Dos muertos en enfrentamientos con las FOP

El d¨ªa 4 de diciembre de 1977, Manuel Garc¨ªa Caparr¨®s, de diecinueve a?os, mor¨ªa en M¨¢laga en un enfrentamiento con la polic¨ªa despu¨¦s de que los manifestantes intentaron colocar en los balcones de la Diputaci¨®n una bandera andaluza.Ese d¨ªa Andaluc¨ªa y Galicia se echaron a la calle para pedir su autonom¨ªa. Las manifestaciones preautonomistas se desarrollaron e n un clima de exaltaci¨®n y de alegr¨ªa. Un mill¨®n de andaluces y 400.000 gallegos llenaron las calles y plazas con sus banderas.

Esta fiesta auton¨®mica se vio truncada en M¨¢laga, donde el presidente de la Diputaci¨®n, Francisco Cabeza L¨®pez, se neg¨® a que la bandera andaluza ondease junto a la nacional en la sede del organismo provincial. A pesar de esta actitud, catalogada como una provocaci¨®n, la manifestaci¨®n pro autonom¨ªa, con m¨¢s de 150.000 personas, pas¨® junto a la Diputaci¨®n sin mayores incidentes. El edificio estaba custodiado por efectivos antidisturbios de la Polic¨ªa Armada. Junto a ellos, con banderas nacionales, se encontraban varios militantes de extrema derecha que d¨ªas antes hab¨ªan protagonizado acciones violentas. Algunos manifestantes que iban al final de la marcha se quedaron junto al edificio de la Diputaci¨®n y un joven escal¨® la fachada y coloc¨® una bandera verdiblanca junto a la nacional. Despu¨¦s empezaron los enfrentamientos.

Mientras, el grueso de la manifestaci¨®n continu¨® su recorrido sin saber que en retaguardia se estaban produciendo enfrentamientos de gravedad. Llegados al punto final, la muchedumbre empez¨® a dispersarse en perfecto orden haciendo el camino de vuelta hacia el centro de la ciudad, pero ?al llegar al puente de Tetu¨¢n se encontraron con una aut¨¦ntica batalla. Los botes de humo, las balas de goma y luego Ias de plomo, sembraron la confusi¨®n. Abundaron las carreras, los atropellos, las ca¨ªdas al suelo de mujeres y ni?os. Los manifestantes arrojaban piedras contra los polic¨ªas, ¨¦stos hicieron uso de sus armas y fue entonces cuando cay¨® herido mortalmente Manuel Garc¨ªa Caparr¨®s.

Los d¨ªas siguientes M¨¢laga vivi¨® unos momentos de gran tensi¨®n. El lunes d¨ªa 5 se celebr¨® el entierro de Garc¨ªa Caparr¨®s, al que asistieron unas 30.000 personas, se repitieron los enfrentamientos con la polic¨ªa y fue incendiada la sede de Fuerza Nueva. El martes 6 M¨¢laga qued¨® paralizada por la huelga general de protesta y los choques, con las fuerzas antidisturbios fueron particularmente violentos.

Tan s¨®lo una semana despu¨¦s, Tenerife, viv¨ªa unos momentos de similar tensi¨®n. El 12 de diciembre, Javier Fern¨¢ndez Quesada, estudiante de biol¨®gicas, mor¨ªa en el vest¨ªbulo de la Universidad de La Laguna (Tenerife), por disparos de la Guardia Civil, durante los incidentes que acompa?aron, a la jornada de huelga general convocada por los Sindicatos Unitarios y la Confederaci¨®n de Trabajadores Canarios, para protestar por la grave situaci¨®n social que vive la isla.

El suceso ocurri¨® a partir de la celebraci¨®n de una asamblea de estudiantes en la Universidad de La Laguna, tras la cual grupos de universitarios salieron en manifestaci¨®n. Hacia las tres de la tarde arreciaron los enfrentamientos con la Polic¨ªa Armada, que pidi¨® ayuda a la Guardia Civil. Los universitarios que presenciaron el hecho afirmaron que la bala que, acab¨® con la vida de Fern¨¢ndez Quesada fue disparada directamente contra la puerta de entrada de la Universidad en el transcurso de una carga de la Guardia Civil con fuego real.

Durante los tres d¨ªas siguientes se registraron graves enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas p¨²blicas en Santa Cruz de Tenerife, La Laguna y Las Palmas de Gran Canaria.