La CEE intenta hoy definir su pol¨ªtica pesquera

?C¨®mo lograr que los brit¨¢nicos acepten una pol¨ªtica com¨²n pesquera en el interior de las doscientas millas de aguas controladas por la CEE? Tal es el dilema que, desde enero de 1977, se plantean los expertos de la Comisi¨®n Europea y los ministros responsables del sector pesquero de ocho Estados de la CEE. Una vez m¨¢s, el Consejo de Pesca de la CEE se re¨²ne en la capital belga, con la d¨¦bil esperanza que John Silkin, ministro brit¨¢nico de Pesca, acepte un ?compromiso?. Del ?yes? brit¨¢nico a la definici¨®n de un mercado com¨²n de la pesca depende, en buena parte, que Londres acceda tambi¨¦n a firmar los acuerdos-marco, negociados actualmente por la CEE con varios pa¨ªses no-miembros, entre los que figura Espa?a.Por el momento, Silkin acepta negociar, hecho que consideran como positivo las restantes delegaciones, que se esperan a una marat¨®n pesquera que podr¨ªa durar todo el fin de semana y primeros d¨ªas de la pr¨®xima. Un deshielo en el sector pesquero contribuir¨¢ a mejorar el ?clima? que reina actualmente entre Londres y las dem¨¢s capitales de la CEE, a pocos d¨ªas de la cumbre europea de jefes de Estado y de Gobierno de la CEE.

Negociaci¨®n con Espa?a

La situaci¨®n hispano-comunitar¨ªa, en el sector pesquero, se centra actualmente en la b¨²squeda de un acuerdo global para todo el a?o 1979, a diferencia de los anteriores que se han ido prorrogando mensual o trimestralmente, con la consiguiente incertidumbre para la flota pesquera espa?ola que faena en la zona de las doscientas millas de aguas comunitarias. Conseguir una pr¨®rroga del ?compromiso? de este ¨²ltimo trimestre para el a?o pr¨®ximo es el objetivo de los negociadores espa?oles. En cifras se intenta consolidar para el a?o pr¨®ximo las actuales 240 licencias para pesca de altura, a fin de capturar unas 18.000 toneladas de merluza, m¨¢s otras especies asociadas. Una nueva ronda de negociaciones entre espa?oles y comunitarios, el 29 de este mes en Bruselas, aportar¨¢ nuevas precisiones cara al futuro.

No hay que olvidar que los cupos que la CEE concede unilateralmente a Espa?a, al no existir compensaciones pesqueras espa?olas para los barcos de la CEE, van ligados a los dem¨¢s cupos que otorga, tambi¨¦n, a otros Estados no miembros y a su propio reparto entre los pa¨ªses pesqueros CEE, Los brit¨¢nicos son reacios a un ?mercado interno de la pesca? (excepto si reconoce una serie de privilegios para su flota y sus reservas de pesca, que suponen el 70% de recursos pesqueros CEE), pero, al contrario, si respetan el princip¨ªo de una pol¨ªtica com¨²n pesquera cara al exterior. De ah¨ª que Londres mire con lupa toda concesi¨®n a un pa¨ªs tercero, como es todav¨ªa Espa?a. Es evidente que habr¨¢ continuidad para 1979 de las concesiones pesqueras comunitarias a Espa?a. Saber en qu¨¦ medida y proporciones, es todav¨ªa una inc¨®gnita que pol¨ªticamente, ante un pa¨ªs candidato a la adhesi¨®n, no podr¨¢ resolverse con cifras inferiores a las que se conceden actualmente.