El Gobiemo considera controlada la situaci¨®n en la Polic¨ªa Armada
El an¨¢lisis global de la situaci¨®n del orden p¨²blico, en el que destacan la escalada terrorista y la crisis abierta en la Polic¨ªa Armada con las dimisiones de algunos jefes, sigui¨® ocupando ayer la atenci¨®n del presidente del Gobierno, Adolfo Su¨¢rez, quien mantuvo una larga reuni¨®n desde las diez de la ma?ana hasta despu¨¦s de las dos de la tarde con el ministro de Defensa, teniente general Guti¨¦rrez Mellado; el ministro del Interior, Rodolfo Mart¨ªn Villa, y otros altos cargos del departamento, adem¨¢s del gobernador civil de Madrid, Juan Jos¨¦ Ros¨®n, y el jefe superior de Polic¨ªa de la capital, Francisco de As¨ªs Pastor.
La serie de dimisiones en cadena que en alg¨²n momento se temi¨® que se produjera en el seno de la Polic¨ªa Naciona, parece circunscribirse a la del general subinspector del cuerpo, se?or Bartret, a la del teniente coronel Valverde, segundo jefe de la circunscripci¨®n de Madrid; a la del teniente coronel Polavieja, director en funciones de la Academia de la Polic¨ªa Armada, y a alguna otra cuyos protagonistas se desconocen, pero que en ning¨²n caso, seg¨²n se inform¨® en fuente competente, llegan a la media docena.Operaci¨®n abortada
En medios oficiales se daba ayer por abortada la operaci¨®n llevada a cabo por el general Bartret, que de haber sido secundado hubiera supuesto de hecho, y acaso lo haya sido de intenciones, la maniobra desestabilizadora m¨¢s grave desde la ?operaci¨®n Galaxia?, en la que presuntamente se vieron envueltos oficiales de la Polic¨ªa Armada destinados precisamente en la Academia de la Polic¨ªa Armada y en el Estado Mayor del cuerpo. Informaciones recogidas ayer en alg¨²n medio informativo apuntaban que la actitud del general Bartret hab¨ªa encontrado un eco favorable en el Estado Mayor del mencionado cuerpo policial.
Sin embargo, la f¨®rmula t¨¦cnica por la que tienen que producirse las dimisiones, esto es, mediante solicitud de baja en el destino actual y petici¨®n de reingreso en el Ej¨¦rcito, puede llevar a un escalonamiento de las posibles dimisiones.
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El general Bartret convoc¨® a los jefes de la Polic¨ªa Nacional tras su dimisi¨®n
(Viene de primera p¨¢gina)Las consecuencias de una operaci¨®n masiva de reingreso al Ej¨¦rcito por parte de oficiales y jefes con destino en la Polic¨ªa Nacional supondr¨ªa, seg¨²n observadores cualificados, un desaf¨ªo de gran envergadura al Gobierno y al ministro del Interior en un momento en que se intenta instrumentalizar una batalla eficaz contra el terrorismo. El problema estar¨ªa m¨¢s que en el grado de competencia de los presuntos dimisionarios en las dificultades que se encontrar¨ªan para buscarles sustitutos.
En este sentido cabe recordar lo complicado que result¨® encontrar apenas veinte jefes y oficiales para llevar a cabo los relevos m¨¢s perentorios. Fue necesaria una gesti¨®n muy personal del general Guti¨¦rrez Mellado entre militares procedentes de diversas armas del Ej¨¦rcito de Tierra, que no se limitaron, como en anteriores ocasiones, a los de Infanter¨ªa y Caballer¨ªa, a fin de abrir el abanico de manera que hubiera un margen para la selecci¨®n de los m¨¢s id¨®neos. A pesar de ello el margen de selecci¨®n, aunque suficiente, no fue muy holgado.
El nombramiento del genera Tim¨®n de Lara en el ¨²ltimo Consejo de Ministros para el cargo que hab¨ªa dejado vacante recientemente, por m¨¢s que la eficacia desplegada en los ¨²ltimos meses de su gesti¨®n le rehabilitara ante el ministro del Interior, es otro indicador de las escasas posibilidades de relevo entre los mandos de la Polic¨ªa Nacional.
Precisamente en este contexto es donde se puede apreciar la gravedad de la crisis abierta por las dimisiones de estos d¨ªas y muy en concreto por el general Bartret, quien, a pesar de la invitaci¨®n de sus superiores, tanto en la l¨ªnea militar como en la pol¨ªtica, de que reconsiderara su dimisi¨®n -al parecer puso como condici¨®n para ello la sustituci¨®n del se?or Mart¨ªn Villa- convoc¨® el pasado jueves a todos los jefes de circunscripciones de la Polic¨ªa Nacional para exponerles las razones de su dimisi¨®n desde una perspectiva de ?honor militar?. Es probable, aunque EL PAIS no lo ha podido confirmar, que el escrito en el que el general razona su actitud haya llegado tambi¨¦n a otros mandos inferiores de la Polic¨ªa Nacional.
La ?cuesti¨®n de honor? en que basa su descontento el ex general subinspector tiene su punto de partida en las razones aducidas ante ¨¦l por el teniente coronel Valverde para dejar el mando como segundo jefe de la circunscripci¨®n de Madrid. En principio, el teniente coronel Valverde adujo motivaciones de ¨ªndole personal, pero ante la insistencia de su superior explic¨® su dimisi¨®n como resultado de un encuentro con el ministro del Interior. En su opini¨®n, el se?or Mart¨ªn Villa ten¨ªa en muy poca estima la val¨ªa de la Polic¨ªa Armada, y sobre todo hab¨ªa hecho un comentario en la reuni¨®n sobre la actitud de la esposa de un alto milita en el funeral por el general Ort¨ªn y ciertos aspectos de su vida privada Este comentario era ?la cuesti¨®n de honor? que le obligaba a pedir el reingreso al Ej¨¦rcito.
El teniente coronel Valverde, seg¨²n consta a este peri¨®dico, no exterioriz¨® su contrariedad con ninguna afirmaci¨®n hecha en el transcurso de la reuni¨®n, particip¨® en los comentarios sobre el tema tratado y no abandon¨® la sala hasta que se dio por finalizado el encuentro.
El ministro del Interior, seg¨²n ha sabido EL PAIS, tuvo palabras muy duras para la actuaci¨®n de miembros de la polic¨ªa en el funeral por el general Ort¨ªn y por su comportamiento respecto al teniente general Guti¨¦rrez Mellado.
Oficiosamente comentaba a EL PAIS una fuente pr¨®xima al Gobierno que no deja de ser sorprendente cierto sentido del honor ante un supuesto comentario de alcance restringido ante cuatro personas y la pasividad de comportamiento ante insultos p¨²blicos al ministro de la Defensa, que ?tambi¨¦n es militar?, al presidente del Gobierno y al propio Jefe del Estado.
En otro orden de cosas, ayer fueron diversas las reuniones de trabajo en torno al orden p¨²blico. Adem¨¢s de la reuni¨®n de la Moncloa antes aludida, el ministro del Interior, mantuvo un almuerzo de trabajo con mandos de la polic¨ªa, y por la tarde el director general de Seguridad despach¨® con todos los jefes superiores de polic¨ªa. Por otra parte, ayer se reuni¨® en Madrid el Consejo Superior del Ej¨¦rcito
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