"Que viene el tren, que viene el tren" gritaron los ni?os al conductor del autob¨²s
?Que viene el tren, que viene el tren, no libramos?, advirtieron los ni?os que viajaban en el autocar a su conductor cuando vieron que una m¨¢quina de tren se aproximaba al paso a nivel que el autob¨²s se dispon¨ªa a cruzar. ?Pasamos, pasamos?, dijo Sebasti¨¢n Aire, de veinticuatro a?os, que no hizo caso a la advertencia de los peque?os. Y la m¨¢quina arroll¨® al autocar parti¨¦ndolo por la mitad. La parte delantera era arrastrada 150 metros, mientras el techo del autob¨²s quedaba incrustrado en la m¨¢quina, que logr¨® detenerse a unos doscientos metros del paso a nivel. Veintis¨¦is cad¨¢veres de ni?os entre ocho y doce a?os quedaron sobre las tierras heladas, mientras cerca de cincuenta permanec¨ªan gravemente heridos, dos de los cuales fallecieron posteriormente en el hospital. Algunos con peque?os rasgu?os no se atrevieron a moverse de los lugares en que hab¨ªan quedado. En el autocar viajaban en el momento del accidente cerca de noventa muchachos, que acud¨ªan a la escuela. Eran las 9.10 de la ma?ana de ayer.
En el autocar de la empresa Hermanos Mart¨ªn, de Salamanca, viajaban ni?os de Carrascalejo, La Sagrada, San Mu?oz, Ardoncillero y Mu?oz. El veh¨ªculo acababa de recoger a unos veinte ni?os en este pueblo, y se dirig¨ªa hacia La Fuente de San Esteban, donde se encuentra el colegio nacional al que acud¨ªan habitualmente los ni?os de estas localidades.El paso a nivel se encuentra en el camino vecinal que une Mu?oz con la N-620, en el kil¨®metro 53,100 de la l¨ªnea f¨¦rrea Medina del Campo-Fuentes de O?oro, y a poco m¨¢s de cincuenta kil¨®metros de Salamanca en direcci¨®n a la frontera portuguesa.
Algunos ni?os que salieron del accidente con leves lesiones comentaron que ellos le hab¨ªan advertido al conductor la proximidad de la m¨¢quina, a lo que aqu¨¦l respondi¨® que no tendr¨ªa problemas para atravesar el paso a nivel. El autocar ten¨ªa que superar una rampa que, dado el peso del veh¨ªculo, dificultaba el stop exigido por la falta de visibilidad del lugar del cruce, debido a las,dos casetas de Renfe que constituyen el apeadero de Mu?oz. Estas casetas impiden la visi¨®n por la derecha del autob¨²s, lugar por el que apareci¨® la m¨¢quina.
La colisi¨®n tuvo lugar entre la m¨¢quina Diesel 2.148, que conduc¨ªa Agust¨ªn Prieto, de 45 a?os, acompa?ado de su ayudante, Enr¨ªque Girela, de veintitr¨¦s, y el autob¨²s Setra-Seida, matr¨ªcula SA-41.408, que conduc¨ªa Sebasti¨¢n Aires, un joven de Ahigal de los Aceiteros que resid¨ªa en La Fuente de San Esteban. El autocar pasaba diariamente por el lugar del suceso en cuatro ocasiones.
Primeros auxilios
Las primeras personas que llegaron al lugar lo hicieron poco antes de las nueve y media de la ma?ana. Entre ellas se encontraba el m¨¦dico de Boadilla, que practic¨® un reconocimiento de primera urgencia a los ni?os y dispuso el traslado inmediato de los que parec¨ªan m¨¢s graves. En aquel momento se certific¨® la defunc¨ª¨®n de veintid¨®s y de un hombre de 57 a?os, Eutilio Benito, que acompa?aba a su hijo al m¨¦dico. Otros veintiocho muchachos eran trasladados a la residencia Virgen de la Vega, y cuarenta al hospital Cl¨ªnico de Salamanca. Sin embargo, en el lugar del accidente fueron veintisiete los fallecidos. Dos ni?os morir¨ªan posteriormente, en el hospital.
