Programaci¨®n de TVE
En su publicaci¨®n del domingo d¨ªa 22 de octubre de 1978 puedo leer el anuncio de la pr¨®xima desaparici¨®n en las emisiones de RTVE del programa juvenil La Semana y sobre la censura a que fue sometido en los ¨²ltimos tiempos por parte de la direcci¨®n de TVE.Es del todo inconcebible y al mismo tiempo indignante ver c¨®mo d¨ªa ad¨ªa desaparecen de la programaci¨®n de RTVE los pocos programas culturales y m¨¢s interesantes, como, por ejemplo, Escuela de salud y La Semana, y, sin embargo, se siguen emitiendo cuatro o cinco horas semanales de pel¨ªculas que reflejan y justifican la violencia. Adem¨¢s, con el agravante de que se emiten a horas en las cuales el n¨²mero de telespectadores es mayor. El otro d¨ªa, viendo un espacio de Escuela de salud dedicado a analizar la problem¨¢tica de las madres solteras, pens¨¦ cu¨¢n beneficioso hubiera sido para todos los espa?oles haber emitido primero este programa en vez de Starsky y Hutch, pues considero que el programa era un buen medio para conocer los problemas que actualmente tienen planteados las madres solteras en Espa?a y, al mismo tiempo ayudar a que desaparezcan los prejuicios que la sociedad espa?ola -por desgracia- todav¨ªa tiene respecto a ¨¦stas.
Desde mi punto de vista, las emisiones de una buena cadena de televisi¨®n se han de caracterizar por sus programas formativos, culturales y su informaci¨®n objetiva, y no basar su programaci¨®n, primordialmente, en espacios de violencia, distracci¨®n y anuncios, como es el caso de RTVE.
Por qu¨¦ no se seleccionan mejor los programas de RTVE?
?Por qu¨¦ dejan de emitirse programas que tanto pueden ayudar a la formaci¨®n cultural y ciudadana los espa?oles y que tan buena aceptaci¨®n han tenido por parte de ¨¦stos??Por qu¨¦ se censura todav¨ªa, como en el caso que menciona Francisco Garc¨ªa Novell que ha sucedido con su programa La Semana?
El que esto ocurra todav¨ªa -como en los mejores tiempos del franquismo- es intolerable, no ayuda en nada a mejorar la imagen de RTVE y s¨ª a darles, en parte, la raz¨®n a aquellos que aseguran que aqu¨ª no ha cambiado nada. Al mismo tiempo con esta censura se pone de manifiesto que para ciertos grupos y partidos las palabras que frecuentemente mencionan democracia y libertad son muy bellas pero huecas, porque sus hechos as¨ª lo demuestran.
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