La colonia extranjera arriesga la posibilidad de expulsiones masivas

Varias recomendaciones oficiosas de departamentos gubernamentales durante los ¨²ltimos meses, unidas al decreto de regulaci¨®n de los permisos de trabajo a extranjeros -publicado el 10 de agosto pasado- han llevado a una situaci¨®n dif¨ªcil a la numerosa colonia extranjera que reside en nuestro pa¨ªs, que arriesga la posibilidad de expulsiones masivas a partir de hoy al haber finalizado el plazo concedido para regularizar su situaci¨®n.Ayer mismo varios letrados del Colegio de Abogados de Barcelona, junto con algunos parlamentarios, se entrevistaron con el ministro del Interior, se?or Mart¨ªn Villa, en un intento de impedir la expulsi¨®n de Espa?a de los exiliados suramericanos. Al parecer, el criterio del ministro es que no se puede prolongar el plazo para la normalizaci¨®n de la situaci¨®n legal de los ciudadanos suramericanos. La colonia latinoamericana se estima en 100.000 personas, aunque no existen datos fiables.

Las citadas normas del pasado 10 de agosto dispon¨ªan que los extranjeros que pretendan realizar en Espa?a actividades lucrativas deben solicitar simult¨¢neamente ante el Gobierno Civil de la provincia correspondiente el permiso de trabajo y el permiso de residencia. En cuanto a los extranjeros que no pretendan desempe?ar actividades lucrativas estar¨¢n sujetos a la posible comprobaci¨®n por parte de los agentes de la autoridad de que poseen recursos econ¨®micos suficientes para su sostenimiento durante la estancia en Espa?a y para el retorno al pa¨ªs de procedencia.

Posteriormente se han cursado ¨®rdenes concretas a los gobernadores civiles de toda Espa?a en torno a la aplicaci¨®n de dichas normas y, en general, a la regularizaci¨®n de la situaci¨®n legal de los extranjeros en nuestro pa¨ªs. Esas ¨®rdenes tienden a lograr una aplicaci¨®n restrictiva de las normas en vigor en las que se deba un plazo de sesenta d¨ªas para que todo ciudadano extranjero procediera a regularizar su documentaci¨®n.

Problemas derivados de la falta de un trabajo retribuido, donde pueda acreditarse la percepci¨®n de un sueldo mensual y aportaciones normales a la Seguridad Social, as¨ª como no demostrar la posesi¨®n de una determinada cantidad diaria para su sostenimiento pueden acarrear, en el primer caso, la expulsi¨®n de Espa?a por no concesi¨®n de los permisos de trabajo y residencia, y en el segundo, la imposibilidad de residir en nuestro pa¨ªs como turistas.

Por otra parte, las reiteradas peticiones de la colonia extranjera en Espa?a -en especial la latinoamericana- en pro de un estatuto del refugiado pol¨ªtico no han sido atendidas hasta el momento.