Todos los grupos parlamentarios excepto UCD se oponen al Plan Energ¨¦tico
Decepcionante, soso, aburrido o calificativos de similar alcance fueron los dedicados por numerosos diputados presentes en el hemiciclo a la mayor¨ªa de las intervenciones de la sesi¨®n plenaria del Congreso dedicada en exclusiva al debate del Plan Energ¨¦tico Nacional (PEN), que tanta expectaci¨®n hab¨ªa levantado, ya que se esperaba que supusiera el primer enfrentamiento serio tras el te¨®ricamente finiquitado consenso parlamentario. Hubo muchos diputados, especialmente de UCD, que no esperaron al final, casi ni al principio, ya que las gradas pertenecientes a este partido se encontraban desde el inicio de la sesi¨®n limpias de un elevado, porcentaje de parlamentarios.
Abri¨® la sesi¨®n el titular de Industria y Energ¨ªa, Agust¨ªn Rodr¨ªguez Sahag¨²n, que comenz¨® recordando que en los ¨²ltimos 50.000 a?os y en las ochocientas generaciones que se han sucedido, solamente una ha vivido los problemas causados por la escasez de energ¨ªa. El ministro, tras rese?ar que la energ¨ªa condiciona el estilo de vida de nuestro tiempo, se?al¨® que renunciar al crecimiento no es la soluci¨®n viable al desaf¨ªo de la crisis. ?El PEN significa la racionalizaci¨®n del problema de la energia; se trata de poner los medios para no renunciar a unas cotas de bienestar a las que el pueblo espa?ol tiene derecho.?Libertades m¨¢s energ¨ªa
Para el se?or Rodr¨ªguez Sahag¨²n, el PEN es coherente con el modelo de sociedad en que creemos y al que la mayor¨ªa del pueblo espa?ol ha dado su conformidad: la sociedad de libertades. ?Si Lenin pudo decir que el comunismo eran los soviets mas la electrificaci¨®n, nosotros afirmamos que nuestro modelo de convivencia son las libertades m¨¢s la energ¨ªa?. Subray¨® que la intenci¨®n del PEN es pasar de la econom¨ªa del despilfarro y del desarrollismo a ultranza a la econom¨ªa del realismo y la sensatez.
Hizo hincapi¨¦ en la flexibilidad del PEN, ya que ¨¦sta permitir¨¢ adecuar el abastecimiento energ¨¦tico espa?ol a las necesidades de cada momento. Y tras rese?ar que el ahorro de energ¨ªa es el objetivo del Plan Energ¨¦tico Nacional, defini¨® a ¨¦ste como ?el que persigue un mayor autoabastecimiento, una mayor participaci¨®n del ciudadano, una palanca de la reactivaci¨®n econ¨®mica y una mayor flexibilidad para no tener que gobernar a oscuras en 1987?.
La oposici¨®n del PSOE
Por parte del PSOE, que intervino en ¨²ltimo lugar, habl¨® Javier Solana, quien comenz¨® diciendo que el plan presentado por el Gobierno no trata de dirigir el futuro del sector, sino m¨¢s bien de planificar el pasado, o, dicho m¨¢s claramente, de justificar la licencia futura de unas decisiones adoptadas en los ¨²ltimos a?os, y lo que es m¨¢s grave, tratando de legitimarlas y perpetuando en gran medida la misma pol¨ªtica.
?En definitiva, el PEN constituye una verdadera planificaci¨®n retrospectiva. Lo reconoce el propio PEN del Gobierno cuando dice que el grueso de las decisiones que afectan a los pr¨®ximos diez a?os est¨¢ ya tomado y en curso, por lo que el margen de acci¨®n resulta muy reducido.?
A lo largo de su muy extensa intervencion, el se?or Solana analiz¨® punto por punto los aspectos m¨¢s representativos abordados en el PEN, y fij¨® la pol¨ªtica energ¨¦tica del PSOE, que se concreta, seg¨²n se?al¨®, en lo que podr¨ªamos denominar ?ruptura energ¨¦tica? en un doble sentido: ruptura de la prioridad de intereses y ruptura institucional.
?Con esta filosof¨ªa -a?adi¨®- existen tres niveles de cuestiones que deber¨ªa hacer frente un plan energ¨¦tico digno de tal nombre. En primer lugar, los aspectos que implican toda la problem¨¢tica del modelo de desarrollo y que debe plasmarse finalmente en una previsi¨®n concreta de un crecimiento energ¨¦tico y en una distribuci¨®n de ese crecimiento en funci¨®n de las diferentes ofertas energ¨¦ticas. En segundo lugar, es necesaria la especificaci¨®n de los objetivos concretos que se pretende alcanzar. Finalmente, la estrategia para alcanzar estos objetivos, mediante medidas de tipo administrativo o institucional.?
Respecto a los objetivos del PEN, el parlamentario socialista dijo que exist¨ªan diferencias, a su vez, entre el Gobierno y los socialistas, aunque concedi¨® estar de acuerdo en objetivos tales como: la disminuci¨®n de energ¨ªas no renovables, la conservaci¨®n y mejora del medio ambiente, el fomento del desarrollo tecnol¨®gico, el fomento de los recursos energ¨¦ticos minerales y el desarrollo y reconversi¨®n industrial.
Especial menci¨®n del diputado Javier Solana mereci¨® el subsector nuclear, para el cual defendi¨® la nacionalizaci¨®n en base a que de los seis apartados de la fisi¨®n nuclear, cinco tienen que ser resueltos por el Estado. Solamente el quemado del combustible en el reactor y producci¨®n de energ¨ªa el¨¦ctrica puede ser resuelto por las empresas privadas. ?Quiere esto decir, evidentemente, que un planteamiento conjunto del ciclo nuclear desborda completamente el marco de la empresa privada.?
