Una Constituci¨®n no es una enc¨ªclica

Como cat¨®lico y como espa?ol no puedo dejar de pronunciarme ante esta ?ola? de notas¨® cartas eclesi¨¢sticas sobre la Constituci¨®n. Me sorprende y duele que la Iglesia, que debiera ser ejemplo de unidad al menos en su magisterio, nos vuelva locos a los cat¨®licos con un intercambio de pretendidas orientaciones cristianas que demuestran, como en este caso, una clara inclinaci¨®n pol¨ªtica. Considero que la carta ilustradora de monse?or Marcelo Gonz¨¢lez contiene una solapada pero evidente invitaci¨®n al ?no? o a la ?abstenci¨®n? el pr¨®ximo d¨ªa 6 de diciembre. Esto es una democracia, todos deben hablar, pero ?debe la Iglesia decir a sus fieles qu¨¦ opci¨®n concreta deben tomar? En rotundo, no.La carta de monse?or Gonz¨¢lez invita al ?no? al afirmar que se tra ta de una Constituci¨®n no referida a la ley divina y ?su voto ha de fa vorecer solamente a aquellas estructuras sociales que no est¨¦n en pugna con la ley de Dios?. Asimismo, invita a la ?abstenci¨®n? cuando se lamenta que ?los cat¨®licos se vean obligados a tomar una opci¨®n que puede dejar intranquila su conciencia?; no pueden votar ?no? porque ?otros cat¨®licos les tachen de intolerantes? -extra?a raz¨®n- y si votan ?s¨ª? lo hacen ?con disgusto de s¨ª mismos?. Por tanto, todo cat¨®lico que quiera dormir en paz debe abstenerse.

Una Constituci¨®n no es una enc¨ªclica, ni el Parlamento la Santa Sede. El Evangelio y la doctrina apost¨®lica est¨¢n llenos de citas que denuncian y condenan la opresi¨®n, el autoritarismo, el abuso de poder y la violencia; que afirman la dignidad y respeto a la persona humana; que claman por la paz, la libertad, la justicia y la igualdad entre los hombres. Si todas estas premisas est¨¢n reflejadas en la Constituci¨®n, no creo que ¨¦sta sea tan mala e indeseable para un cat¨®lico. Dios no est¨¢ m¨¢s presente en una ley civil porque se le cite en ella expresamente, sino en la medida que esa ley busca el bien del hombre. Y el pre¨¢mbulo de la Constituci¨®n as¨ª lo predica. La lucha del cristiano estar¨¢ en que ese objetivo se cumpla totalmente.

Los fieles le piden a monse?or Gonz¨¢lez ?luz para ayudarles a formar su juicio?. Piden orientaci¨®n y a cambio se les dice que la papeleta deben introducir en la urna. Esto ya no es democracia ni libertad de conciencia.