Gutierrez Mellado seguir¨¢ al frente del Ministerio de Defensa
El teniente general Guti¨¦rrez Mellado no ha presentado la dimisi¨®n de su cargo como ministro de Defensa ni la presentar¨¢ antes de que concluya el per¨ªodo electoral. Esta afirmaci¨®n rotunda ha sido hecha en c¨ªrculos muy pr¨®ximos al ministro, ante la avalancha de informaciones que en las ¨²ltimas semanas ponen en cuesti¨®n su permanencia al frente del departamento.
La animadversi¨®n de algunos sectores de las Fuerzas Armadas hacia el ministro no es nueva, aunque haya podido agravarse en las ¨²ltimas semanas y se haya tratado de potenciar con insistentes presiones en distintos sentidos a partir del asesinato del gobernador militar de Madrid general Ort¨ªn.En c¨ªrculos pol¨ªticos se han puesto en marcha numerosas hip¨®tesis que tratan de presentar como inminente la salida del teniente general Guti¨¦rrez Mellado. Las variantes que se manejan mantienen la constante de tres o cuatro nombres militares para sustituirle, en el caso de que el cese o la dimisi¨®n tuviese lugar de inmediato: los tenientes generales Jos¨¦ Vega y Manuel Ib¨¢?ez Freire, aparecen en todas las listas.
Mezclado con lo anterior se apunta con fuerza la posibilidad de un ministro civil al frente del departamento de Defensa. Esta opci¨®n aparece, sin embargo, de cara al nuevo Gabinete que con toda seguridad ha de formarse tras las elecciones.
La hip¨®tesis de un ministro de Defensa civil se contempla con inter¨¦s en amplias zonas del Ej¨¦rcito -con independencia de ideolog¨ªas liberales o ultras- como garant¨ªa de separaci¨®n definitiva entre el campo pol¨ªtico y el militar, pero son muchos los que creen que las reformas emprendidas y las que restan por hacer en el seno de las Fuerzas Armadas pueden aconsejar y hasta exigir un interlocutor pr¨®ximo, que no podr¨ªa ser otro que un miembro cualificado de cualquiera de los tres Ej¨¦rcitos.
Las declaraciones al diario Abc del ex ministro y ex miembro del grupo parlamentario de Alianza Popular, Gregorio L¨®pez Bravo, en el sentido de juzgar como urgente la titularidad civil del Ministerio de Defensa y su afirmaci¨®n de que ?dificilmente podr¨ªa o frecerse a un espa?ol una tarea m¨¢s digna y honrosa?, fue calificada ayer en fuentes militares y en c¨ªrculos pol¨ªticos como un ?ofrecimiento descarado?. El se?or L¨®pez Bravo, que no se presenta a las elecciones y cuya pertenencia a AP nunca ha estado clara, aunque figurase en su grupo parlamentario, se muestra desusadamente locuaz sobre este tema concreto, frente a la rigurosa discreci¨®n que ha mostrado en el ¨²ltimo,a?o y medio sobre casi todos los problemas de la vida pol¨ªtica.
Una tercera hip¨®tesis que tambi¨¦n se ha barajado en las ¨²ltimas semanas es que el presidente Su¨¢rez asuma la cartera de Defensa en el pr¨®ximo Gabinete. Fuentes de la presidencia juzgaron ayer como descabe llada esta proposici¨®n. ?El presidente Su¨¢rez -dijeron- no necesita asumir ninguna cartera para que los ministros mantengan las directrices acordadas. Si un ministro falla, le corrije o le cesa, pero en ning¨²n caso lo suplanta.?
Sin embargo, el razonamiento fundamental que descarta la dimisi¨®n o el cese del teniente general Guti¨¦rrez Mellado -salvo que se presentase una situaci¨®n imprevista de fuerza mayor-, parece ser su compenetraci¨®n con el se?or Su¨¢rez. En fuentes solventes y pr¨®ximas al entorno de la Moncloa no se duda en afirmar que el teniente general Guti¨¦rrez Mellado es ?el principal basti¨®n? del propio Su¨¢rez. Esta afirmacion se completa con el comentario de que los ataques contra el ministro de Defensa, ?tiran por elevaci¨®n contra el propio presidente?, en una operaci¨®n de alto bordo que arranca desde las propuestas de un ?Gobierno neutral? para dirigir las elecciones que formularon hace varias semanas los grupos m¨¢s derechistas.
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