Urge una reestructuraci¨®n total
Durante los ¨²ltimos inviernos los profesionales del toreo vienen poniendo sobre el armaz¨®n de sus tablas reivindicativas la necesidad de que se reestructure el espect¨¢culo, y as¨ª lo han hecho ahora, de nuevo, los que est¨¢n encuadrados en la UGT. Durante la temporada son los propios aficionados, quienes, d¨ªa a d¨ªa, palpan la urgencia de que esa reestructuraci¨®n se. lleve a cabo. Hay, en uno y otro estamento, dos constantes: el Gobierno, que olvida el espect¨¢culo, y el asfixiante cerco del monopolio empresarial.Est¨¢n en raz¨®n los aficionados verdaderos cuando denuncian la crisis t¨¦cnica del espect¨¢culo, y los profesionales cuando airean una serie de cap¨ªtulos en los cuales se demuestra que sus derechos profesionales y laborales se encuentran en el m¨¢s lamentable de los desamparos. Pero unos y otros apenas conseguir¨¢n nada positivo si act¨²an en solitario, como si cada bloque de problemas fuera totalmente independiente del otro.
Hay, por cierto, una perceptible colisi¨®n entre ambos grupos, los cuales suelen situarse en posiciones encontradas. Se pudo apreciar en las reuniones para la reforma del reglamento: la mayor parte de las cuestiones que afectaban a la t¨¦cnica de la lidia suscitaban largos y apasionados debates entre aficionados y profesionales, y lo habitual era que, lejos de llegar a un acuerdo -aunque fuera de mero compromiso-, conclu¨ªan haci¨¦ndose fuertes, manifestando criterios irreconciliables.
Y, sin embargo, todo est¨¢ ¨ªntimamente ligado. La crisis t¨¦cnico-art¨ªstica del espect¨¢culo deviene del control empresarial de la fiesta, que limita las posibilidades de formaci¨®n y promoci¨®n de los toreros. La reestructuraci¨®n, en consecuencia, por la que siempre hemos abogado, debe ser en profundidad, globalizada y, por supuesto, hay que hacerla con urgencia. La meta, a nuestro entender, debe ser ¨¦sta: en lo t¨¦cnico-art¨ªstico, recuperar la tauromaquia que se desarroll¨® en plenitud durante la d¨¦cada de los a?os treinta; en los econ¨®mico, social y laboral, construir una organizaci¨®n nueva, de vanguardia, al l¨ªmite m¨¢ximo que inspiren las m¨¢s modernas estructuras de otros espect¨¢culos y que permitan los derechos constitucionales.
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