La polic¨ªa francesa pide m¨¢s medios y seguridad

Cerca de 4.000 polic¨ªas participaron ayer, vestidos de paisano, en las calles de Par¨ªs en la manifestaci¨®n que hab¨ªa convocado el sindicato m¨¢s representativo, la Federaci¨®n Aut¨®noma de Sindicatos de Polic¨ªa, que agrupa al 80% de los polic¨ªas sindicados. Al dislocarse el cortejo, ruidoso y de cierta gravedad, ante la Prefectura de Polic¨ªa, se produjeron algunos incidentes. Las peticiones de m¨¢s seguridad - 131 polic¨ªas han muerto durante los tres ¨²ltimos a?os- y m¨¢s medios fueron los objetivos de la movilizaci¨®n.M¨¢s o menos visible, el malestar es un! constante delcuerpo de polic¨ªa en este pa¨ªs desde que, en mayo de 1968, las barricadas estudiantiles ?nos abrieron los ojos? seg¨²n dicen ellos. La manifestaci¨®n de ayer, organizada por su sindicato aut¨®nomo pero apoyada por las centrales de izquierdas CGT, de tendencia comunista, y CFDT, socialista autogestionaria, concret¨® en dos sus reivindicaciones precisas: insuficiencia de medios presupuestarios y, por otro lado, denuncia de la inseguriclad profesional.

En relaci¨®n con este ¨²ltimo apartado, el de la inseguridad, los datos aportados por estad¨ªsticas oficiales arrojan un balance preocupante, aunque los ¨²ltimos a?os se viene observando un decrecimiento sensible de los muertos y heridos entre las fuerzas del orden.

Las cifras de 1978 a¨²n no se conocen. Durante los tres a?os precedentes, el balance global se establece as¨ª: en 1975 hubo 51 muertos y 1.718 heridos. En 1976 los muertos fueron 46 y los heridos 1.763, Y en 1977 la cifra de muertos baj¨® a 34, y la de heridos a 1.503. La mayor¨ªa de muertos, como de heridos, no se produjo en operaciones programadas, sino en actos concernientes a los diversos servicios poficiales.

La polic¨ªa francesa, como cada ciudadano, admite los riesgos propios de una profesi¨®n que ha escogido por iniciativa individual. Pero las ?incoherencias? de las autor?dades, de las que frecuentemente son v¨ªctimas, ya hace varios a?os que roen la moral. de un cuerpo disciplinado por principio. Entre las quejas que se escuchan o se comentan, pr¨¢cticamente a diario, cabe rese?ar algunas: ?Nuestra profesi¨®n, por naturaleza, se desarrolla en medio de la violencia. Morir o ser herido, en consecuencia, forma parte de los riesgos normales. Ahora bien, nosotros queremos saber por qu¨¦ morimos y lo que no deseamos es morir por nada.? Otro polic¨ªa: ?Se nos pide que luchemos contra la violencia, pero vemos que no se remedian las causas verdaderas.? Otra estimacil¨®n de la base policial: ?Hay que luchar contra el terrorismo, sin duda. Pero, con demasiada frecuencia, en nombre de la raz¨®n de estado, los asesinos se evaporan con toda clase de facilidades.?