El canciller austr¨ªaco puede continuar en su puesto
El Partido Socialista austr¨ªaco ha respaldado al canciller Bruno Kreisky y no le exige dimitir, a pesar de que ¨¦ste, con suficiente claridad, dio a entender la v¨ªspera del refer¨¦ndum del domingo sobre la central nuclear de Zwentendorf, ligeramente negativa para el canciller, que vinculaba su futuro personal a la decisi¨®n de las urnas sobre la primera central at¨®mica de Austria.A un a?o de las elecciones generales austr¨ªacas, que deber¨¢n tener lugar en octubre de 1979, el Partido Socialista prefiere mantener el actual panorama de fuerzas en el Parlamento federal.
La flexibilidad de la pol¨ªtica austr¨ªaca parece significar en estos momentos la aceptaci¨®n de un jefe de Gobierno que arriesg¨® su mantenimiento en el puesto convocando el primer refer¨¦ndum de la moderna historia austr¨ªaca, y que sali¨® derrotado del mismo y que, a pesar de reconocer su derrota, parece que continuar¨¢ en la Canciller¨ªa.
Para Bruno Kreisky, invitar a los austr¨ªacos a expresarse sobre la central nuclear de Zwentendorf significaba desvincular las pr¨®ximas elecciones al problema de la introducci¨®n o marginaci¨®n de la energ¨ªa nuclear para Fines industriales.
Su ?derrota personal? no s¨®lo no ha resuelto la papeleta, sino que incluso la ha agravado dentro y fuera del ¨¢mbito del partido. Para los socialistas, pesa el que solamente una diferencia de 30.000 votos sobre cinco millones de austr¨ªacos en edad electoral ha inclinado el resultado del refer¨¦ndum en contra de la entrada en funcionamiento de la central nuclear. Tambi¨¦n que el voto de los m¨¢s refractarios, los ciudadanos de la regi¨®n de Vorarlberg, cercana a Suiza, ha sido una manifestaci¨®n contra otra central nuclear que se construye en el pa¨ªs vecino, no lejos de la frontera con Austria.
Indirectamente, la derrota electoral de Kreisky puede convertirse en apoyo indirecto a su partido en las elecciones del pr¨®ximo a?o. Para los austr¨ªacos, es de valorar el que el canciller haya preferido el recurso a una consulta popular, en lugar de conformarse, en este caso, con una votaci¨®n parlamentar¨ªa que, dado el contexto legislativo, habr¨ªa ganado sin graves problemas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.