Los exportadores de petr¨®leo parecen decididos a un incremento moderado del precio de los crudos

El aumento del precio del petr¨®leo, que ser¨¢ aprobado en la reuni¨®n de pa¨ªses exportadores que se inicia hoy en Abu Dhabi no exceder¨¢ del 10%, seg¨²n las informaciones m¨¢s solventes que a ¨²ltima hora de ayer pudieron obtener diversos corresponsales de EL PAIS destacados en las capitales ¨¢rabes y europeas. Tales informaciones proceden siempre de fuentes ¨¢rabes. Los trece miembros de la OPEP parece que se han decidido a este aumento moderado de las diversas opciones manifestadas en los contactos previos, en el curso de los cuales Arabia Saudita propon¨ªa menos del 5%, Argelia y Libia proponen un aumento escalonado entre el 5 y el 15 % y Venezuela estima que debe procederse ya a un incremento del 10 %. El aumento del 5 % durante el primer semestre: de 1979 y de un 5 % adicional en el segundo semestre supondr¨ªa para Espa?a un coste adicional de las importaciones de petr¨®leo de unos 30.000 millones de pesetas.

Todas las miradas de los responsables econ¨®micos de las sociedades occidentales confluir¨¢n el d¨ªa 16 en Abu Dhabi, capital de los Emiratos Arabes Unidos del Golfo P¨¦rsico, donde va a tener lugar la conferencia semestral de la OPEP (Organizaci¨®n de Pa¨ªses Exportadores de Petr¨®leo) y donde va a decidirse una importante subida en el precio de los crudos, que afectar¨¢ de forma muy importante a las econom¨ªas de los pa¨ªses occidentales.La inquietud de los pa¨ªses que dependen del ?oro negro? para mantener sus econom¨ªas de consumo y bienestar, se ve agravada por el cariz que han tomado los acontecimientos en Ir¨¢n, donde la producci¨®n se ha visto seriamente afectada y disminuida, lo que reforzar¨ªa la postura de algunos pa¨ªses miembros de la OPEP, que desean un fuerte aumento de los precios.

El precio actual del petr¨®leo est¨¢ fijado en 12,70 d¨®lares el barril, si bien ya se han comenzado a pagar precios extraoficiales m¨¢s altos. En Espa?a se han concedido autorizaciones de compra de crudos a precios superiores, que oscilar¨ªan entre un 4% y un 8% por encima de la tarifa oficial.

La carrera de los precios del petr¨®leo arranca desde la cuadruplicaci¨®n de los mismos en 1973, en que estalla la crisis energ¨¦tica, a¨²n sin superar.

Los precios reales del petr¨®leo

Partiendo del cuadro de precios que refleja el gr¨¢fico puede observarse el casi estancamiento de los mismos desde 1974. A partir de entonces, los precios reales del petr¨®leo bruto han perdido m¨¢s del 60% de su poder real de compra, debido a la favorable relaci¨®n de intercambio comercial para los pa¨ªses industrializados compradores de crudos, a la inflaci¨®n mundial y a la depreciaci¨®n del d¨®lar.

Seg¨²n Le Monde, si tomamos como base el precio oficial de venta del crudo de referencia ¨¢rabe, ligero de 34? API, se observa que ha pasado de 10,83 d¨®lares/barril en 1974 a 12,70 d¨®lares en 1978, lo que representa un aumento del 17,26 %. En el mismo per¨ªodo, los precios de los productos refinados entregados al consumidor final en los pa¨ªses europeos han pasado de una media ponderada de 25,75 d¨®lares a casi cuarenta d¨®lares/barril, lo que supone un incremento del 55,6 %. Por otra parte, la proporci¨®n de los ingresos de los pa¨ªses exportadores en los precios pagados por el consumidor europeo ha pasado del 33,3 % al 27,5 %, mientras que la proporci¨®n que absorbe el fisco en los pa¨ªses europeos ha pasado del 37,2 % al 46,4 % como t¨¦rmino medio, alcanzando algunos carburantes un gravamen fiscal del 70%.

