Hay votos que no se venden

Una persona que act¨²a en pol¨ªtica tiene que aceptar el hecho de que se especule con sus posiciones actuales o de futuro. No puede estar continuamente saliendo al paso de cualquier rumor con notas aclaratorias, y ello explica mi silencio acerca de los rumores que han especulado ¨²ltimamente, sin ning¨²n fundamento real, con mi inclusi¨®n o mi exclusi¨®n de la operaci¨®n ?Nueva Mayor¨ªa? o con mis relaciones con UCD. Pero el especial relieve y difusi¨®n que l¨®gicamente tiene una entrevista con el presidente del Gobierno, como la publicada el domingo en EL PAIS, y el hecho de que en ella se haya recogido el rumor de un supuesto ofrecimiento m¨ªo a UCD, sin que quede clara mi situaci¨®n, de modo que quien la lea puede hacer toda clase de suposiciones, me obliga, por respeto a la opini¨®n p¨²blica y a m¨ª mismo, a precisar con toda claridad que carecen del m¨¢s m¨ªnimo fundamento los rumores sobre gestiones u ofrecimientos por mi parte en relaci¨®n con cualquier formaci¨®n pol¨ªtica.

No pertenezco a ning¨²n partido, como en su momento se hizo p¨²blico, y como diputado por Toledo estoy adscrito al grupo parlamentario de AP, por el que fui elegido y en el que procuro cumplir con dignidad y congruencia mis deberes parlamentarios al servicio de Espa?a.

El presidente del Gobierno hace bien al considerar en su entrevista que comprar votos ni es moral ni resulta ¨²til. Quiz¨¢ podr¨ªa a?adirse que adem¨¢s, hay votos que no se venden ni se mueven por veleidades o apetencias de poder, y entre ellos est¨¢ el m¨ªo. Creo que mi dimisi¨®n de una vicepresidencia del Gobierno, por cuestiones de principios. pol¨ªtico-sociales, constituye un antecedente v¨¢lido para enjuiciar mis criterios y comportamientos pol¨ªticos.