F¨¢bula del amor total

Quiz¨¢ la virtud m¨¢s se?alada, entre las muchas que adornan este buen filme franc¨¦s, sea la sencillez aparente con que se ha tratado un tema bastante hondo y complejo. Lejos del tan temido ?intelectualismo?, capaz de arruinar tantos filmes de sus compatriotas, Coline Serreau, ligada ya anteriormente al teatro y al cine, ha acertado en este su primer trabajo largo a plantearnos un problema moral bien actual en nuestra sociedad cambiante.Como todos sabemos, los antiguos esquemas de la relaci¨®n entre hombre y mujer hacen agua por todas partes, al menos entre los automarginados y los j¨®venes. La vida familiar se resquebraja, sustituida por otros tipos de comunidad, no sabemos si mejores o peores, mas radicalmente diferentes. Coline Serreauho nos viene a hablar en su filme de problemas generacionales, al menos no es ¨¦sa la raz¨®n principal de su filme, sino de la posibilidad de que hombres y mujeres vivan lejos de los m¨®dulos habituales, impuestos por la sociedad que les rodea.

No nos ofrece ninguna soluci¨®n, tan s¨®lo pone en marcha a sus personajes, d¨¢ndoles la oportunidad de tolerarse, amarse o respetarse, al margen de una ley que ellos pretenden adoptar como v¨¢lida. Sus problemas no surgen con el mundo en torno. Si los hay est¨¢n vistos a trav¨¦s del humor. Los aut¨¦nticos nacen entre ellos mismos cuando el protagonista principal de la familia improvisada decide abandonar a sus amigos, a la vez hijos y amantes, poniendo en peligro la vida del grupo como tal. Este personaje que es a la vez padre, madre y amante de los otros, centra en s¨ª la clave del filme, de esta par¨¢bola en im¨¢genes reales donde, como el t¨ªtulo indica, nada se afirma, en una especie de propuesta a los espectadores.

A medias entre el humor de buena ley y un sosegado dramatismo que no siempre llega a conmover, Coline Serreau ha realizado, sin embargo, una excelente ?opera prima?, no s¨®lo por la novedad del tema, o su planteamiento directo y contundente, sino tambi¨¦n porque, trayendo a la memoria filmes parecidos de la ya olvidada ?Nueva Ola? francesa, ha sabido asimilarlos con total validez, d¨¢ndoles nueva forma en una historia original, actual y de personalidad evidente.