Los dirigentes de los pa¨ªses de la OPEP son conscientes de la devaluaci¨®n real que sus ingresos sufren, por la inflaci¨®n y el descenso del d¨®lar, y est¨¢n dispuestos a revisar el precio de los crudos. Pero no se ponen de acuerdo en la cuant¨ªa del aumento. Antes del inicio de la crisis iran¨ª se observaban dos bloques de pa¨ªses dentro de la OPEP. Por una parte, los llamados ?moderados? (Arabia Saudita, Kuwait, Emiratos Arabes, el propio Ir¨¢n), que postulaban un aumento de los precios; del orden del 5 %. Por otra parte, el bloque de pa¨ªses ?duros? (Argelia, Libia, Irak), que manten¨ªan la necesidad de un aumento superior al 10 %, a veces considerablernente superior. As¨ª, el ministro del Petr¨®leo de Irak, Tayed Abdul-Karim, declar¨® a principios del pasado noviembre que ?el incremento de los precios debe ser justo y aceptable para reducir a un m¨ªnimo las p¨¦rdidas que sufrimos a consecuencia de la inflaci¨®n y de la depreciaci¨®n del d¨®lar?. Abdul-Karim a?adi¨® que los pa¨ªses de la OPEP no aspiran, por ahora, a compensar plenamente sus p¨¦rdi- das, aunque el poder adquisitivo de los 12,70 d¨®lares /barril, precio actual del petr¨®leo, haya quedado reducido a cuatro d¨®lares, en com- paraci¨®n con los precios de 1974. Irak considera que ha sufrido p¨¦rdidas por valor de quinientos millones de d¨®lares anuales como consecuencia de la crisis del d¨®lar. Desde: comienzos de 1976, la depreciaci¨®n de la divisa estadounidense supuso para los pa¨ªses exportadores de petr¨®leo p¨¦rdidas entre un 11 % y un 15 %, adem¨¢s de la depreciaci¨®n real de un 30 % anual a consecuencia de la inflaci¨®n, concluy¨® el ministro iraqu¨ª. Su colega kuwait¨ª, en declaraciones realizadas el pasado 10 de octubre a la revista Middle East Economic Survey, afirm¨®: ?Hemos perdido un 15% de nuestros ingresos por culpa de la inflaci¨®n y otro 15% debido a las fluctuaciones de los cambios de las divisas extranjeras. Puede que no sea muy realista presionar para lograr una compensaci¨®n total de todo lo perdido de una vez. ?

El nuevo precio del petr¨®leo, que probablemente saldr¨¢ de la conferencia de Abu Dhabi, ser¨¢ una soluci¨®n de compromiso y equilibrio entre las diferentes facciones de la OPEP, que est¨¢ compuesta por naciones con reg¨ªmenes pol¨ªticos e intereses econ¨®micos y estrat¨¦gicos abiertamente divergentes. Una soluci¨®n de compromiso fue esbozada por el kuwait¨ª Sheik Ali Khalifa Al-Sabah, actual presidente de la OPEP, durante su reciente visita a Venezuela, al declarar que su pa¨ªs no ver¨ªa con desagrado un mecanismo de aumento basado en peque?as subidas trimestrales de un 2 o un 2,5 %, evitando los grandes aumentos repentinos, que podr¨ªan llevar a un colapso econ¨®mico mundial.

La anterior Conferencia de la OPEP, celebrada en Ginebra a mediadios del pasado mes de junio, confirm¨® la divisi¨®n de la organizaci¨®n en diferentes bloques, pero se impuso la opini¨®n de los pa¨ªses ?moderados? de aplazar el alza de los precios y convencer a la mayor¨ªa de los pa¨ªses miembros de la necesidad de dar un nuevo voto de confianza a las econom¨ªas occidentales (en las que los ¨¢rabes participan por medio de sus abundantes ?petrod¨®lares?) y evitar, en lo posible, una nueva crisis en el sistema econ¨®mico internacional.

