¨ªculas calificadas por la Administraci¨®n, toleradas y propias para los ni?os habr¨¢ calificado unas 35? Si tenemos que cubrir m¨¢s de cincuenta festivos, y en algunos casos con programas dobles, para hacerlo m¨¢s interesante o duradero, ?d¨®nde vamos a ir a por pel¨ªculas?
Pasar¨¢ lo que viene ocurriendo: cada d¨ªa van dejando de existir m¨¢s sesiones dedicadas a los ni?os, y de no remediarlo, en este mundo materialista que estamos creando desaparecer¨¢n todas estas dedicaciones e inquietudes de que tan necesitada est¨¢ cualquier sociedad que ge considere civilizada.
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