El diputado Ram¨®n Tamames, del Grupo parlamentario Comunista, subi¨® al estrado para rechazar la versi¨®n presentada por el Gobierno del PEN, en base a su alejamiento de las previsiones hechas en los pactos de la Moncloa. En este sentido, el PCE ha acordado que la documentaci¨®n remitida por el Gobierno, junto a la nueva informaci¨®n requerida, sea trasladada a la Comisi¨®n de Industria y Energ¨ªa del Congreso, que deber¨¢ fijar las bases precisas para una nueva elaboraci¨®n del PEN.
En opini¨®n de los comunistas, la citada Comisi¨®n deber¨¢ tener en cuenta en su estudio los siguientes criterios: asegurar la participaci¨®n de los entes auton¨®micos, y dem¨¢s fuerzas sociales en las decisiones sobre pol¨ªtica energ¨¦tica, que la financiaci¨®n del PEN se establezca limitando el recurso a las ampliaciones del capital; adoptar las medidas institucionales para asegurar el control p¨²blico del RECA (repartidor de cargas) y red de alta tensi¨®n; creaci¨®n de un consejo de seguridad nuclear dependiente del Congreso; creaci¨®n de una empresa p¨²blica para la explotaci¨®n y construcci¨®n de centrales nucleares; creaci¨®n de un ente p¨²blico de hidrocarburos; constituci¨®n de un fondo nacional para la financiaci¨®n de proyectos de investigaci¨®n y desarrollo de nuevas fuentes de energ¨ªa, y elaboraci¨®n y realizaci¨®n de un plan nacional de prospecci¨®n y explotaci¨®n de recursos energ¨¦ticos.
Las criticas de AP
El diputado aliancista Antonio del Valle inici¨® su parlamento mostrando su disgusto por el retraso sufrido en la elaboraci¨®n del PEN.
En s¨ªntesis, los consejos del grupo de Alianza Popular fueron los siguientes: que se analicen las influencias del plan en el desarrollo industrial del pa¨ªs; calcular la oferta nacional de energ¨ªa privada sobre bases m¨¢s realistas; incrementar la inversi¨®n de los programas de investigaci¨®n, incluidas las energ¨ªas alternativas, as¨ª como proyectar una acci¨®n m¨¢s vigorosa de la electrificaci¨®n rural; intentar que los controles que el Estado establezca no perturben la eficacia operativa del sistema: plantearse los proyectos de gran alcance, para al futuro, que estimulen y dinamicen el sector; instrumentar en el propio PEN las mec¨¢nicas y los cauces de financiaci¨®n que permitan disponer de los cr¨¦ditos necesarios, establecer compensaciones adecuadas a las regiones con excedentes de producci¨®n; completar con un ¨ªndice de actuaci¨®n el propio PEN, y actualizar urgentemente precios y tarifas que eviten la progresiva descapitalizaci¨®n, con todas las secuelas de repercusi¨®n que esto tiene. El se?or Del Valle, durante su intervenci¨®n, hizo una defensa dura de la iniciativa privada y del sistema de libre empresa. ?La defensa de los intereses generales no pasa forzosamente por la empresa p¨²blica o las nacionalizaciones.?
La postura de los regionalistas
A lo largo de la sesi¨®n subieron al estrado, para exponer sus diferentes posturas, los distintos grupos parlamentarios o partidos pol¨ªticos de car¨¢cter regional. As¨ª, Marcos Vizcaya, del PNV, se?al¨® la carencia de medidas y datos concretos del PEN, aunque no mostr¨® su oposici¨®n al car¨¢cter general de los planteamientos del plan. Sin embargo, se?al¨® que dar el visto bueno, sin m¨¢s, y dadas las circunstancias rese?adas, significa dar un cheque en blanco al Gobierno
El parlamentario Maci¨¢ Alavedra, del grupo calat¨¢n, hizo un an¨¢lisis t¨¦cnico del contenido del PEN y se?al¨® que era absolutamente necesario un debate m¨¢s en profundidad, con objeto de decidir con m¨¢s claridad las posturas y los objetivos a los que ser¨ªa deseable llegar. Hizo especial referencia al sector del gas y a las omisiones que ¨¦l encontraba en la pol¨ªtica, incluida en el seno del documento energ¨¦tico.
Otro de los parlamentarios que intervino en esta larga sesi¨®n fue el representante de la izquierda vasca, se?or Letamend¨ªa, quien habl¨® casi exclusivamente del tema nuclear y a los efectos que su desarrollo tiene en el Pa¨ªs Vasco, considerando que no era absolutamente necesario la continuidad del programa nuclear que el PEN prev¨¦.
Por ¨²ltimo intervino el se?or Triginer, del Grupo de Socialistas de Catalu?a, el cual hizo un an¨¢lisis valorativo del contenido del texto, que no se desvi¨® en gran medida de los planteamientos realizados por el se?or Solana en su intervenci¨®n y que han sido rese?ados con anterioridad.
UCD: "El Plan cumple los acuerdos de la Moncloa"
En nombre de UCD, el diputado G¨®mez Angulo afirm¨® que el PEN cumple las directrices acordadas en los pactos de la Moncloa, y en relaci¨®n con la energ¨ªa nuclear manifest¨® que, sin minimizar los problemas que ella comporta, es la ¨²nica alternativa viable al petr¨®leo. Asimismo ratific¨® la necesidad de una ampliaci¨®n en la informaci¨®n p¨²blica sobre el tenia y que las Cortes y los entes auton¨®micos participen en las decisiones m¨¢s importantes.
Tan s¨®lo quince diputados de UCD quedaban en el hemiciclo cuando se produjo la intervenci¨®n de su portavoz en este tema.
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