Los protagonistas de las decisiones.

Los principales art¨ªfices de los acuerdos y compromisos en el seno de la OPEP son los ministros del Petr¨®leo y los representantes de los pa¨ªses miembros. Detr¨¢s de las instituciones y sus comunicados oficiales est¨¢n siempre los hombres responsables de la toma de decisiones. De sus decisiones y acuerdos depende una parte del sistema econ¨®mico internacional y, en consecuencia, los pa¨ªses y sus habitantes, es decir, todos nosotros. El jeque Zaqui Yamani, ministro del Petr¨®leo de Arabia Saudita, es quiz¨¢ el hombre m¨¢s influyente en el seno de la OPEP. Su pa¨ªs es el m¨¢ximo productor entre los miembros de la organizaci¨®n, y el tercer productor mundial, s¨®lo superado por la Uni¨®n Sovi¨¦tica y Estados Unidos (v¨¦ase cuadro l). Su participaci¨®n en la conferencia de Ginebra fue decisiva para, junto con sus naturales aliados, Ir¨¢n y los peque?os emiratos del golfo P¨¦rsico, convencer a los pa¨ªses dubitativos y evitar el aumento de los crudos propuesto por los pa¨ªses ?radicales? (Argelia, Libia). Para los representantes de estos pa¨ªses, Ait-Laoussine, presidente de Sonatrach, la empresa petrol¨ªfera estatal argelina, y Ezzedin Ali Mabruk, ministro libio del Petr¨®leo, la actuaci¨®n de Yamani es consecuencia directa de presiones pol¨ªticas norteamericanas, que dividen a la OPEP y hacen perder poder pol¨ªtico a la Organizaci¨®n, debilitando su fuerza negociadora.

Durante el tiempo transcurrido desde la conferencia de Ginebra, la totalidad de los pa¨ªses de la OPEP, a pesar del apoyo prestado a las econom¨ªas occidentales y el mantenimiento del d¨®lar como divisa que fija los precios del petr¨®leo (no olvidemos que en las reuniones preparatorias a la conferencia de Ginebra se baraj¨® la posibilidad de sustituir el d¨®lar por una cesta de monedas m¨¢s estables), han aceptado como irremediable la necesidad de que el incremento de los crudos se produzca.

La soluci¨®n del compromiso a la que se llegar¨¢, seg¨²n la opini¨®n de la mayor¨ªa de los expertos, es a un aumento moderado de los precios con revisiones trimestrales- de los mismos, como ha propuesto el ministro kuwait¨ª del petr¨®leo y actual presidente de la OPEP, Sheik Ali Khalifa al-Sabah. Esta postura parece que va a ser apoyada por Arabia Saudita, Ir¨¢n, Emiratos Arabes y Venezuela. El jeque saudita Yamani, en unas declaraciones realizadas en agosto, apoy¨® el sistema de peque?os y graduales aumentos de precios, sin especificar su cuant¨ªa. El ministro de Energ¨ªa y Minas de Venezuela, Valent¨ªn Hern¨¢ndez Acosta, durante su viaje a Kuwait el pasado septiembre, declar¨® a Oilgram News Service que se deb¨ªa evitar una situaci¨®n similar a la de 1973, cuando la cuadruplicaci¨®n de los precios petrol¨ªferos, y m¨¢s tarde a?adi¨® que ?quiz¨¢ valdr¨ªa la pena establecer unos aumentos peri¨®dicos de, por. ejemplo, el 2 ¨® 3 % trimestral, y fijar un per¨ªodo de tiempo de dos a?os en lugar de hacer un aumento al comienzo de cada a?o?. Otros pa¨ªses, como Indonesia, han manifestado que apoyar¨¢n una subida oscilante entre el 8 y el 10%, mientras que Argelia y Libia apoyan subidas mucho m¨¢s cuantiosas (hasta un 25 %), y otros no especifican la cuant¨ªa, pero exigen un aumento inmediato, como Nigeria.