Efectismo culto

Andrzej Wajda es el genio oficial y exportable de la cinematograf¨ªa polaca, su cl¨¢sico vivo. Su obra se divide en dos partes claramente diferenciadas, exageradamente diferenciadas. A la primera, compuesta por obras de estilo conciso y directo, de tem¨¢tica m¨¢s o menos existencial, pertenecen sus mejores pel¨ªculas: Canal, Cenizas y diamantes, Los brujos inocentes, etc¨¦tera. La segunda ¨¦poca del cine de Wajda se caracteriza por algunos sionos externos como son la utilizaci¨®n del color, la presencia sistem¨¢tica del actor Daniel Olbrychski y el barroquismo de su realizaci¨®n. De esta ¨¦poca son Todo est¨¢ a la venta -su obra m¨¢s aburrida y vac¨ªa-, Paisaje despu¨¦s de la batalla, El bosque de abedules o La tierra de la gran promesa. A ella pertenece tambi¨¦n La boda, Su procedencia teatral se revela, adem¨¢s de en su ¨²nico decorado, en el empe?o que pone Wajda por huir de esta limitaci¨®n espacial a cualquier precio. La boda presenta la reuni¨®n en la casa de campo de un pintor de un grupo de intelectuales, artistas y burgueses de Cracovia para celebrar la boda de un poeta y una campesina. El anfitri¨®n se cas¨® a?os atr¨¢s con otra campesina. Este maridaje ecol¨®gico de la cultura y la naturaleza es en realidad el tema de la pel¨ªcula, al menos el que m¨¢s interesa a Wajda para su espect¨¢culo visual. Este parece haber perdido para siempre su sobriedad de anta?o y la ha sustituido por la f¨®rmula del movimiento y la brillantez continuos. Tras sus planos artificialmente largos, sus objetivos anam¨®rficos, su puesta en escena desenfrenada y su b¨²squeda de la belleza pl¨¢stica por encima de todo, se adivina a un artista cansado y sin nada nuevo que contar, cuyos progresismos formales -¨²nicos que se permite- resultan viejos de nacimiento. Ser¨ªa una l¨¢stima que Wajda se convirtiese en el Russell del cine del Este, lo que si todav¨ªa no es una realidad, no parece tampoco muy lejano.Como el pintor de su pel¨ªcula al casarse con la campesina, Wajda busca ?modelos naturales y fresca inspiraci¨®n?, pero como los resultados dejan ver la frescura y la pureza ya no est¨¢n a su alcance, o est¨¢n re?idos con lo conscientemente art¨ªstico.