Aunque en un primer momento se aprovecharon los coches particulares que llegaron al lugar del accidente, poco despu¨¦s se desplazaron ambulancias de Salamanca, mientras las emisoras de radio solicitaban sangre en los centros asistenciales, muy pronto repletos de personas dispuestas a realizar donaciones. Los m¨¦dicos internos y residentes que se encontraban en huelga y celebraban asambleas en ambos centros suspendieron las mismas para incorporarse a los trabajos de urgencia.
La confusi¨®n fue muy grande en el lugar del suceso y las escenas de horror se agudizaron a medida que llegaban los p¨¢dres de las v¨ªctimas. La identificaci¨®n de los ni?os result¨® dram¨¢tica. En la v¨ªa quedaban miembros de algunos, masa encef¨¢lica, abundante sangre entremezclada con libros, cuadernos y prendas de vestir de los escolares.
Algunos padres se negaron a esperar la llegada del juez de Ciudad Rodrigo y a que se tomaran los datos oportunos para trasladar a sus casas a sus hijos muertos, lo que d¨ªficult¨® cons¨ªderablemente la confirmaci¨®n de la cifra de las v¨ªctimas. A ¨²ltima hora de la tarde de ayer, la Guardia Civil de La Fuente de San Esteban confirmaba el n¨²mero de veintisiete muertos, a los que hab¨ªa que sumar otros dos ni?os fallecidos en el Hospital Cl¨ªnico. Otros nueve se encontraban en la sala de reanimaci¨®n de la Residencia Sanitaria y otros tantos en la unidad de vigilancia intensiva del Cl¨ªnico con lesiones de pron¨®stico muy grave.
El conductor del autocar, cuyo estado no reviste mayor gravedad, qued¨® internado asimismo en la residencia de la Seguridad Social. Anoche no cesaba de decir: ?Los ni?os me dijeron: que viene el tren, que viene el tren, que no pasamos.?
La llegada de las madres
Entre los casos m¨¢s pat¨¦ticos sobrecogi¨® el de una madre que hab¨ªa obligado a su hija a ir a la escuela despu¨¦s que la peque?a le hubiera repetido que no quer¨ªa hacerlo y que la encontr¨® muerta. Por el contrario, otra mujer no pod¨ªa contener su emoci¨®n porque su hija hab¨ªa pasado la noche fuera de su casa en un pueblo m¨¢s pr¨®ximo a la Fuente de San Esteban, ya que la familia hab¨ªa decidido realizar la matanza en el d¨ªa de ayer, lo que decidi¨® que no viajara en el autocar.
Sin embargo, el hecho que dio mayor medida de la cat¨¢strofe y de la terrible escena fue la expresi¨®n de una madre que despu¨¦s de haber perdido a dos hijos todav¨ªa se mostraba resignada y casi satisfecha porque le quedaba uno con vida. El sobrecogedor silencio de los ni?os tras el accidente -testigos presenciales aseguraron que no se hab¨ªa escuchado un solo grito de dolor- result¨® asimismo impresionante. La impresi¨®n les dej¨® quietos y mudos. Y a estos pobres pueblos salmantinos desolados. La imagen de un ni?o que con leves heridas apareci¨® sentado sobre un sill¨®n del autocar de los pocos que quedaron enteros no lo olvidar¨¢n quienes ayer conocieron de cerca la cat¨¢strofe.
Renfe: todo en orden
El Ministerio de Transportes y Comunicaciones orden¨® ayer una exhaustiva investigaci¨®n sobre el accidente, seg¨²n inform¨® a Efe una fuente oficial, para averiguar las causas del mismo. Fuentes de la Direcci¨®n General de Transportes se?alaron ayer que, en una primera impresi¨®n, ?es inexplicable de todo punto c¨®mo el autob¨²s pudo atravesar la v¨ªa?.
El gabinete de informaci¨®n de Renfe difundi¨® anoche un comunicado en el que se afirma que ?el paso a nivel en el que se produjo la colisi¨®n cumple absolutamente todos y cada uno de los requisitos establecidos por la legislaci¨®n vigente, ya que tiene una densidad de circulaci¨®n muy inferior a la que se exige para implantar barreras?.
?El paso a nivel?, seg¨²n Renfe, ?tiene perfecta visibilidad desde el camino y est¨¢ debidamente se?alizado. Las condiciones atmosf¨¦ricas en el momento del choque no imped¨ªan la visibilidad?.
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